Insultos racistas a jugador de origen colombiano en partido de hockey en Moscú

Seguidores del Spartak de Moscú de hockey sobre hielo imitaron gritos de mono y lanzaron plátanos a un jugador sueco de origen colombiano durante un partido de la liga continental (KHL) contra el Zagreb Medvezcak.

Edwin Hedberg, que juega en el equipo de Zagreb, tuvo que aguantar el domingo que el público le tirara dos plátanos y se burlara de él imitando a un mono, en el encuentro celebrado en la pista de patinaje Sokolniki de Moscú.

Esos gritos se oyeron después de que Hedberg y un jugador del Spartak tuvieran un altercado a mitad de partido.

"Un representante del club irá al hotel del Medvezcak para presentar nuestras disculpas oficiales a Edwin Hedberg", declaró a la AFP un portavoz del Spartak de Moscú, Vladimir Samojin.

"Vamos a realizar una investigación interna para encontrar a la persona responsable. Es la primera vez que se produce un incidente así en el Spartak. No no los esperábamos", prosiguió.

"No sé qué decir. Creo que estas cosas no deberían existir, es mi segunda temporada en KHL, pero es la primera vez que afronto el racismo", declaró Hedberg, de 21 años, citado por la agencia R-Sport.

El vicepresidente del Spartak de Moscú, Valeri Kamenski, aseguró por su parte que el club tiene intención de prohibir el acceso al estadio a los espectadores responsables.

"Las expresiones de racismo no son habituales en el hockey sobre hielo. Tenemos que cortar este mal de raíz. Hay que identificar al autor de esta ofensa y expulsarlo", dijo a R-Sport.

Los incidentes racistas sí son frecuentes en los estadios de fútbol rusos.

En julio de 2015, Hulk, el atacante brasileño del Zenith de San Petersburgo, dijo ser víctima de insultos racistas en casi todos los partidos de la liga rusa, y se mostró preocupado ante la posibilidad de que se registren tales incidentes durante el Mundial 2018 organizado por Rusia.

El ministro ruso de Deportes, Vitali Mutko, aseguró en julio de 2015 que Rusia iba a reforzar la lucha contra el racismo, después de que varios episodios racistas empañaran el comienzo de la liga de fútbol rusa.