La madre de Marlon Andrés y la Policía buscan al pequeño desde hace nueve días. Pese a los esfuerzos, no tienen rastro de él. Marlon Andrés Cuesta despareció el pasado lunes 5 de agosto en Villa Hermosa, al oriente de Medellín, luego de que su madre lo dejó al cuidado de unos amigos de la familia para ella ir a estudiar. Sin embargo, los responsables del niño lo dejaron salir a jugar fútbol y desde ese día se desconoce su paradero. "Les pido que se pongan la mano en el corazón y sientan este dolor que yo estoy sintiendo y me lo devuelvan", dijo Sandra Milena Cuesta, madre del pequeño. Agentes de la Policía y la Fiscalía adelantan la búsqueda del menor que cumplió 6 años el 7 de agosto, dos días después de su desaparición. Incluso, su comunidad se ha solidarizado con la situación y han realizado marchas y plantones para dar con su paradero. En días pasados, las autoridades ofrecieron una recompensa de 10 millones de pesos por Marlon Andrés, pero como no han recibido información elevaron la cifra a $50 millones. “Lo tenemos que encontrar y lo tenemos que encontrar con vida. Es muy importante que también como ciudadanos digamos algo, alguien siempre ve algo y la recomendación mía es que por favor nos den la información, que entendamos que se trata de un niño”, señaló el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez. Marlon Andrés fue visto por última vez en la estación Las Torres del metrocable línea H. Ese día, el menor de 6 años vestía una camiseta verde y pantaloneta azul. ¿Dónde está Marlon Andrés? Continúa la búsqueda del niño de 6 años perdido en Medellín
La víctima de este homicidio fue Juan Gabriel Guerra Vargas, de 34 años, encontrado por la comunidad con múltiples heridas con arma de fuego en el barrio La Ladera de Medellín. El crimen ocurrió el pasado 10 de abril y la Fiscalía capturó en las últimas horas a los dos supuestos responsables. Se trata de Diego Alexander Vargas Ríos y José David Guerra Rúa, alias ‘La Chinga’. El primero es el sobrino de Juan Gabriel Guerra, y quien habría planeado el ataque contra su tío. El día del crimen, según la Fiscalía, Diego Alexander Vargas contrató el servicio de una camioneta con el pretexto de transportar una nevera. En el vehículo el hombre recogió a ‘La Chinga’ y luego fue por su tío hasta el sector Llanaditas, del barrio Caicedo, a quien le había pedido el favor que le ayudara con el acarreo. El ente acusador señaló en un informe que “los tres hombres salieron en el vehículo hasta el barrio La Ladera del mismo sector donde supuestamente recogerían la nevera, pero al llegar a una zona aislada se bajaron y habrían asesinado con arma de fuego a Juan Gabriel Guerra Vargas”. Los responsables de homicidio luego huyeron en la camioneta. Según el reporte de homicidios de la Alcaldía, el cadáver fue hallado por la comunidad que dio aviso a la Policía e informó que el crimen, al parecer, habría sido cometido por dos hombres. La Fiscalía, luego de una investigación, determinó que alias ‘La Chinga’ recibió 300 mil pesos para cometer el delito. Vargas Ríos y Guerra Rúa fueron capturados en las últimas horas por el CTI de la Fiscalía y la Sijín de la Policía Nacional. Los delitos imputados a estos dos hombres fueron homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego. No aceptaron cargos. El Juzgado 41 Penal Municipal de Medellín, con funciones de control de garantías, les impuso medida de aseguramiento en centro carcelario mientras continúa el juicio. Se desconocen las causas que motivaron el asesinato.
Los hechos ocurrieron durante la madrugada del martes 9 de mayo en el barrio Villa Liliam, en la Comuna 8 de la capital antioqueña. Según información entregada por el Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia de la Alcaldía de Medellín, miembros de la Policía fueron atacados con arma de fuego cuando se disponían a verificar la información entregada por la ciudadanía. Miembros de la comunidad habían alertado sobre el cuerpo de un joven de 20 años encontrado en la calle, en lo que aparentemente sería un ataque a tiros. Este fue luego identificado como Juan Pablo Jaramillo Henao. Las autoridades no pudieron establecer las circunstancias en que ocurrieron los hechos ni tampoco se pudo dar con los responsables de la muerte del joven. Las autoridades ya están frente al caso que es materia de investigación.
Foto: Wilton David Mejía Bonilla (Izq.) recibió en su casa del barrio Caicedo al alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, y a su esposa, Margarita Gómez. Cortesía.A Luz Merly Bonilla Valencia le tiembla la voz. Se le dispara el ritmo cardiaco. Se le percibe ansiosa.Es la mañana del martes y está a pocos minutos de recibir en su casa, en la carrera 6F No. 54 – 52 del barrio Caicedo, a una persona a la que cualquier paisa estaría dispuesta a abrirle las puertas de su hogar.Un hombre que en solo dos meses al frente del cargo más importante de su ciudad logró que el 78 por ciento de sus conciudadanos, según una encuesta de la firma Invamer Gallup, lo viera con buenos ojos. El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez.La historia comenzó cuando Federico, como le dicen cariñosamente, llevaba 24 días como alcalde.El 24 de enero, Luz Merly escribió en un computador una carta en la que le decía que era desplazada por la violencia, que tenía dos hijos enfermos por adrenoleucodistrofia, una dolencia que afecta a una de cada 20 mil personas, y que uno de ellos deseaba conocerlo “teniendo en cuenta que es usted una persona de grandes cualidades humanas”. El otro, Eison Danilo, según ella “no tiene conciencia y sufre de cuadraplejia”.La epístola fue respondida de inmediato. Gutiérrez, por medio de su asistente personal, se comprometió a visitarla y así cumplir el sueño del pequeño Wilton David, el menor de sus retoños, quien tiene 10 años y que lleva siete meses en recuperación de un trasplante de médula ósea.Pero el tiempo pasaba y las citas de la apretada agenda del burgomaestre hacían que su llegada a la casa de Luz Merly se prolongara.Mientras tanto, ella seguía con su rutina: luchar para que a sus hijos les entregaran por medio del Sisbén el Levetiracetam, un medicamento para frenar las convulsiones que “puede costar hasta 250 mil pesos un frasquito”, y la Fludrocortisona, una droga que sirve para controlar la cantidad de sodio y líquidos en el cuerpo y que sirve para tratar la enfermedad.Nada había cambiado de los viajes a las cuatro de la mañana a las sedes de Savia Salud, en La Alpujarra o en Castilla, para hacer las filas y poder conseguir los tratamientos para sus hijos.Tampoco de las peleas con funcionarios de la Secretaría de Espacio Público para que le permitieran vender en el Parque Arví la gelatina de pata de res que produce en su casa y que le significa gran porcentaje del sustento de su familia, pues “mi esposo trabaja de vez en cuando. Si me voy a reclamar los medicamentos es él quien debe cuidar a los niños, por eso no puede colocarse de tiempo completo”, dice.Sin embargo, la hora esperada llegó.El lunes cuando transcurría la tarde el teléfono fijo de su casa timbró.“Me llamó la asistente personal del alcalde. Me dijo que él iba a venir hacia las 10 y media de la mañana. Fue una sorpresa. Por fin se iba a cumplir el sueño de Wilton”, dice Luz Merly desde su hogar, el que madrugó a asear para recibir al honorable visitante.Lo que no sabía Luz Merly era qué ruta tomaría el alcalde para llegar a su casa. Si lo haría en carro después de arribar a la cancha de El mosquito, en el sector La Arenera, en Tres Esquinas, del barrio Caicedo, o a pie, tras ascender las mismas 50 escalas de cemento que ella debe sortear con las camillas de sus hijos sufren alguna emergencia o cuando ella sale en busca del sustento.La visita esperadaDespués de 129 días la esperada visita llegó.El alcalde de Medellín visitó la casa de Luz Merly. La comitiva de escoltas, asesores y acompañantes del alcalde fue recibida por algunos vecinos y por los hijos de Néstor Iván Mejía, el esposo de esta mujer que tuvo que abandonar Cocorná (Antioquia) en 2002, su tierra natal, acosada por armados de las Farc que la iban a obligar a sumarse a la guerra.“Estuvo unos 30 minutos. Los vecinos están felices. Wilton (su hijo) también. Nos prometió que nos va a llevar a Disney. Va a hablar para que nos faciliten la visa a Estados Unidos. Me dijo que me va a ayudar a montar una microempresa de gelatina. Y a Wilton lo invitó a que conozca su sitio de trabajo, a sentarse en su silla y que lo va a anotar en una escuela de artes. Además, le trajo plastilina, porque a mi hijo le gusta hacer muñecos en plastilina, y le pidió que hiciera su cara. Él ya está dibujando la cabeza del alcalde”, relata Luz Merly.Su voz se escucha emocionada. Su vida no será igual.En la mañana del jueves, el alcalde escribió en su cuenta de Youtube: "Wilton había dicho que sería un honor conocerme, pero no, el gusto y el honor fue para mí, no se imaginan el talento y la creatividad con la que me encontré, un niño fuerte y lleno valor".
La Policía antimotines tuvo que hacer presencia en el lugar para dispersar a la comunidad. El agresor fue detenido y su familia protegida de la turba.
Constantes agresiones de parte de unos vecinos, denunciaron habitantes del barrio Caicedo, en el centro-oriente de Medellín.El último caso ocurrió en una casa de dicho barrio, donde permanecía Soany Aristizábal en compañía de su hijo, cuando una familia vecina empezó a agredirlos verbalmente. Luego fueron atacados con botellas, palos y piedras. “Yo veía a mi papá golpeado, a mis hijos, a mi hermano. Yo al ver que golpeaban a mi familia me metí, cuando vi que a mi sobrinito lo tenían aquí abajo, uno de ellos dándole con un palo en la cabeza, yo me metí y forcé con la persona a bregársela a quitar, pero cuando yo se lo logré quitar sentí el golpe aquí”, contó Soany, una de las víctimas del ataque.Varios vecinos fueron testigos del ataque.“Yo estaba durmiendo y cuando me paré, la vi a ella (Soany) bañada en sangre, el sobrino, eso fue miedoso”, dijo Rosa María Mora.Los vecinos se mostraron indignados y denunciaron que no es la primera vez que la misma familia, agrede a los residentes del sector.“Esa familia hace tiempo se la tiene montada al barrio, más que todo a la familia de ella. Tenemos dos niños y que porque los niños jugaban en la acera de ellos les tiraron agua y que allá nadie podía arrimar que porque era un problema”, cuentan.La Personería de Medellín pidió a los habitantes, denunciar a los agresores. “Cuando los hechos son repetitivos, no sólo con unos vecinos sino con varios, eso lleva a que la misma Policía y los Inspectores tomen medidas diferentes, medidas con sanciones, ya hay lesiones personales”, explica Rodrigo Ardila, personero de Medellín.Luego de los hechos, la familia agresora desocupó las viviendas y huyo sin ser sancionada.
Desde julio los docentes de la Institución Educativa Vida para Todos del barrio Caicedo de Medellín, oriente de la ciudad, vienen manifestando amenazas e intimidaciones, incluso dieron a conocer a las autoridades un panfleto amenazante.Por esta situación hay más de 1.500 niños afectados, y dos profesores han renunciado, además de tres personas de la planta administrativa.Sandra Milena Tapias, madre de un estudiante, manifestó que su hijo le informó de la suspensión de las clases de forma parcial porque los profesores están amenazados.Por su parte, la directora técnica de la Secretaría de Educación de Medellín, Yolanda Ariza, aseguró que tanto la Fiscalía como la Policía fueron notificadas de las denuncias para esclarecer lo sucedido. Agregó que los docentes amenazados fueron trasladados a otras instituciones.Hoy martes se espera una reunión de las directivas de la institución con los padres de familia sobre la situación que vive la institución, además una comisión de derechos humanos de ADIDA visitará la institución educativa.
Una grave emergencia se presentó en el sector de Caicedo, en la Comuna 8 de Medellín, donde un ventarrón destechó una casa y por poco lesiona a una niña de cinco años que dormía en un cuarto.Liliana Londoño, dueña de la propiedad, manifestó que en varias ocasiones ha llamado al 123, avisando de la emergencia, y no ha hecho presencia ni el Dagrd ni ninguna autoridad de la Alcaldía.“Lo peor es que aquí funcionada una guardería con 40 niños que no pudieron asistir por los daños, además de que el salón quedó a la intemperie”, manifestó Liliana Londoño, quien espera ayuda de las autoridades.
En Barranquilla fue desmantelada una banda delincuencial que se dedicaba al tráfico de drogas. Según la Policía, esta organización estaba bajo el mando de la rectora de un jardín infantil que tenía ese centro educativo como fachada para despistar a los uniformados.Alejandro Char, el alcalde que lucha por una Barranquilla autónoma: “No podemos depender de Bogotá”La Policía, el Ejército y la Fiscalía, en medio de varios allanamientos, capturaron a 5 personas que son señaladas de pertenecer a esta organización criminal denominada como Los Pepes, que comercializaba drogas en el Atlántico.“Dentro de las diligencias de registro y allanamiento se incautaron armas de fuego y estupefacientes, los cuales pretendían ser distribuidos en la ciudad de Barranquilla y su área metropolitana”, sostuvo el general Herbert Benavidez, comandante de la Policía Metropolitana de la capital del Atlántico.En la operación cayó alias Lili, quien sería la cabecilla de la banda y fungía como rectora de un colegio en el norte de Barranquilla. Esta noticia tomó por sorpresa a los profesores y padres de familia, que desconocían las andanzas de la mujer.Además de las armas, las autoridades hallaron drogas sintéticas. Según la Policía, la banda financiaba a otra estructura criminal para la ejecución de asesinatos.“Han sido sindicados de los delitos de tráfico de estupefacientes, concierto para delinquir y porte ilegal de armas. Con este resultado se están afectando cerca de 1.200 millones de pesos que estarían generando estas rentas criminales”, aseveró el general Benavides.Un juez legalizó las capturas y ahora continúan con las audiencias de imputación de cargos.Adolescente de 15 años, señalado de 8 homicidios en Barranquilla, intentó huir por tejados
A través de redes sociales, Sor Marta, una creadora de contenido española, comparte su experiencia como religiosa y explica muchos interrogantes de sus seguidores sin ningún tapujo. Recientemente, habló en TikTok sobre el ingreso salarial de monjas y monjes.Ellas son las monjas de la marihuana: quieren difundir el ‘evangelio’ del cannabis curativoLa mujer compartió la respuesta con sus más de 32.000 seguidores en su cuenta oficial de TikTok, dejando a muchos boquiabiertos, pues, al parecer, por ser monja no recibe un salario ni del Gobierno ni de la Iglesia.“Los sacerdotes y diocesanos que no son religiosos tienen un sueldo del obispado, porque el obispado y el obispo están encargados de la espiritualidad del sacerdote, de que esté bien y también de que pueda vivir. Pero las monjas y los monjes somos autónomos totalmente, entonces no recibimos ningún sueldo de ningún sitio, ni del Estado, ni de la Iglesia, ni del obispado, ni de nada”, subrayó Sor Marta en su video.¿Cuál es el sustento de monjas y monjes?La religiosa aseguró que su sustento deriva de las actividades independientes que pueda realizar.Así lo contó Sor Marta: “Hay monjas y monjes que tienen un sueldo, por ejemplo, porque son maestros, pero no tienen el sueldo porque sean monjas. Entonces, en nuestro monasterio concreto, que no damos clases ni nada de eso, recibimos dinero de los dulces, del museo, de la cosmética, es decir, de lo que vendemos”.También señaló que cumplen con el pago de la seguridad social, para que cuando lleguen a la edad que indica la ley se puedan pensionar y tener una vejez digna."Estamos dadas de alta como autónomas y pagamos la seguridad social. Cotizamos todos los meses para luego tener jubilación", finalizó Sor Marta en su clip.El video de la religiosa provocó la reacción de muchos usuarios de TikTok, que han comentado sobre la valentía de los hombres y mujeres que han elegido esa vocación como una forma de vida y se han desligado de muchos lujos materiales innecesarios.Supuesta monja que abandonó maleta con un cuerpo quedó libre: Arzobispado negó que fuera religiosa
Una comerciante de Rosario, Argentina, fue víctima de un insólito robo en su tienda, que fue protagonizado por un adulto y un menor de apenas 10 años. Según la afectada, el hombre inventó una “justificación” absurda para cometer dicha fechoría.Ladrones robaron un carro, pero ninguno sabía manejar y terminaron huyendo: de no creerLa víctima narró al medio de comunicación TN cómo ocurrieron los hechos: “Entraron los dos muy confiados al local como si ya conocieran todo y supieran a dónde tenían que ir. Se presentan y él me dice ‘mi mujer se está muriendo, por eso tengo que hacerlo’”.Según la mujer y gracias a lo que registraron las cámaras de seguridad del sitio, el sujeto en compañía del niño llevó a una empleada hacia el baño y luego la encerró. En ese momento, ambos empezaron a hablar aparentemente sobre lo que se iban a llevar.“No se llevaron cosas de primera necesidad. Se llevaron fernet, cigarrillos y plata. Se fueron con una bolsa gigante y una mochila específica, increíble que no los puedan encontrar. Los entendería si se hubieran llevado comida, pero el niño no agarraba masitas o chocolates. Se llevaron la plata de la caja, cigarrillos y unas 10 botellas”, indicó la propietaria de la tienda.Violento robo en un D1: cajera fue atacada con enorme cuchilloAseguró que, pese a que ya puso la denuncia correspondiente, las autoridades no han podido dar con el paradero del ladrón y el niño, que quedaron registrados en video.Estas personas, además de los productos, también se llevaron la tranquilidad de la víctima: “Escucho una moto y miro para todos lados. Tengo miedo de que me roben. Tuve que ponerle rejas a la caja del gas para que no me roben más. Vivimos con pánico en Rosario”.Sin importar que estaba recién operada y débil, ladrones se robaron una perrita en Kennedy
Un grupo de científicos e investigadores hallaron en el municipio de Socha, en el céntrico departamento de Boyacá, un fósil de tortuga gigante que data de hace 57 millones de años, informó este miércoles, 24 de abril de 2024, la Universidad del Rosario.Tortuga en peligro de extinción se convirtió en padre a los 90 años: gran noticia para su especieCon 1,5 metros de largo, el caparazón de tortuga que los investigadores encontraron permite el desarrollo de una mejor distribución biogeográfica de la fauna del Paleoceno en el norte de América del Sur.El hallazgo fue publicado este miércoles en la revista de la Asociación Paleontológica Argentina PeAPA, donde, además, detallaron que del caparazón completo también localizaron 58 especímenes con los que pudieron identificar por lo menos 21 individuos, entre los que se incluyeron crías, jóvenes y adultos.La investigación estuvo liderada por el colombiano Edwin Cadena, paleontólogo y profesor de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad del Rosario, que celebró la importancia de los descubrimientos."Es una especie que anteriormente solo conocíamos de la mina de carbón del Cerrejón (en el desértico departamento de La Guajira) y encontrarla 500 kilómetros al sur ahora en Socha nos permite reconstruir y entender cómo era el paisaje y los ambientes de Colombia hace 57 millones de años", explicó Cadena.¿Cuál fue la especie de tortuga encontrada por los científicos? La especie de tortuga hallada es la Puentemys mushaisaensis y el proyecto fue resultado de un trabajo conjunto entre uno de los líderes de la comunidad de Socha, el pintor Byron Benítez, quien es responsable de encontrar la mayoría de los fósiles en esta zona, además de paleontólogos y geólogos de Colombia y Estados Unidos.Con este descubrimiento, el departamento de Boyacá suma méritos para seguir siendo una de las zonas de Colombia con más importancia para el desarrollo de planes de protección y manejo del patrimonio paleontológico.Mujer encontró una extraña garra en el jardín de su casa: ¿es de un dinosaurio?
En la localidad de Laferre, Argentina, un hombre se subió al capó de su vehículo para evitar el robo del mismo. Sin embargo, los ladrones, nada cortos ni perezosos, lo arrastraron por varias cuadras.Violento robo en Kennedy: víctima intentó huir, se cayó y el ladrón le pegó dos tirosEl medio Todo Noticias informó que el sujeto se encontraba lavando el automotor en la entrada de su casa cuando los delincuentes lo rodearon.Los maleantes lograron subirse al automotor y emprendieron la huida. No obstante, el hombre no se rindió tan fácilmente y con el fin de evitar el hurto se subió al capó del carro.Esto no les importó a los ladrones, quienes manejaron con el ciudadano sobre el automotor varias cuadras. Posteriormente, con el fin de no ser perseguidos, los criminales golpearon al hombre en la cabeza con armas de fuego y escaparon del lugar.La víctima de este hecho tuvo que ser trasladada a un centro asistencial, puesto que sufrió diferentes cortes por cuenta de los impactos.Vea el video del hecho aquí:Ladrones robaron un carro, pero ninguno sabía manejar y terminaron huyendo: de no creer