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“No es una invención de un papa”: duro mensaje de Francisco para defender a inmigrantes y pobres

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El pontífice hizo un llamado a los católicos para que sean un ejemplo frente a los retos del mundo contemporáneo, en su tercera exhortación apostólica.
"Es nocivo e ideológico el error de quienes viven sospechando del compromiso social de los demás, considerándolo algo superficial, mundano, secularista, comunista, populista", escribió en ‘Gaudete et Exsultate’.
"O lo relativizan como si hubiera otras cosas más importantes o como si solo interesara una determinada ética o una razón que ellos defienden", recalcó.
"Suele escucharse que, frente al relativismo y a los límites del mundo actual, sería un asunto menor la situación de los migrantes", afirmó.
"Algunos católicos afirman que es un tema secundario al lado de los temas 'serios' de la bioética", lamentó en una clara respuesta a las críticas lanzadas por sus detractores por dar mayor valor a los asuntos sociales con respecto a aquellos éticos y morales.
"Que diga algo así un político preocupado por sus éxitos se puede comprender; pero no un cristiano, a quien solo le cabe la actitud de ponerse en los zapatos de ese hermano que arriesga su vida para dar un futuro a sus hijos", explicó el papa argentino tras citar el evangelio.
"¿Podemos reconocer que es precisamente eso lo que nos reclama Jesucristo cuando nos dice que a él mismo lo recibimos en cada forastero?", se interroga.
"No es una invención de un papa o un delirio pasajero", aclara con firmeza.
"La defensa del inocente que no ha nacido, por ejemplo, debe ser clara, firme y apasionada (...) Pero igualmente sagrada es la vida de los pobres que ya han nacido, que se debaten en la miseria, el abandono, la postergación, la trata de personas, la eutanasia encubierta en los enfermos y ancianos privados de atención, las nuevas formas de esclavitud, y en toda forma de descarte", escribió al defender de nuevo las bases de su pontificado.
"No podemos plantearnos un ideal de santidad que ignore la injusticia de este mundo, donde unos festejan, gastan alegremente y reducen su vida a las novedades del consumo, al mismo tiempo que otros solo miran desde afuera mientras su vida pasa y se acaba miserablemente", subrayó con tono indignado.
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