Un giro dio la investigación contra los soldados vinculados en la denuncia de abuso sexual cometido contra una menor indígena embera en Risaralda. Varios uniformados revelaron que fueron presionados por superiores para mentir ante la Fiscalía.
En medio del juicio disciplinario contra sietesoldados del Ejército comprometidos en la violación de una menor indígena de la comunidad embera en junio pasado, en el corregimiento Santa Cecilia de Pueblo Rico, declararon otros integrantes del Batallón de Artillería No. 8 Batalla de San Mateo que no participaron en los hechos.
Los citados afirmaron que le mintieron a la Fiscalía sobre los hechos ocurridos hace cuatro meses cumpliendo las indicaciones de un superior. El procurador delegado cuestionó a estos uniformados.
A la pregunta de por qué mintió, el soldado regular Daniel López señaló que lo hizo “por presión, porque no nos dejaron asesorar de nadie y el único que nos asesoró fue el mismo comandante y él fue el que nos dijo que dijéramos (…) el sargento viceprimero Díaz”.
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Otro de los uniformados señaló que ante la Fiscalía en Pereira mintieron porque “fue una orden de mi primero que dijo que no dijéramos lo que había pasado (…) que estábamos en un colegio”.
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Ante el cuestionamiento del procurador sobre por qué no podía decir que estaban en un colegio, respondió que no debían hacerlo “porque supuestamente nos podíamos embalar nosotros”.
En la audiencia, seis de los soldados que declararon coincidieron en esta versión. Se espera que este 16 de octubre terminen de declarar otros seis miembros de la misma unidad militar.
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