La de minifalda más corta era la encargada de hacer caer a los hombres, llevarlos a sus casas y llamar a sus compinches para agarrar cuanto podían.
El video que acompaña esta nota muestra el modus operandi de la banda, que operaba en Risaralda y otros cuatro departamentos.
La modalidad siempre era la misma: seducir a los hombres en alto estado de embriaguez y convencerlos de llevarlas a sus casas para, allí, drogarlos y robarlos.
Las mujeres, que son lideradas por una tía, fueron capturadas en Ibagué.
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Aún buscan a otras cinco mujeres que tienen más de 20 denuncias.
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