Hijo de tigre… El golazo olímpico del hijo de Mao Molina

Mauricio Molina se paró en el tiro de esquina. Su espalda daba hacia miles de seguidores de Atlético Nacional, su mirada hacia el oriente.

Acomodó el balón y lo tiró. La esférica se elevó, surcó los aires y dejó sembrado al arquero de Nacional, Andrés Saldarriaga. Se metió al arco, beso la red y conquistó el corazón de los hinchas del Deportivo Independiente Medellín, su equipo.

Finalmente, el rojo perdió el clásico. Fue 2-1. Pero hoy, 15 años después, pocos hablan del resultado del partido de ese domingo 15 de junio de 2005.

En la retina de los hinchas quedó el golazo de Mao Molina, muchos le piden que lo repita.

Pero hay un video rodando en las redes sociales que ilusiona a quienes siguen al ídolo, al 20, que podría levantar este domingo un trofeo más de campeón con el Equipo del Pueblo.

En la grabación se ve a su hijo Alejandro parado en un tiro de esquina. Defiende los colores de Club Deportivo Estudiantil. No es zurdo, como su papá, pero demuestra que tiene la pegada impecable, una herencia innegable.

Acomoda el balón, lo tira. La esférica se eleva, surca los aires y deja sembrado al arquero rival.

Golazo, ilusión, el fútbol podría estar preparando una nueva estrella, Alejandro Molina, el hijo del ídolo de todos, el hijo del tigre.