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Roy Barreras vaticina llegada de las FARC al Congreso

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El presidente del Senado remarcó su optimismo por la evolución de las conversaciones que se desarrollan en Cuba entre el Gobierno y la guerrilla.
"Sin duda alguna, sí", respondió Barreras en una entrevista con Efe al ser preguntado si se ve sentado en el Legislativo junto a "Timochenko" o "Iván Márquez", los máximos dirigentes de las FARC.
"Mi invitación enfática a las FARC es que no dejen pasar el tiempo, que avancen en la firma del acuerdo", remarcó al reconocer que la participación de los integrantes del grupo armado en la políticasi se llega a un acuerdo de paz es su "gran preocupación".
Barreras viajó a inicios de marzo pasado a La Habanapara entrevistarse con los negociadores de las FARC y desde entonces ha ido creciendo su optimismo sobre la pronta firma de un acuerdo.
"En mi sentir (el acuerdo) debería estar listo para el próximo 20 de julio", manifestó el legislador del oficialista Partido de la U, en referencia a la fecha en la que él dejará la Presidencia del Senado, aunque reconoció que podría retrasarse unos meses.
Barreras se expresó así en un momento clave del proceso, cuando el Gobierno y las FARC se disponen a iniciar en Cuba la negociación del segundo punto de la agenda, el referido a la participación política de la guerrilla si se firma acuerdo de paz.
También en vísperas del foro organizado por la ONU y la Universidad Nacional de Colombia, en el que a partir del próximo domingo los partidos políticos y los movimientos sociales elaborarán en Bogotá propuestas sobre ese controvertido aspecto del proceso iniciado en noviembre que serán enviadas a los negociadores en La Habana.
Pese a la buena voluntad de las partes, uno de los factores que juega en contra son las elecciones legislativas y presidenciales que se celebrarán en Colombia en el primer semestre de 2014, ya que la cercanía de esos comicios clave podría dificultar la inclusión de la guerrilla en el sistema electoral.
Por eso Barreras insistió en la necesidad de no "dilatar el diálogo" y, pese a su llamado a firmar la paz en julio, consideró que aún si se alcanzase en noviembre, "habría tiempo inclusivo de desarrollar una ley estatutaria que les permitiera esa participación política".
Para eso se explorarían, indicó, fórmulas que permitan, de forma excepcional, esa participación.
Fórmulas "más complejas", pero "también posibles", enfatizó.
Pero Barreras, hizo una advertencia: "el Congreso no avanzará un milímetro más en ofrecer ningún beneficio político hasta que quede firmada la voluntad política de las FARC de ponerle fin al conflicto".
Será entonces cuando el Gobierno presente una ley estatutaria para que la desarrolle el Congreso y "se abrirán todos los caminos" para la inclusión de la guerrilla en la vida política.
Sobre las garantías, el presidente del Senado hizo alusión a la experiencia de la Unión Patriótica (UP), un partido surgido de unos acuerdos entre las FARC y el Gobierno de Belisario Betancur (1982-1986) y que fue diezmando con el asesinato sistemático de más de 3.000 de sus militantes por paramilitares y agentes del Estado.
Para Barreras, el temor a que se repita esa amenaza no debe preocupar a las FARC, porque, indicó, "hoy hay un Gobierno con la clara convicción de proteger esos acuerdos y unas fuerzas militares que a lo largo de estos 20 años se han depurado".
"Las fuerzas armadas de Colombia y el Gobierno están dispuestos a honrar esos acuerdos", afirmó Barreras.
Por último, recomendó a la guerrilla que no deje perder la "muy buena oportunidad" que tienen los "movimientos sociales que quieren resolver el conflicto social sin armas, la misma que tuvo en su momento la Alianza Democrática M-19".
Recordó de esta manera al partido surgido tras la desmovilización de la guerrilla del Movimiento 19 de Abril en 1990, cuando muchos de sus integrantes se incorporaron a la política.
El ejemplo más significativo es el del actualalcalde de Bogotá, Gustavo Petro, quien formó parte de ese grupo guerrillero desmovilizado.
Bogotá
 

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