En el Atlántico, un perro de la Policía de Carabineros tiene en jaque a los microtraficantes de drogas. Se trata Modric, un pastor holandés que ha ayudado a las autoridades a capturar a 274 personas dedicadas a la comercialización de estupefacientes.
El perro policía Modric ha logrado mostrar que la alianza hombre-canino funciona. El jueves ayudó a la Policía a dar un nuevo golpe contra estas bandas criminales, esta vez en el municipio de Baranoa.
El olfato del canino fue indispensable para hallar las pruebas del delito, después de una intensa búsqueda por parte de los uniformados, Modric logró hallar la droga debajo de unas piedras que se encontraban en el patio de una vivienda.
Para este perro policía, que es el primero en formar como todos sus compañeros, no hay escondite que valga: en el lugar menos pensado, este pastor holandés de tres años ubica la droga.
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El subcomandante de la Policía del Atlántico es quien cuenta los detalles del operativo.
“Una operación que permitió la captura de cinco personas por el delito de tráfico de estupefacientes, a través de cinco diligencias de allanamiento en las cuales fue vital la ayuda del canino Modric, que halló más de 850 dosis que este grupo de delincuencia común organizada distribuía en este municipio”, dijo el coronel Edwin Orlando Rojas.
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En lo corrido del año, nueve bandas delincuenciales dedicadas al microtráfico de estupefacientes han sido desarticuladas, todas por este héroe de cuatro patas.
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