En entrevista con Noticias Caracol, el comisionado de Paz, Miguel Ceballos, afirmó que las manifestaciones registradas tras la muerte de Javier Ordóñez no fueron legítimas porque no estaban autorizadas.
“Estamos todavía en la época de la pandemia, en la época del COVID, y tenemos que cuidarnos. Las manifestaciones no están autorizadas, esas manifestaciones del jueves pasado fueron totalmente ilegítimas porque deben ser anunciadas previamente y autorizadas por los alcaldes, precisamente, para diferenciar a los violentos de aquellos que marchan ordenadamente”, señaló Ceballos.
Y recalcó que “cuando una manifestación es autorizada, la gente es organizada, va por una línea, va acompañada de la fuerza pública para proteger a los manifestantes y diferenciarlos de aquellosvándalos. Lo que pasa es que el jueves pasado no eran manifestaciones autorizadas, fueron totalmente vándalos y totalmente grupos que querían desestabilizar la ciudad y salieron en plena pandemia a poner en riesgo la vida de los colombianos”.
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Según un informe de inteligencia militar revelado por el Gobierno, en las manifestaciones de la semana pasada en Bogotá hay infiltración de vándalos y grupos violentos.
“Desde hace ya varios meses la inteligencia colombiana viene adelantando una serie de investigaciones, muchas de las cuales ya están en poder de la Fiscalía y de los jueces de la República, resultado de las que vemos una presencia muy fuerte del ELN y también de las llamadas disidencias de las FARC detrás de todas estas manifestaciones violentas y toda esta destrucción que se ha generado sobre los CAI”, manifestó el comisionado.
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Además, aseguró que por los hechos violentos registrados en las protestas del mes de noviembre en Bogotá “hubo una identificación de varias personas que hoy ya están capturadas”, a través de las operaciones Apolo y San Francisco.
Estas investigaciones, dice el funcionario, “han permitido la incautación de documentos donde se identifican 20 grupos en todo el país” que utilizan el nombre de movimientos revolucionarios de otras épocas, “entre ellos el ‘Movimiento Bolivariano para una nueva Colombia’, este fue relanzado por el propioIván Márquez, cuando traicionó el proceso y se fue de nuevo a las armas”.
“Hay una serie de grupos en Bogotá, especialmente, que orientan al odio y a la destrucción de la infraestructura policial. Utilizan la sigla A.C.A.B. (All cops are bastards), que en inglés quiere decir algo muy ofensivo y es que ‘Todos los policías son bastardos’. Entonces, ese nombre ha venido siendo utilizado para aglutinar movimientos que, tras una falsa inspiración revolucionaria, terminan destruyendo clandestinamente los CAI. Destruir 75 CAI en todo el país es una acción sistemática”, puntualizó.
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