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Buscan que Medellín sea centro de postproducción de sonido en Suramérica

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La iniciativa es de Clap Studios, empresa constituida en octubre de 2011 por el productor audiovisual Gabriel Pérez, el diseñador sonoro Daniel Vásquez (director de postproducción) y el ingeniero de mezcla Daniel Jaramillo (supervisor de sonido).

Clap Studios, cuyo nombre alude a la claqueta usada en cine o la palmada que se da para verificar la acústica de un lugar, es “una productora audiovisual y centro de postproducción de sonido”, dijo el gerente de la firma, Gabriel Pérez.

Sus fundadores, todos graduados en el extranjero, apostaron por la posibilidad de establecer en Medellín un estudio certificado y para cristalizar esta idea se apoyaron en el Parque del Emprendimiento, que les brindó asesoría y acercamiento con otros actores.

“Estamos apostándole a que esta ciudad se va a desarrollar y que pueda ser una plataforma para que nos vea toda Suramérica”, agregó Pérez, para señalar que el mercado de Clap Studios no es solamente Colombia sino países como Perú, Ecuador, Bolivia, Venezuela, Centroamérica, Panamá y México.

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Desde 2012, cuando iniciaron formalmente operaciones, esta firma ha facturado unos 100.000 dólares, cifra que espera se convierta en trimestral o semestral en los próximos años, y que alcanzaron tras haber participado en producciones de Reino Unido, Estados Unidos y Colombia.

Pérez aseguró que se dedican a gestionar proyectos sonoros desde su concepción hasta el producto final, así como piezas para publicidad, televisión y cine en lo relativo a edición de sonido, grabación y edición de efectos, doblajes y locuciones, entre otros.

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Y es que, según su socio, Daniel Vásquez, después de toma de escenas en un set, todas las producciones “tienen algún tipo de proceso sonoro”.

Este puede ir desde la inclusión de música hasta “el más mínimo detalle” para películas de cine en las que se tienen en cuenta aspectos como los movimientos de los personajes, la manipulación de los objetos, efectos especiales o la creación de sonidos.

“En Clap Studios hacemos toda la parte de sonido, desde montar los diálogos, ver cuáles son los que quedaron bien, limpiarlos, agregar efectos que nos puedan hacer falta, que la música esté correctamente”, añadió Vásquez.

Pero su principal reto es la puesta en funcionamiento en los próximos meses de un teatro de mezcla para cine que, con las dimensiones de una sala tradicional, permitirá ultimar los detalles de sonido en una producción de gran formato antes de su exhibición.

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"Estamos (...) en proceso de la creación del primer teatro de mezcla para cine en Antioquia, sería uno de los pocos en el cono norte de Suramérica y lo que estamos buscando es que de aquí puedan salir las películas con su estándar para nivel mundial", explicó Vásquez.

Indicó que esperan recibir, además de producciones locales, otras de mercados como Ecuador o Perú. La proyección de Clap Studios es convertirse dentro de unos 3 o 5 años en el "centro de postproducción de sonido más importante no solo en Colombia sino en toda la zona norte de Suramérica y Centroamérica".

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