Empleados y directivos de la empresa de transporte escolar aún no se explican cómo ingresaron los ladrones a las instalaciones, ubicadas justo a cincuenta metros del CAI Oneida. Cuentan los afectados que al llegar al sitio vieron las oficinas en completo desorden.
“Destruyeron cámaras, destruyeron archivos, destruyeron documentación, se llevaron el dinero, destrozaron la caja donde se recibe el dinero”, relató Karina Vera, empleada de la empresa. Una característica que llama la atención es que las cerraduras no fueron forzadas.
El robo supera los $200 millones de pesos entre elementos de oficina, como 30 computadores, y dinero en efectivo. Expertos de la Sijin se encuentran en el sitio realizando la inspección para identificar huellas dactilares de los delincuentes.
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