Dos símbolos musicales de la protesta pacífica fueron invitados a tocar con la Filarmónica de Bogotá

Un concierto de la Filarmónica de Bogotá por la no violencia tuvo dos invitados símbolo de laprotesta pacífica desde la música: la directora Susana Boreal de Medellín y el cornista Álvaro Herrera de Cali.

Susana se convirtió en referente de la resignificación de símbolos patrimoniales dentro del paro nacional. Desde la música expresa sus ideas y hoy sorprendió a los asistentes del concierto con una versión del Himno Nacional en bambuco.

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“Unir nuestras voces para hacer un llamado a la paz, a desescalar la violencia, a defender la vida por encima de todo y es la vida de absolutamente todos los colombianos”, expresó Susana Boreal.

Por eso aceptó la invitación de la Filarmónica de Bogotá, para dirigir las fanfarrias de Aaron Copland y Paul Dukas, dentro de la campaña ‘Una fuerza más poderosa’.

“El arte ha sido una herramienta muy poderosa en estas protestas, yo nunca había visto que algo así pasara anteriormente con las manifestaciones y me parece importantísimo”, agregó Susana.

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Por su parte, el cornista Álvaro Herrera pide ser escuchado. Él vivió, recientemente, un episodio de violencia en Cali.

“Hacer un llamado a respetar los derechos humanos y a construir, a través del arte, los caminos de paz", declaró Álvaro.

Un llamado al respeto y a la tolerancia por medio de la sinfonía

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