El caso que sigue la Fiscalía por la muerte de Sergio David Urrego Reyes, quien se suicidó el 4 de agosto de este año, derivó en imputación de cargos a la entonces rectora del Gimnasio Castillo Campestre, Amanda Castillo, así como contra la psicóloga Ivón Cheque.
Castillo y Cheque deberán responder por los delitos de actos de discriminación, inducción o ayuda al suicidio y falsa denuncia contra persona determinada. Para el ente acusador, hay indicios de que las procesadas tuvieron que ver con el matoneo y discriminación que sufrió Sergio Urrego, hechos que pudieron detonar su decisión de quitarse la vida.
De acuerdo con testigos y familiares del fallecido joven, Sergio fue aislado y enviado a tratamiento psicológico tras descubrir que mantenía una relación amorosa con un compañero. Adicionalmente, los directivos de la institución denunciaron un supuesto acoso contra la pareja del joven, cuando en realidad era una relación voluntaria y consentida.
Los delitos no contemplan medida de aseguramiento en centro carcelario, por lo que sólo se realizará la imputación de cargos una vez se levanté el paro judicial.
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