Con proyecto de ley, buscan enfrentar fallo sobre uso de alcohol y drogas en zonas públicas

Endurecer penas y quitar beneficios jurídicos a quienes trafiquen estupefacientes, entre las medidas que propone la Fiscalía junto a varios mandatarios locales.
Estos son cuatro puntos clave de la iniciativa:
1.  Quien engañe a un menor de edad entregándole droga para que la distribuya y comercialice, principalmente en parques o entornos escolares, podrá incurrir en una pena de 10 a 12 años de cárcel.
2. Incrementar las penas para quien sea sorprendido portando más de la dosis mínima o de aprovisionamiento. Quien tenga el doble deberá ser judicializado.
3. Endurecer el castigo a reincidentes para que no puedan acceder al beneficio de casa por cárcel.
4. Quienes favorezcan a microtraficantes podrán incurrir en delitos de 4 a 8 años de prisión
Entretanto, el procurador Fernando Carrillo pidió una aclaración a la Corte Constitucional para saber cuál es el alcance del fallo.
El alto tribunal, en medio de la polémica por la eliminación de la prohibición, señaló que los derechos de los niños están protegidos en otros artículos del Código de Policía.
“Por ser sujetos de especial protección constitucional cuentan con normas precisas y específicas que los protegen”, aseguró la corte en un comunicado.
Asimismo, Álvaro García, presidente de la Corte Suprema, pidió tranquilidad frente al tema.
Descontento
Tras la decisión de la Corte Constitucional, varios ciudadanos en Bogotá grabaron videos de personas consumiendo alcohol y drogas en espacios públicos.
Un hombre dice que fue agredido cuando le reclamó a otro por fumar marihuana. "Pequeñas libertades se convierten en libertinajes”, asegura Samuel Otero, víctima. 
Y es que el descontento obedece a que la norma parecía ser bastante efectiva: según autoridades, ingerir bebidas alcohólicas y sustancias psicoactivas en la calle había sido la norma más sancionada desde el inicio del código; cada hora se multaban a 31 ciudadanos por infringirla.
En contexto:
La estrategia de la comunidad de un barrio en Bogotá para combatir consumo de drogas en los parques