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Ni uno más: así transcurrió la #MarchaPorLaVida y en contra del asesinato de líderes sociales

Ciudadanos, Gobierno, partidos políticos y organizaciones sociales se movilizaron para pedir que paren las amenazas y crímenes contra los defensores de derechos humanos. 
Decenas de miles de personas salieron a las calles de toda Colombia en un clamor de rechazo a los asesinatos de líderes sociales, que representan las nuevas dinámicas del conflicto armado y que tienen en el punto de mira a quienes alzan la voz por sus comunidades.
Con estas marchas, que se replicaron en decenas de ciudades del país, se tuvo la voluntad de alejar las ideologías con el fin de unir a todo el pueblo colombiano bajo una sola voz.
Fue por ello que contaron con la participación de los miembros de al menos una decena de partidos de diversas corrientes ideológicas.
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Las imágenes dolorosas que dejan los ataques a líderes sociales Días antes, los movimientos políticos de la izquierda colombiana retaron al presidente Iván Duque y a sus ministros a que salieran a rechazar esta violencia que desangra el país.
A ese llamado acudió Duque en Cartagena de Indias, desde donde reiteró su "compromiso con la causa de la protección y defensa de los líderes sociales" y manifestó que no era un día para "causas ideológicas" ni de "gobierno y oposición".
Defensoría del Pueblo cifró en 462 el número líderes sociales asesinados entre el 1 de enero de 2016 y el pasado 28 de febrero, aunque otras organizaciones elevan la cifra hasta más de 700 y las amenazas se cuentan por centenares.
Por su parte, ONU ubica a Colombia como el país del mundo donde más se asesinan y amenazan líderes sociales; los departamentos más golpeados son:

  • Cauca
  • Valle del Cauca
  • Chocó
  • Putumayo
  • Norte de Santander

En la capital colombiana marcharon funcionarios de entes públicos como la Defensoría del Pueblo o algunas subsecretarías de la Alcaldía de Bogotá. En la cabecera de la manifestación se agolparon algunos de los rostros más conocidos de la política colombiana, como el senador Iván Cepeda, del izquierdista Polo Democrático Alternativo; el congresista Roy Barreras, cercano al expresidente Juan Manuel Santos y el líder de la FARC, Rodrigo Londoño, conocido en su época de guerrillero como ‘Timochenko’.
También hizo presencia el que fue el negociador de paz del Gobierno con las FARC, Humberto de la Calle, quien dijo que "una sociedad tiene que ser absolutamente clara en reprimir y reprochar todo intento de destruir el liderazgo social".
Por otro lado, el líder opositor Gustavo Petro consideró que los asesinos de líderes sociales se sienten "legitimados" por el "discurso de la violencia del Gobierno y de los sectores políticos que lo acompañan".
Entre las miles de personas que caminaron desde el Centro de Memoria Histórica hasta la Plaza de Bolívar de Bogotá, cargando su inseparable cámara, el fotoperiodista Jesús Abad Colorado marchó y no pasó desapercibido entre las decenas de personas que se acercaron a saludarlo.
El lente de su cámara ha retratado las más atroces escenas del conflicto armado colombiano los últimos 26 años, como tomas guerrilleras, masacres paramilitares y desplazamiento forzado, con un empeño constante en darle voz y dignificar la situación de las víctimas.
"Este es un país que muchas veces ha guardado silencio frente al asesinato de sus líderes, de sus hombres y mujeres que están luchando en el territorio. Una cosa es vivir en Bogotá, Medellín o Cali, pero la gente en nuestros territorios está siendo violentada, asesinada, por lo que están haciendo", explicó.
Otro de los personajes que participó fue Marino Córdoba, quien sufrió las amenazas en carne propia en 2001 cuando se exilió en Estados Unidos tras sobrevivir a una de las incursiones paramilitares más atroces de la historia reciente del país, la de Riosucio, en el departamento del Chocó (oeste), que provocó el desplazamiento forzado de más de 3.500 personas.
Ahora Córdoba es el representante legal de la Asociación Nacional de Afrocolombianos Desplazados (Afrodes) y tras su retorno a Colombia en 2012 se convirtió en una de las voces más reconocidas de la defensa de los derechos de su colectivo.
"Es realmente una tragedia lo que está pasando hoy en Colombia. La indiferencia de los políticos del Gobierno frente a la realidad del país no puede seguir sucediendo. Es el momento en que la ciudadanía tiene que levantarse y movilizarse para exigir el respeto a la vida", aseguró.
En Washington también se escuchó el grito de "¡Ni uno más!". 

En Medellín, por su parte, tuvo lugar una impactante puesta en escena en el metro.
Vea, además:
“¿Quién los está asesinando?”: Juanes desde Alemania se unió a marcha por los líderes sociales

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