“Dijimos, hasta aquí Dios nos trajo”: mineros de Lenguazaque relatan la odisea que vivieron

En las entrañas de sus manos, los mineros de Lenguazaque, Cundinamarca, aún tienen los vestigios del carbón que los mantuvo atrapados bajo tierra por más de 100 horas.

Manuel Sánchez aseguró que se dieron cuenta del derrumbe solo hasta cuando intentaron salir de la mina, que quedó totalmente taponada: “nos encontramos que el coche estaba atravesado, nos asustamos, nos regresamos al nivel, nos pusimos a llorar y otros tristes dijimos ‘hasta aquí Dios nos trajo’”.

Sin embargo, pudieron mantenerse fuertes. “Nos mantuvimos allá con los tres compañeros dándonos moral y también los compañeros de afuera con quienes pudimos tener comunicación”, contó Eduardo Mateus, uno de los sobrevivientes de esta emergencia en Lenguazaque.

El minero, de 40 años, aseguró que nunca pensó en la muerte y que, por el contrario, se aferró a Dios. Para vencer el paso de las horas hicieron juegos o contaron chistes. Eso los volvió más fuertes para superar esta gran prueba.

Antonio Salas, el tercer minero, tiene 45 años. Dijo que cuando escuchó el mensaje de su hija inicialmente sintió melancolía, que pronto se convirtió en fortaleza. “Lloré al escuchar la voz de mi hija un audio que me mandó. Y mi familia… al escucharla siempre da nostalgia”, agregó.

Los tres son conscientes de que tienen una segunda oportunidad y ahora piensan que sus días en las minas de Lenguazaque terminaron.

Ya en mejor estado de salud, agradecen a quienes sin descanso cavaron hasta sacarlos vivos y a “Noticias Caracol, muy pendiente de nosotros; un agradecimiento total de parte de los tres”, expresó Antonio.

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