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Angelo Scola, el gran papable italiano

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Que Angelo Scola sea un papable no es un misterio. En 2005, su nombre se escuchó como posible sucesor de Juan Pablo II y muchos han llegado a afirmar que Benedicto XVI renunció para darle la oportunidad de sentarse en la silla de Pedro.
Nació en Malgrate, Italia, el 7 de noviembre de 1941, en una humilde familia (su padre era camionero y su madre, ama de casa). Después de graduarse en Filosofía en la Universidad del Sacro Cuore de Milán, inició estudios teológicos en los seminarios de Saronno y Venegono, en esa ciudad.
Fue ordenado sacerdote en 1970 y, posteriormente, ingresó a la Universidad de Friburgo, Suiza, donde obtuvo el doctorado en Teología e inició su labor académica.
Hasta la década de los noventa se desempeñó como investigador en el departamento de Filosofía de esta universidad suiza y como profesor en el Pontificio Instituto Juan Pablo II para Estudios sobre el Matrimonio y la Familia de la Pontificia Universidad Lateranense, institución de la que fue nombrado rector en 1995.
En esos años y hasta su nombramiento como obispo de Grosseto, en 1991, estuvo al frente de Comunión y Liberación, movimiento del que hizo parte activa durante su formación.
En 2002 fue nombrado Patriarca de Venecia, cargo que ocupó hasta 2011, cuando fue elegido como arzobispo de Milán.
En 2003 el papa Juan Pablo II lo nombró cardenal en el consistorio del 28 de septiembre.
Habla italiano, francés y alemán. Formó parte del cónclave que eligió en 2005 al papa Benedicto XVI.

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