Esta es la importancia del sueño en las mascotas

Suele creerse que durante el sueño todo se desconecta todo se apaga y no es así, es realmente donde hay mayor actividad y donde se recupera el cuerpo y la mente, por eso es tan importante las mascotas puedan dormir.

El secreto de su vitalidad reside en el sueño. Los beneficios que tiene son incuestionables en su salud física y mental: recarga las energías, mejora la digestión, descarga las tensiones y les ayuda a memorizar lo ocurrido durante el día.

Entonces ¿cuánto deberían dormir nuestras mascotas?

Sergio Garzón, médico veterinario neurólogo de @nedivetcol, lo explica así:
“el tiempo que debería dormir un perro o un gato tiene, digamos, diferencias en raza, en tamaño, en pacientes, en edad y evidentemente en especie”.

Los gatos duermen más que los perros. Con respecto a los perros, los de raza grande, duermen más que los perros chicos.

“Tanto cachorros como los pacientes seniles duermen más, y esto tiene que ver, en los cachorros, porque durante el sueño se liberan sustancias que tienen incidencia en el crecimiento y adicionalmente es donde se están desarrollando y están aprendiendo muchas cosas”, añade Garzón.

Aproximadamente el 50 por ciento del día de tus mascota está destinado a dormir. El 20 por ciento estarán realmente activas.

Y el 30 por ciento lo pasarán echados en estado de somnolencia, pero siempre vigilantes.

“Es porque finalmente son animales que llevan no muchos años, sobre todo los gatos, de domesticación y en el perro directamente que viene pues de esta relación con los lobos, siguen teniendo estos instintos de cuidado de la manada, de cuidado de la comida”, indica el médico veterinario.

Un mecanismo de defensa para pasar el menor tiempo posible indefensos.

Los perros por ejemplo tienen un sueño poli-cíclico, esto quiere decir que alternan periodos de sueño y alerta. Tienen una media de 15 a 20 minutos de sueño y 5 de vigilia y así se les va su día.

Científicamente se ha determinado que los patrones de sueño de los perros y los gatos.

Los gatos se parecen mucho a los de los humanos y se dividen en dos fases: “son una fases que inician con un sueño no REM, en donde el paciente está en vigilia y poco a poco empieza a profundizarse”, dice el neurólogo.

En el sueño de onda lenta o no REM, el corazón les late más despacio, su respiración se hace más lenta y regular, y la relajación muscular no es total, pero están muy tranquilos.

Y al igual que en los humanos, nuestras mascotas entran en una etapa de sueño profundo conocida como REM por sus siglas en inglés y que hacen referencia al "movimiento ocular rápido".

“En el sueño REM es donde hay toda una reacomodación, donde está el aprendizaje, donde hay una recuperación del sistema nervioso. Entonces para aprender, para que tenga uno nuevas experiencias y para que esas experiencias queden guardadas o para estudiar básicamente, igual en los perritos para aprender, y tener un impacto en el cerebro, tiene que tener un buen sueño REM”, afirma el experto.

Las mascotas mueven rápidamente los ojos, la cola o las patas, también puede haber vocalizaciones o gemidos, lo que no se sabe a ciencia cierta es lo que sueñan.

“Lo que se entiende o lo que se ha logrado investigar es que los sueños dependen de la actividad que tengan durante el día, entonces esos sueños estarán relacionados”, según Garzón.

De las vivencias que tuvieron durante el día, depende que el amo aparezca o no en los sueños de su mascota.

Y por eso nuestro deber es llenarlos de buenas experiencias, para que ellas siempre sueñen bonito.