Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Push Noticias Caracol
Reciba nuestras notificaciones con lo último de:
Ahora no
Activar

Publicidad

En Sutatausa alzan la voz por sus montañas y el agua

Decenas de pobladores dicen que no quieren que se avance más en proyectos mineros. Creen que esta actividad podría afectar el suministro de agua y sus cultivos.

En Sutatausa alzan la voz por sus montañas y el agua

En Sutatausa hay incetidumbre. Allí, muchos creen que sus montañas y su agua, están amenazados. A este pueblo, de más de 5.000 habitantes y a dos horas de Bogotá, se llega después de recorrer 75 kilómetros desde la capital de Colombia.

Es un pueblo tranquilo, que parece, en varios de sus parajes, como si no le pasara el tiempo. Cuenta con pictogramas ancestrales y una clara vocación ganadera y campesina. Sus gentes viven de sus cultivos y están felices, eso dicen, como están. Eso sí, su preocupación es por el deterioro de sus montañas.

Algunos aseguran que, si se se da el avance de la carretera, su pueblo peligra. René Verswyvel, con más de 30 años de relación con esta población dice: "Hoy nos quieren tumbar todos esos árboles para volver todo eso. Eso que se ve allá". Y señala una montaña a su espalda. En esa colina se evidencia erosión. Esa montaña está pelada.

"Eso es una cantera", dice y muestra expresión de tristeza. Se apoya en su bastón y sus ojos verdes no lo dejan ocultar su ascendencia belga. Como él, otros ciudadanos se muestran inconformes y preocupados. María Sara de Usquén lleva 57 años en Sutatausa. Asegura, con una voz de melancolía, que el avance de los de las minas no debe ser. "Que no hagan eso porque es un perjuicio para todo el municipio", dice.

Publicidad

Y Gloria Gaitán, con humildad, hace sentir su voz por el agua: "Lo más apreciado que tenemos nosotros es el agua para cada una de las familias del municipio... Y si damos de cuenta, nace en las partes bajas el agüita, la cual está sosteniendo en este momento el pueblo y muchas de las veredas que requieren al pueblo", dice.

Calles más arriba se escuchan voces que no ocultan sus dudas. Reiteran que solo quieren que el pueblo se conserve como está. De nuevo, encontramos a René Verswyvel, quien enfatiza en su miedo: "Si seguimos así, en menos de 5 años, el municipio, la cabecera municipal donde estamos parados, no va a tener agua".

Publicidad

Ante todas esas voces manifestando su malestar, Ana María González, Gerente de Contratación y Titulación de la Agencia Nacional Minera informó que "ninguno de los contratos de concesión que se dio o se autorizó en cauce y ribera no puede hoy en nacimientos ni vertederos de agua intervenir la zona de los ríos, ni nacimiento ni vertederos de agua".

Finalmente, voceros de dos de los cuatro proponentes manifestaron que no avanzarán en su interés en la zona del pueblo porque los materiales no cumplen los requisitos de calidad para explotación minera. Un aliento de esperanza para quienes alzan la voz para salvar sus montañas.

  • Publicidad