Protestas contra el rey Felipe VI durante su visita a Barcelona

Cientos de manifestantes con cacerolas y gritos desaprobaron la llegada del monarca a un evento de telefonía móvil.
Al rey español le reclamaron el haber tomado una dura posición contra la independencia de Cataluña y manifestantes le exigieron la liberación de presos políticos.
En las protestas, cinco personas resultaron heridas.
En una muestra de la tensión política, la alcaldesa de Barcelona, la izquierdista Ada Colau, y el presidente del Parlamento catalán, el independentista Roger Torrent, no participaron en la recepción oficial al rey, rompiendo el protocolo.
Ambos le reprochan no haber mencionado directamente hasta ahora a los heridos de las cargas policiales ocurridas durante el referéndum de autodeterminación del 1 de octubre en Cataluña, que los independentistas realizaron pese a la prohibición de la justicia.
Se espera que el Congreso de la telefonía móvil, que se prolongará hasta el jueves, reciba a más de 100.000 personas.