Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Push Noticias Caracol
Reciba nuestras notificaciones con lo último de:
Ahora no
Activar

Publicidad

¿A su hijo le cuesta levantarse para ir a estudiar? Conozca las repercusiones de madrugar

Experto habla sobre cómo madrugar afecta a los niños, niñas y jóvenes de Colombia que inician su jornada en la mañana. Un representante de padres señala que se debe cambiar el paradigma educativo.

En Colombia, la mayoría de niños y jóvenes que estudian en horas de la mañana, especialmente en instituciones públicas, comienzan su día antes de las 6:00 a. m. Según analistas, madrugar podría repercutir no solo en su forma de aprendizaje, sino también en su salud mental.

De acuerdo con el presidente de la Federación Nacional de Padres de Familia, Carlos Ballesteros, “las instituciones oficiales no cumplen con el rigor de poder hacer una jornada única con una flexibilidad horaria que permita realmente empoderar el proceso de aprendizaje y de información”. Es por esto que los estudiantes en la jornada de la mañana deben ingresar temprano, para poderle dar paso en la tarde a los estudiantes de la jornada contraria.
Para Ballesteros, este factor se complementa con las dificultades que tienen algunos alumnos con el transporte, ya que pueden vivir en lugares retirados de la escuela, por lo que deben madrugar todavía más para poder llegar al recinto de aprendizaje.

Un estudio realizado por la Universidad de Westminster en Reino Unido reveló que las personas que se levantan antes de las 7:21 a. m. tienen niveles más altos de cortisol que los individuos que se levantan más tarde, por lo que son más propensos al estrés y al mal humor. Además, los madrugadores presentaron mayores síntomas de resfriados, dolor muscular y de cabeza.

“Hasta el momento, despertarse temprano se asociaba a una mayor concentración, y una mayor actividad, pero también a experimentar más problemas durante todo el día, así como niveles más altos de ira y menos energía al final del día. Por otro lado, las personas que se levantan tarde se asocian a un comportamiento más lento y menos ocupado”, se lee en la investigación.

El médico psiquiatra Rodrigo Córdoba comentó que el madrugar para ir a estudiar podría generar repercusiones emocionales para los niños y jóvenes, generando fobias escolares. Adicionalmente, considera que el proceso de aprendizaje debe realizarse de manera más amable para que el conocimiento se pueda recibir de forma efectiva.

Publicidad

En este mismo sentido, el representante de los padres coincide en que se debe cambiar el paradigma educativo, pues “el currículum colombiano es muy rígido en comparación a otros currículums alrededor del mundo”.

Según Ballesteros, este proceso sistémico afecta todo el modelo familiar, dado que se deben acotar los horarios de sueño y la educación debe continuar en casa con las tareas que son enviadas a los alumnos, cosa que no sucede, por ejemplo, en países como Canadá o Estados Unidos.

  • Publicidad