"Esmad no tenía armas de fuego": Policía tras choque en Aguas Tibias que dejó una indígena muerta

En esta zona del Cauca, 50 miembros de la institución trataban de evitar que los nativos se tomaran el lugar a la fuerza. Según la comunidad, los uniformados dispararon.
Efigenia Vásquez Astudillo, indígena de la pueblo Coconuco, murió tras los enfrentamientos entre nativos y la fuerza pública en el sitio conocido como Agua Tibia, zona rural de Puracé, Cauca. La mujer, de 37 años, alcanzó a recibir atención médica, pero falleció por las graves heridas de arma de fuego que sufrió.
“Lo cierto es que ayer (domingo 8 de octubre) se presentaron confrontaciones entre la fuerza pública y las comunidades en Agua Tibia. Eso es un conflicto que lleva bastantes años y que esperamos que se le dé solución”, dijo Alejandra Miller, secretaria de gobierno del Cauca.
La confrontación se presentó entre la fuerza pública y miembros de la comunidad indígena Coconuco que reclaman como suyo un balneario que, según ellos, se encuentra dentro de su territorio. 
Indígena murió en medio de disturbios entre comunidad y Policía de... Efigenia trabajó como comunicadora de la emisora Renacer del pueblo indígena Coconuco, pero, al momento de los hechos, hacía parte de una protesta indígena que reclama un terreno. La Fundación para la Libertad de Prensa lamentó lo sucedido.
“Efigenia Vásquez fue víctima de agresiones en principio atribuibles a la Policía y que, como producto de estas agresiones, murió en el Hospital San José, de Popayán”, afirmó Pedro Vaca, director de la Flip.
El coronel Pompy Pinzón, comandante de la Policía Metropolitana de Popayán, dijo que, en aras de la transparencia y ante los señalamientos de los indígenas contra la fuerza pública, la Fiscalía asumirá la investigación.
“Presenta dos orificios de ingreso, al parecer, con arma de fuego o proyectiles, los cuales no tienen orificio de salida. Entonces, esperamos que la investigación de Medicina Legal nos dé claridad sobre el hecho y qué arma le causó la muerte”, sostuvo el oficial.
Los indígenas, que permanecen a la entrada del balneario Aguas Tibias, no quisieron referirse al hecho.