Vinieron desde el Chocó para rechazar la violencia en sus territorios y pedir atención del Gobierno, pero el sábado la Policía impidió su avance.
La Secretaría de Gobierno explicó que inicialmente la Organización Nacional de Indígenas de Colombia, ONIC, tenía planeado llevarlos a su sede en Silvania pero que sobre las 11:00 pm decidieron dejarlos en el sector conocido como El Rosal.
La difícil situación de orden público que viven en sus territorios motivó a estas comunidades a marchar hacia el centro de la capital.
También pidieron atención en salud para las comunidades.
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El domingo en la mañana, los protestantes pudieron continuar y marcharon por la calle 80 hacia la sede de la ONIC en el centro de Bogotá pidiendo ser escuchados por el gobierno nacional.
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