Ordenan tres años de cárcel para expresidente peruano Pedro Pablo Kuczynski

La orden es de carácter preventivo, mientras es investigado por un presunto lavado de activos vinculado a la multinacional Odebrecht. PPK está hospitalizado.

La decisión fue tomada por el juez Jorge Chávez, quien consideró que existen evidencias de que Kuczynski, quien se encuentra en una clínica de Lima, "hizo actos de conversión" de activos, ocultó y dio información falsa, y no cuenta con arraigo en el país, ya que su esposa y su familia residen en Estados Unidos.

El exmandatario, de 80 años, será informado de la decisión en la clínica limeña donde se halla, tras ser sometido a una intervención cardíaca después de una crisis de hipertensión. 

Kuczynski cumple una detención preliminar de 10 días, que finaliza este sábado, por el mismo caso, y además tiene prohibida la salida del país por 18 meses.

El fiscal del caso de LavaJato/Odebrecht, José Domingo Pérez, justificó la prisión preventiva alegando que existe peligro de obstrucción en las investigaciones si permanece libre.

Pérez desestimó también durante la audiencia del jueves solicitar arresto domiciliario en lugar de la prisión preventiva, indicando que no correspondería ya que Kuczynski no padece enfermedad grave, requisito legal para que un acusado permanezca detenido en su vivienda.

El expresidente (2016-2018) fue sometido a un cateterismo el miércoles porque su presión alta provocó un alto riesgo de obstrucción al corazón, según su médico personal Jaime del Castillo.

El abogado César Nakazaki, defensor del exmandatario, afirmó que no estaba "en contra de una investigación que ya lleva cerca de dos años", pero dijo que no entendía por qué se aplicaba "prisión preventiva para un anciano de 80 años con problemas de salud".

Kuczynski, un exitoso exbanquero de Wall Street, es investigado por pagos de Odebrecht a dos empresas ligadas a él cuando se desempeñaba como ministro de Economía del gobierno de Alejandro Toledo (2001-2006).

Odebrecht reveló a fines de 2017 que había pagado casi cinco millones de dólares por asesorías a las empresas First Capital y Westfield Capital, vinculadas con él. 

La Fiscalía asegura que Kuczynski favoreció a Odebrecht a través de un entramado legal en la construcción de la carretera interoceánica Perú-Brasil y en el proyecto de irrigación hidroenergética Olmos, en el norte de Perú.

Además, Jorge Barata, exjefe de Odebrecht en Perú, dijo a fiscales peruanos en Brasil que la empresa aportó 300.000 dólares a la campaña presidencial de Kuczynski en 2016, un monto que no figura en los registros de ingresos.

Esta revelación provocó un proceso de destitución en el Congreso, que culminó con la renuncia de Kuczynski en marzo de 2018.