Partida prematura de Philip Seymour Hoffman (1967 - 2014)

El 2 de febrero el mundo cinematográfico perdía quizá a uno de los actores más importantes de su generación. Y es que Hoffmann era polifacético. Bien podía ser un cura acusado de abuso sexual en “La Duda”, un crítico musical en “Almost famous”, un actor con una carrera mediocre en “Mi novia Polly” y un líder religioso en “The master”.

Para la retina quedó su magnífica interpretación del escritor Truman Capote, que le valió los elogios de la crítica y un Óscar en 2005.

Fue encontrado muerto en su apartamento de Manhattan con una jeringuilla en el brazo. La autopsia concluyó que murió debido a una sobredosis de drogas.

No era un secreto los problemas del actor con el alcohol y los narcóticos, pero tras 23 años de estar limpio había recaído el año pasado.

Su funeral fue un desfile de celebridades de Hollywood que le dieron el último adiós no solo a un gran artista sino a un inmejorable ser humano.