Mamuts de la corrupción se han robado más un billón de pesos en Bogotá, según Contraloría

Caso más aberrante está en la vía Soacha - La Mesa, donde la maleza se traga la maquinaria con que Odebrecht debía construir el interceptor Tunjuelo - Canoas.
El 30 de diciembre de 2009, el Acueducto le entregó al consorcio Canoas, integrado por Odebrecht y el grupo Solarte, la construcción de la megaobra clave para descontaminar el río Bogotá.
En el mismo lugar donde debería estar la megaobra, siete años después, solo hay un arbusto. Por si no fuera suficiente, la justicia ordenó indemnizar con 9.000 millones de pesos a la multinacional envuelta en un escándalo mundial por sobornos.
El contrato por 243.000 millones de pesos ha dado para demandas, tribunales de arbitramento, condenas al Distrito, peritazgos ambientales e incluso la denuncia del pago de un soborno por más de 14.000 millones de pesos.
Lo más grave es que el proyecto quedó inconcluso. Sin embargo, el gerente del sistema maestro del Acueducto de Bogotá aseguró que la obra ya logró destrabarse. No obstante, Uriel Gómez dice que el tiempo que ha estado detenida podría considerarse un sobrecosto.