Sofía Cadavid no es la primera niña que muere a manos de su progenitor, familiares o personas que están al acecho.
Luis Santiago, septiembre de 2008
Uno de los hechos que más estremeció a Colombia fue el del bebé de 11 meses, Luis Santiago, hijo de Ivonne Lozano y Orlando Pelayo.
El hombre planeó el secuestro y asesinato del niño y quiso ocultar su participación organizando vigilias en las que pedían a los criminales devolver a salvo al pequeño.
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La verdad se conoció una semana después, cuando encontraron el cuerpo sin vida de Luis Santiago en Chía y sus cómplices hablaron. Al final, Pelayo aceptó su responsabilidad en el secuestro y asesinato del bebé, que a los pocos meses tuvo un hermanito que jamás pudo conocerlo.
El confeso homicida paga una pena de 58 años sin derecho a rebaja de pena.
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Yuliana Samboní, diciembre de 2016
Rafael Uribe Noguera fue condenado por el abuso y asesinato de la niña de 7 años en Bogotá, uno de los crímenes que más ha causado repudio en Colombia.
Yuliana fue secuestrada por el hombre en un humilde barrio de la ciudad. La llevó en su carro hasta un apartamento y allí la mató.
El asesino fue condenado a 58 años de cárcel y la familia de la menor volvió a Cauca.
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Sarita, abril de 2017
La niña de 3 años fue abusada, torturada y asesinada en Armero Guayabal y los padrinos de la menor fueron condenados a 39 y 13 años de prisión por el crimen.
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Pese a que un año antes de su muerte se denunció por primera vez el maltrato contra Sara Salazar, la comisaria de familia no actuó para proteger a la inocente víctima.
No falleció como consecuencia del abuso sexual, sino por violentas maniobras de “zarandeo o sujeción", detalló el director de Medicina Legal de ese entonces, Carlos Valdés, quien aseguró que fue uno de los casos más violentos que llegó al instituto.
Cristopher, agosto de 2017
El pequeño Cristopher Ossa Sánchez, de 17 meses, murió a manos de su abuelo paterno, que lo asesinó en un apartamento en Medellín.
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Los gritos del bebé indefenso alertaron a los vecinos, que llamaron a la Policía. El hombre de 60 años, condenado a 34 de cárcel, no alcanzó a huir de la escena. Su mamá lo había dejado al cuidado de un tío porque ella estaba viviendo en otro país.
Miguel Ángel, septiembre de 2017
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Pese a que familiares y vecinos sospechaban del maltrato contra el niño de 2 años, el padrastro y la mamá del niño amenazaron a varios de ellos para que no hablaran.
Miguel Ángel Rivera Giraldo sufrió constantemente vejámenes.
“Intentamos ver qué estaba pasando, pero siempre que nos intentábamos acercar recibíamos una amenaza, siendo de mi hermana o siendo del tipo”, dijo la tía de la víctima.
Una turba intentó linchar a la pareja. Sin embargo, la Policía “lamentó que mucha gente después de que sucedieron los hechos se acercaron a manifestar que había una violencia doméstica, que había violencia contra el menor, y estas personas nunca denunciaron a tiempo”.
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Hermanitos en Patio Bonito, julio de 2018
Dos niños de 8 y 12 años fueron asesinados por su papá en su propia casa, en el sur de Bogotá.
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El crimen fue perpetrado por un escolta que, tras el crimen, intentó quitarse la vida lanzándose de un sexto piso del edificio donde residían.
El hombre, que horas después falleció en una clínica, tenía la custodia de los niños, pero la mamá, que residía en España, tenía la intención de pedirla para poder llevar a los menores a ese país.
Bebé de 22 meses, noviembre de 2019
El angelito fue asesinado por un hombre de 19 años, que llevaba cuatro meses de relación con la mamá del menor.
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El hombre, según el informe de Medicina Legal, lo abusó sexualmente y lo maltrató hasta la muerte, hecho que ocurrió en Madrid, Cundinamarca.
El crimen fue tan cruel, que el juez del caso lloró durante el proceso y pidió a la Fiscalía que no leyera los detalles de lo sucedido al menor. Además, comparó a Óscar Eduardo Orjuela Pinzón, señalado homicida, con Luis Alfredo Garavito.
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Emiliano, marzo de 2020
El pequeño tenía 2 años cuando su padre lo asesinó en un hotel de Popayán.
Según la Policía, él estaba ebrio y había escrito una nota a la mamá del pequeño, que días antes le dijo que lo iba a dejar, en la que escribió que “se lleva al niño para la eternidad”.
El asesino por poco fue linchado y las autoridades lo salvaron de la turba enardecida.
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María José, mayo de 2020
La niña de 6 años fue asesinada por Randy Champan, un adolescente de 16 que confesó a sangre fría cómo la mató a cambio de $500.000 que supuestamente su tío le ofreció para cobrarse una deuda que aparentemente tenía la mamá de la menor con él.
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Según él, después de apuñalarla la llevó viva hasta un caño en Barranquilla, donde la ahogó.
Hermanitos de 5 y 6 años, octubre de 2020
Rodolfo Bayona confesó que mató a sus hijos y, además, envió audios y fotos a su expareja mientras cometía el crimen, que estremeció a la población de Zipaquirá, en Cundinamarca.
El hombre, supuestamente, tenía problemas económicos y familiares.
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Sofía Cadavid, diciembre de 2020
La niña de un año había sido reportada como desaparecida en Rionegro, Antioquia.
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Su papá le dijo a la Policía que la había asesinado y dónde podían encontrar el cuerpo de la bebé.
Según allegados a la familia, el hombre había amenazado a la madre de la niña, a quien, además, maltrataba.
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