En la ciudad argentina de Quilmes, un ladrón destacó por su extraño comportamiento, pues tras hurtar a un establecimiento, decidió darle un beso en la mejilla a la señorita que atendía el lugar.
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Todo ocurrió en el interior de una pescadería, las cámaras de seguridad captaron cómo el hombre ingresó al negocio y preguntó por el precio de un alimento.
Posteriormente, se acercó a la vendedora y le pidió que hiciera entrega de todo el dinero, no sin antes, robar un celular que se encontraba sobre la caja registradora.
“Es un robo. Pásame la plata, dale, dale. Todo, mamá, todo, todo. Me están esperando”, se le oye decir al maleante en la grabación.
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A pesar de que la joven le indicó al delincuente que lo que hacía estaba mal, este prosiguió con el hurto.
Fue entonces que le dio a la señorita un beso en la mejilla y procedió a salir del establecimiento. Cuando la joven se acercó a la puerta del lugar, el maleante le indicó a la mujer que se quedara donde estaba.
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“Si, ya sé, pero bueno, má, quédate tranquila allá atrás. Quédate ahí, má. Estoy con un grupo, andá para allá”, concluyó el asaltante.
Por último, se observa a la víctima del robo tomar su cabeza con las dos manos, en señal de preocupación y mirar a la cámara de seguridad.
Los medios de comunicación indicaron que las autoridades realizan las investigaciones pertinentes para dar con el paradero de este ladrón.
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