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Largas horas y sin seguridad social: triste panorama de quienes laboran a través de aplicaciones

Rappi, Uber y Domicilios.com, entre otras, se han vuelto una alternativa para muchos. Los trabajadores, sin embargo, denuncian falta de garantías.
Noticias Caracol habló con varios ‘rappitenderos’, quienes señalan que laboran entre 4 y 14 horas al día, y pueden hacerse entre $30.000 y $100.000.
Esto, dicen, los ha salvado ante la falta de empleo formal y les genera recursos. Sin embargo, les inquieta la falta de ARL, EPS y de seguros, pues al movilizarse en motos y bicicletas pueden ser víctimas de accidentes.

 
Rappi, que actualmente tiene 20 mil domiciliarios y espera tener 100 mil, sostiene estas personas no son empleados sino particulares que se conectan a la plataforma. Pese a ello, argumenta la compañía, se les paga la ARL al 100% y tienen un seguro de vida al que se pueden acoger.
Domicilios.com tiene un contrato que se asemeja más al de prestación de servicios y se obliga a los domiciliarios a pagar sus aportes. “Hacen sus cotizaciones a salud y pensiones, y para que hagan esto se les paga más”, dice un representante.
El tema se repite para quienes trabajan en Uber, Didi, Picap y otras plataformas de transporte. 
En ciudades como Bucaramanga, hasta un 40% de los propietarios de motos trabajan en el mototaxismo. No reciben primas, ni cesantías. Así que algunos se las arreglan para hacer un ahorro que les sirva de colchón.

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