La trágica historia de la muerte del niño Gabriel Esteban Cubillos Rodríguez inició el pasado domingo, 2 de octubre, cuando su padre lo recogió en Bogotá. El sujeto dijo que iba a comer helado con el pequeño, pues no convive con él porque hace 5 meses se separó de la madre.
Antes de salir, dejó en el baño una USB. Horas después de haberse llevado al niño le dijo a su exesposa que revisara el contenido de la memoria, donde le detalló que pretendía quitarle la vida a su hijo y luego suicidarse para que ella iniciara una nueva vida.
A las 4:07 de la madrugada de este lunes el sujeto le envió a la madre una fotografía del cuerpo del niño con el siguiente mensaje: “Hora de fallecimiento 3:55 a.m. Asficcia mecánica [sic] no sufrió. Ahora sí puedes disfrutar sola con Edilson y Wesly, sin Tricitico y mucho menos yo. Felicidades”.
Con las dolorosas pruebas, la madre llegó hasta el grupo de desaparecidos de la Sijín a interponer el denuncio y ahí se activaron los organismos de búsqueda. Rastreando el celular del padre, la investigación desembocó en Melgar, Tolima.
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En la foto se veía un logo en una almohada y pudieron dar específicamente con el hostal. Al revisar las cámaras de seguridad del sitio descubrieron que el sospechoso había salido solo hacia las 6 de la mañana del lunes, sin ningún tipo de equipaje.
Finalmente, la Policía del Tolima realizó la inspección y encontró la macabra escena. Autoridades del departamento, así como de Cundinamarca y Bogotá, empezaron un plan candado para dar con el paradero del padre señalado de asesinar a su hijo.
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