La Fiscalía dictó medida de aseguramiento contra el subintendente de Policía Buenaventura Orobio Caicedo por supuestamente facilitar a las FARC datos que permitieron a la guerrilla realizar un atentado en la Isla Gorgona en el que murió un uniformado y otros seis resultaron heridos.
Al subintendente se le imputaron cargos por terrorismo, tentativa de homicidio, homicidio agravado y concierto para delinquir, acusaciones que Caicedo no aceptó pero que podrían costarle hasta cincuenta años de cárcel, según fuentes judiciales.
La pena definitiva se establecerá en un futuro juicio con fecha aún por determinar, pero mientras tanto, el subintendente permanecerá recluido en la cárcel de Jamundí, en el departamento del Valle del Cauca (suroeste).
La Fiscalía presentó como pruebas conversaciones telefónicas que el detenido mantenía, al parecer, con el frente 29 de las FARC, en las que les brindaba información sobre los movimientos y la ubicación del puesto de policía en este paradisíaco enclave turístico del Pacífico.
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El ente también estableció a través de estas interceptaciones que el subintendente "celebró con guerrilleros de las FARC" el resultado de la incursión subversiva contra un puesto policial en la Isla Gorgona, ocurrida el pasado 22 de noviembre.
En ese ataque contra los agentes, cuyo trabajo consiste en acompañar a los turistas que visitan el Parque Nacional de Gorgona que acoge la isla, murió el teniente John Suárez Carvajal y resultaron heridos cuatro policías.
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La audiencia de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento se llevo acabo en un centro de detención previo ubicado en Bogotá, pues la huelga judicial que opera en Colombia desde octubre mantiene saturados los juzgados.
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