A Bogotá ya llegó la anunciada arena del Sahara, polvo proveniente del desierto africano. Esto, según expertos, afecta la calidad del aire.“Las diferentes tormentas que se dan en el continente africano y las masas de aire, si coinciden estos dos fenómenos, es posible que tengan un transporte de largo alcance y pueda alcanzar el continente americano”, explicó el docente de ingeniería ambiental de la Universidad de la Salle Jorge Pachón.La secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia, advierte que si bien la calidad del aire bajará, los pronósticos son alentadores.“Nuestro modelo nos dice que pasará por Bogotá muy brevemente y que no será necesario declarar en consecuencia alerta alguna”, dijo.Aunque 15 de las 18 estaciones de Iboca marcan una calidad del aire amarilla, o sea moderada, aún quedan retos.Se espera que el fenómeno permanezca en Bogotá hasta el viernes. Por lo pronto, la secretaria de Ambiente recomendó reducir el tiempo de las actividades al aire libre.
Un desolador panorama se ha evidenciado en materia de deforestación durante el último año Colombia: 158.894 hectáreas fueron afectadas por esta práctica, lo que equivale a toda Bogotá arrasada, dice el general Alejandro Barrera, director de la Policía de Carabineros."Desafortunadamente, en todo el país hay deforestación", asegura el oficial, al anotar que “no solo se está deforestando, sino que se está acabando con todo el hábitat de estos territorios”.Detrás de esta perjudicial práctica están las bandas criminales, encabezadas por las disidencias de las FRAC, el ELN y el Clan del Golfo, que disputan el control de territorios por la siembra de cultivos ilícitos, la minería ilegal, la tala indiscriminada de árboles y acaparamiento de tierras, entre otros.El Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete, uno de los más importantes de Colombia y declarado patrimonio de la humanidad, arde por culpa de estos grupos. En ese lugar, ubicado en el Amazonas, han sido quemadas 820 hectáreas.Estas son las preocupantes cifras de la deforestación en otros parques durante el último año:En El Tinigua se deforestaron 6.527 hectáreas.En Sierra de la Macarena, 2.173.En Paramillo, 806.La Paya, 679.Reserva Natural Nukak, 631.Esto suma un total de 11.636 hectáreas, el equivalente a 23.200 canchas de fútbol.En medio de este crudo y dramático panorama con la extinción de la fauna y la flora se suma otro problema: el del agua.“No vamos a tener la misma cantidad de recurso hídrico y, con el tiempo, si continúa la deforestación como viene, nos vamos a ver desabastecidos de este líquido vital", aseguró el mayor Édgar Obando, jefe del Grupo de Control Ambiental Rural de la Policía Nacional.Dicen los expertos que en las sabanas del Yarí ya hay una alerta por los grandes daños de desforestación en esa región. A diario, 435 hectáreas son deforestadas en Colombia y recuperarlas tomaría muchos años.Entretanto, las autoridades siguen actuando contra los grupos criminales, que atentan contra los recursos naturales, a través de la operación Artemisa, iniciada en 2019 y con la cual se ha logrado la captura de más de 80 personas.
Francisco Vera Manzanares, el niño ambientalista colombiano, fue nombrado como nuevo embajador de buena voluntad de la Unión Europea. Un reconocimiento por su lucha diaria para proteger y generar conciencia sobre el cuidado del medio ambiente.A propósito, el pequeño de 11 años habló en entrevista con Noticias Caracol.Noticias Caracol: Francisco, gracias por recibirnos en uno de sus lugares favoritos, cuéntenos dónde estamos.Francisco Vera: “Estamos en un lugar muy hermoso, que está rodeado, como lo podemos escuchar, de pájaros y de chicharras. Incluso aquí en este lugar hay una especie endémica y única de tucanes. Es impresionante ver la biodiversidad tan grande que hay en un entorno tan pequeño”.NC: Hace poco usted recibió un reconocimiento muy importante a nivel nacional e internacional, ¿qué significa ser el nuevo embajador de buena voluntad de la Unión Europea?FV: “En realidad fue muy lindo porque vinieron hasta acá y me entregaron el reconocimiento. Para mí esto me servirá muchísimo para seguir adelantando una agenda muy avanzada en temas climáticos en Colombia. Seguir trabajando, como lo dijo la embajadora Patricia Lombana cuando vino y me entregó el nombramiento, adelantando varios proyectos que ellos llevan en Europa, pero que también vamos a apoyar desde Colombia”.NC: Le preguntamos en redes sociales a varios amigos, conocidos, niños, colegas y ciudadanos que si te tuvieran al frente qué le preguntarían. ¿Cuál es tu clase favorita y deporte favorito?FV: “Mis deportes son la natación y el ciclismo, aunque no soy profesional, antes practicaba taekwondo. Mis clases favoritas son física y filosofía”.¿Por qué un niño de su edad no está jugando y haciendo cosas de niño?FV: “Yo creo que un niño no solo juega, sino que también hace lo que lo vuelve feliz: cantar, tocar instrumentos, ser activista, y muchas cosas más, eso depende de lo que nos guste”.Tras responder las preguntas de los televidentes, Francisco Vera envió un mensaje a los colombianos: “Quiero recordarles también a ustedes que nos quedan solo siete años para revertir los efectos y los daños que le hemos hecho a la madre naturaleza. Es decir, sigamos adelante por la defensa de la vida”.
En torno a 160.000 personas murieron el pasado año a causa de la contaminación atmosférica en las cinco ciudades más pobladas, entre ellas Sao Paulo y Ciudad de México, pese a que la calidad del aire mejoró en algunos lugares por el confinamiento, anunció este jueves la ONG Greenpeace.La capital más contaminada del planeta fue Nueva Delhi, donde se estima que unas 54.000 personas murieron debido a la toxicidad de las partículas PM2.5 suspendidas en el aire, según el informe de Greenpeace del sureste asiático.En Tokio, habrían muerto otras 40.000 personas y el resto en Shanghái, Sao Paulo y Ciudad de México, según este informe, que se centró en el impacto de las partículas microscópicas PM2.5 que se producen con la combustión de combustibles fósiles."Cuando los gobiernos eligen el carbón, el petróleo y el gas en vez de energías limpias, es nuestra salud la que paga el precio", advirtió Avinash Chanchal, activista del clima en Greenpeace India.(Vea aquí: "El cambio climático tendrá efectos mucho peores que la pandemia": Bill Gates)Las partículas PM2.5 están consideradas como las más dañinas para la salud. Afectan al corazón y los pulmones y aumentan las probabilidades de sufrir ataques de asma.Algunos estudios han vinculado la exposición a las partículas PM2.5 a un mayor riesgo de morir de COVID-19.El informe utilizó una herramienta en línea que estima el impacto de las partículas PM 2.5 mediante los datos sobre la calidad del aire de la página de monitoreo IQAir, combinándolos con modelos de riesgo científicos, así como datos sobre población y salud.La herramienta es resultado de la colaboración entre Greenpeace, IQAir, y el Centro para la Investigación sobre Energía y Aire limpio.Pese al elevado número de muertes, el confinamiento impuesto en todo el mundo por el coronavirus -que dejó las calles sin tráfico y cerró industrias contaminantes- limpió temporalmente los cielos de las grandes ciudades.De hecho, Nueva Delhi se transformó durante el confinamiento el año pasado, haciendo que los ciudadanos pudieran ver el azul del cielo y respirar aire limpio.Los científicos aseguran que la caída enorme de contaminantes debido al confinamiento ha prevenido muchas muertes.No obstante, Greenpeace urge a los gobiernos a que pongan las energías renovables en el centro de los proyectos de recuperación económica tras el hundimiento generado por el COVID-19."Para limpiar el aire, los gobiernos deben parar de construir nuevas plantas de carbón, cerrar las existentes, e invertir en una nueva generación de energía limpia, como la eólica y la solar", asegura el experto de contaminación del aire de la ONG Aidan Farrow.
Salento, Quindío, dio un nuevo paso en su objetivo de prohibir el uso de plásticos e icopor. El acuerdo municipal busca acabar con la utilización de vasos, mezcladores, bolsas y demás objetos hechos con este material.Pese a que la comunidad está de acuerdo con la medida, algunos tienen ciertas dudas sobre cómo será la transición para tener un municipio libre de plástico.Entre esos habitantes se encuentra Rubén Darío Díaz, que lleva vendiendo por 18 años café para lugareños y turistas en su Jeep; así sostiene a su familia.Él tiene un poco de incertidumbre por el futuro de su negocio, en vista de que utiliza vasos y mezcladores de plástico para entregar sus productos.“Los vasos de cartón, ese es más caro y entonces para uno como negociante no le sirve porque ahí se le va la ganancia a uno”, manifestó Rubén Darío Díaz.Por otro lado, Beatriz Arenas es una de las comerciantes que ya se prepara para la nueva medida con contenedores, cucharas y recipientes hechos de maíz y caña.“Tenemos unos contenedores que son en otros elementos biodegradables, tenemos las bolsas y los pitillos,” declaró Arenas.De acuerdo con cifras de la administración local, de las 36 toneladas que se recolectaron en el municipio en 2020, casi cuatro eran elementos de plástico.Según el director de la Corporación Autónoma Regional del Quindío, José Manuel Cortés, aproximadamente el 18% de los gases efecto invernadero son generados por los residuos sólidos elaborados de icopor o plástico.El acuerdo que prohíbe la utilización de plástico e icopor de un solo uso ya fue sancionado. Ahora entra en revisión por parte del gobierno departamental. Después de esa verificación, se espera que se haga efectiva la restricción.Con esta medida se busca seguir protegiendo el medio ambiente del municipio, cuna del árbol nacional de Colombia, la Palma de Cera.
El Área Metropolitana del Valle de Aburrá anunció este martes las medidas que tendrán los diez municipios, incluido Medellín, por la llegada del primer episodio de contingencia ambiental del año que se presentará entre el 8 de febrero y 10 de abril. Entre las medidas se definió el pico y placa ambiental inicialmente solo para los vehículos de carga. Es decir que por el momento los vehículos particulares no tendrán pico y placa. Asimismo, tampoco se restringirá a las motos como en ocasiones anteriores. La medida para los vehículos de carga será de cuatro dígitos con la posibilidad de aumentar a seis: lunes 0-1-2-3, martes 4-5-6-7, miércoles, 8-9-0-1 jueves 2-3-4-5 y viernes 3-7-8-9. La restricción irá de 7 a.m. a 8:30 a.m. y de 5:30 p.m. a 7 p.m. “Sabemos que vamos a tener tres semanas muy difíciles, sabemos que vamos a tener estaciones en naranja, pero también tenemos presente la pandemia. El consejo metropolitano de salud se reunió, teniendo presente el acuerdo metropolitano, allí se estableció que dadas las consideraciones de no poderse movilizar más del 70 por ciento de la población en transporte y evitar las aglomeraciones se recomienda no tener pico y placa de vehículos particulares para que la ciudadanía se pueda movilizar de esta forma”, explicó Juan David Palacio, director del Área Metropolitana del Valle de Aburrá. No obstante, el funcionario manifestó que de acuerdo a la dinámica de este episodio de contingencia ambiental, en especial en las semanas previstas que será más complejo, podría definirse un pico y placa para particulares.Las medidas que rigen para los vehículos de carga iniciarán a partir del próximo lunes 8 de febrero.
Para usar bien el código de colores de la basura en el hogar, involucre a toda la familia en este propósito.Son tres bolsas, según el tipo de desecho: blancas, verdes y rojas.La blanca es para residuos aprovechables: papel, cartón, vidrio, plástico, madera y metal. Esta será la que se llevan los recicladores.La verde es para los residuos orgánicos: cáscaras de frutas, verduras que sobraron, alimentos que vencieron. Estos sirven como abono.La negra es para desechos no aprovechables: material contaminado, papel higiénico o servilletas.La clave es no mezclar los diferentes tipos residuos.Si no cuenta con las tres bolsas de colores, de todas formas separe los desechos en bolsas diferentes y márquelas para que quede claro cuál contiene qué.
A partir del 1 de enero de 2021 de acuerdo a la resolución 2184 expedida el 26 de diciembre de 2019, empezó a aplicar un nuevo código de colores para la separación de basuras y residuos aprovechables con el objetivo de reducir las emisiones de carbono a futuro.Con tal de lograrlo, se han implementado varias iniciativas en las que se busca mejorar la disposición de residuos pues, según expertos, no se han obtenido resultados positivos a pesar de la aplicación de comparendos.Los 3 colores se clasifican de la siguientes maneraBolsa/caneca blanca: en la bolsa o caneca blanca van los residuos de plástico, vidrio, metales, papel y cartón.Bolsa/caneca negra: en la bolsa o caneca de color negro deben ir los desechos no aprovechables como el papel higiénico, servilletas y cartón con comida. Adicionalmente, se usa para disponerse los residuos relacionados directamente con el COVID-19 como tapabocas, guantes, entre otros.Bolsa/caneca verde: en la bolsa o caneca verde se deben depositar los residuos orgánicos como restos de comida y cortes de césped.El abecé del nuevo código de colores en Colombia:Maristella Álvarez, experta en manejo de residuos, explicó que “los diferentes códigos de separación no han sido exitosos anteriormente porque no hay una etapa educación previa que involucre a todos las partes de la comunidad, es decir, universidades, empresas, familias, amas de casa y colegios”.Añadió que para que sea exitosa “todas las personas deben estar educadas previamente, instruidas, en cómo hacer adecuadamente esta separación”.El Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Carlos Eduardo Correa Escaf, anunció el plan y resaltó que “es un nuevo cambio que vamos a tener todos los colombianos y es muy importante que podamos apropiarlo desde los hogares, los alcaldes, las empresas de servicios públicos, que podamos conocer este nuevo código de colores”.“Lastimosamente en Colombia esto no ha tenido mayores efectos debido a la falta de educación, hace falta esa parte de educación en donde se genera este tipo de residuos, que es precisamente en las casas, en los conjuntos, en las oficinas, en las industrias”, dijo Óscar Salazar, ecólogo y coordinador del Movimiento Ambientalista Colombiano.
La deforestación, pesca ilegal y ganadería extensiva, entre otros, son la enfermedad que provoca las heridas más graves a la Amazonía colombiana, región que cuenta con 40 millones de hectáreas.Por eso, organizaciones nacionales y líderes de resguardos indígenas luchan en conjunto para evitar la destrucción de este órgano vital del planeta.Uno de ellos es el bioparque Ikozoa.Octavio Jumea, su representante legal, habló al respecto: “La fundación Ikozoa se ha especializado y su meta principal es que la gente pueda conocer los peces más importantes de la Amazonía, tenemos más de 70 acuarios con los peces más importantes”.Este bioparque se ha convertido en el resguardo para varias especies nativas del Amazonas, entre ellas el pez pirarucú y manatíes.“En la región se le conoce al manatí como el animal de las siete carnes y eso se explica es porque hay irrigación sanguínea en todo su músculo que hace que tenga ciertos colores, entonces la comunidad sí lo refiere como un animal que tiene siete sabores diferentes, por eso es que lo cazan actualmente; los bebés quedan abandonados y como ellos necesitan a su mamá en sus dos primeros años para poder desarrollarse, porque sólo consumen leche, fallecen bastantes manatíes bebés”, explicó Leidy Rojas Ortiz, médica veterinaria de la Fundación Omacha.Otros protectores de los ecosistemas son la comunidad tikuna, ellos han sembrado más de 20 mil árboles en los últimos 7 años y han evitado la pesca ilegal.En Puerto Nariño, varias entidades rindieron cuentas a líderes amazónicos sobre lo que se está haciendo para defender su riqueza.“Queremos unos grandes metas y desafíos, frenar la deforestación, sembrar 180 millones de árboles, proteger, conservar y restaurar nuestros ecosistemas, pero lo más importante es la armonía del medio ambiente, con lo social y lo económico, y por qué digo esto, porque la gente hoy ya está recibiendo subsidios, apoyo, insumos económicos para proteger y conservar el medio ambiente”, aseguró Carlos Eduardo Correa Escaf, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible.Fernando Trujillo, director científico de la Fundación Omacha, manifestó: “Hemos creado un sistema para medir la salud de los ríos, necesitamos río saludables para gente saludable, si los ríos están envenenados con mercurio, están sin peces, se convierten en desiertos de agua y no queremos eso. Hay muchas comunidades que dependen para su seguridad alimentaria de los ríos y también la economía regional del Amazonas se basa en turismo de naturaleza, que se hace a través de los ríos. Se hace la pesca para la seguridad alimentaria y se hacen los ríos.En esas tareas se ocupan más de 4.500 familias de la zona que, según José Yunis Mebarak, el coordinador del programa Visión Amazonía, luchan para frenar la deforestación.“Nosotros tenemos un programa que es con campesinos para conservación, acuerdos de conservación, alternativas productivas, donde hay 4.583 familias ya vinculadas, que están conservando 150.000 hectáreas aproximadamente en los sitios de deforestación más altos”, indicó.Y es que 20 mil familias indígenas que habitan 26 millones de hectáreas dentro de la Amazonía se han convertido en los cuidadores de este pulmón del mundo, que para muchos no es de importancia, pero para cada uno de ellos lo es todo.Colombia posee el 6,6 por ciento de toda la Amazonía, allí habitan más de 9.500 especies de flora y 1.500 especies de fauna.
Un tribunal británico dictaminó este miércoles en una sentencia pionera en el Reino Unido que la polución ambiental fue una de las causas que contribuyó a la muerte de una niña de nueve años tras sufrir un ataque de asma.Un juez forense ha determinado que Ella Adoo-Kissi-Debrah, que residía en el sureste de Londres y falleció en 2013, estuvo expuesta a niveles "excesivos" de contaminación.El tribunal ha examinado durante dos semanas las circunstancias de la muerte de la niña, que en su últimos tres años de vida sufrió diversos ataques y fue ingresada en un hospital en 27 ocasiones.En sus conclusiones, el juez Philip Barlow subraya que los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) que se registraban en la zona donde vivía la menor excedían las recomendaciones de la Unión Europea y de la Organización Mundial de la Salud."Se produjo un fallo reconocido a la hora de reducir los niveles de dióxido de nitrógeno, lo cual posiblemente contribuyó a su muerte. También hubo una falta de información para la madre de Ella", sostuvo el magistrado.La madre de la niña, Rosamund Adoo-Kissi-Debrah, declaró a la cadena BBC que se ha hecho "justicia" sobre el caso de su hija."Pero esto también es para otros niños, porque estamos en una ciudad con altos niveles de contaminación en el aire", agregó.Durante el proceso judicial, relató que en 2010 llevó por primera vez a la niña al hospital tras sufrir un episodio de tos y que los médicos se vieron obligados a inducirle un estado de coma para estabilizarla.En 2012, el sistema de salud clasificó a la menor como una persona con "discapacidad", antes de que en la madrugada del 15 de febrero de 2013 muriera tras un ataque severo de asma.Un informe elaborado hace dos años por el investigador médico Stephen Holgate concluyó que la vida de la niña había estado "en el filo de la navaja" durante meses y que los niveles de polución detectados en un medidor cercano a su hogar contribuyeron a provocarle el fatal ataque de asma.
Ronald Avellaneda y sus amigos estaban reunidos en una tienda viendo al equipo de sus amores, el América de Cali, en la noche del miércoles 24 de febrero de 2021, cuando, según relata, un grupo de seguidores de Millonarios los atacó. Ronald sufrió heridas en la espalda con arma blanca.“Los hinchas de Millonarios -pues barristas no eran, pues esos son asesinos- bajaron con cuchillos, armados, dispuestos a apuñalarnos, a matarnos. A mí me apuñalan de primeras en dos ocasiones y nos sacaron a correr a todos”, cuenta.Sus amigos fueron perseguidos por la avenida La Caracas con calle 40 sur. Uno cayó gravemente herido en el piso y falleció, mientras otro alcanzó a ser trasladado a un hospital, donde se encuentra en delicado estado.“Hay otro compañero herido, que lo apuñalan en el pecho, por un centímetro lo matan, porque fue en el corazón", sostiene el aficionado del América.Ronald asegura que está contando el cuento de milagro y dice que estos casos no deben suceder.“Pienso que es intolerancia, como se criaron, el ambiente que ellos viven. Considero que ellos no son hinchas, son personas que les gusta la violencia y se esconden detrás de una camiseta de fútbol, porque el fútbol no tiene la culpa”, afirma.La Policía, por su parte, sigue en la investigación para dar con el paradero de los agresores que le quitaron la vida a un joven y dejaron heridas a dos personas más simplemente por tener una camiseta de otro equipo."En este momento se están adelantando las investigaciones a través de la verificación de cámaras, recolección de imágenes que nos permite (obtener) información concreta. Asimismo, hay una información importante que está orientando por muy buen camino este caso", indicó la coronel Alba Patricia Lancheros, jefe de Prevención de la Policía de Bogotá.El lamentable hecho se registró en el barrio Abraham Lincoln, ubicado en el sur de la capital de la República.
Jesús -lo llamaremos así por su seguridad- durante dos años perteneció a las filas de las FARC y luego, casi el mismo tiempo, a las del ELN. Con tan solo 12 años, las extintas FARC se lo llevaron a punta de mentiras."A uno lo invitaban, lo seducían con las muchachas, le buscaban a uno diferentes estrategias para llevárselo, pero en vista de que eso no cedía empezaban a presionar con el tema de la seguridad en la vereda donde yo vivía", relata la víctima de reclutamiento forzado.Las amenazas, la situación económica y la falta de oportunidades empujaron a Jesús a empuñar las armas.“Un niño de 12 años con un fusil encima, enfrentándose al Ejército y a distintos grupos armados es cruel, ¿no? Porque uno solo piensa en jugar, en divertirse y allá con un arma, aviones, soldados; es muy duro. Eso es una de las peores cosas que tú puedes vivir”, manifiesta.Lo obligaron a dispararle a su mejor amigo, y como no pudo hacerlo, el propio comandante apretó el gatillo."Si uno no cumple con las órdenes que le dan pues acaban con la vida de uno, entonces es estar entre la espada y la pared. Es tu vida o es la del otro y las órdenes allá no se discuten, la cumples o la cumples", cuenta.Después de este episodio Jesús se enfermó, ya no era útil para la otrora guerrilla, así que lo enviaron a una casa a recuperarse y de ahí escapó. Tiempo después fue el ELN quien le ofreció seguridad.“Ellos se provechan de los niños por que los niños no tienen la capacidad de razonar, de reflexionar como un adulto y considero que es un abuso total de la niñez. Eso es un abuso por el cual deben pasar cientos y miles de niños, que en el país han vivido lo mismo que yo, niños que han sido asesinados en el monte", puntualiza Jesús.Pero esa vida no era la que quería. Jesús entregó las armas y hoy es un ciudadano más. Como él, son al menos 6.931 menores que han sido reclutados por parte de grupos armados al margen de la ley.“Si no aprendes a disparar te morís, entonces es una esclavitud. Creo que para mí el reclutamiento nos arranca todo y nos esclavizan, no tiene perdón, no lo tiene", dice entre lágrimas una mujer víctima de reclutamiento forzado.Estos testimonios hacen parte de las pruebas que aportó el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) ante la JEP y la Fiscalía en contra de las FARC, del ELN y de otros grupos armados por reclutamiento forzado y otros delitos.“También hay violencia sexual. Los usan, desafortunadamente, como elementos sexuales y cosas sexuales”, lamenta Lina Arbeláez, directora del ICBF.Según el ICBF, es claro que hubo reclutamiento sistemático con un modus operandi:“A través del engaño, a través de la persuasión, a través de la utilización de las condiciones de pobreza. Los ponen a empuñar armas y a cometer crímenes, como homicidios, para que se sientan culpables y que sientan que no son sujetos de derecho".El ICBF tiene bajo su protección a 204 niños víctimas de reclutamiento forzado, menores que hacen parte de los 6.931 que también esperan ser reparados.
El 1 de marzo se celebra el Día mundial del reciclador, agentes de cambio que bien podrían ser llamados líderes ambientales invisibles.A Oswaldo Romero, Ramiro Rojas Flores y Ramiro Rojas Flores su profesión les ha dado todo: un techo donde vivir, la posibilidad de tener en su mesa tres comidas diarias y la oportunidad de cumplir grandes sueños.Y es por eso por lo que estos recicladores de oficio tienen un pensamiento y meta en común: dignificar, formalizar y tecnificar su labor.“El mensaje es ese, que todos nos pongamos la mano en el corazón no tanto por ayudarnos a los recicladores sino para que tengan un poco más de años de vida en esta Tierra, porque así como vamos con el calentamiento global se sabe que todos estamos perdiendo”, pide Oswaldo Romero.José Molina, el influenciador escobitaCon una escoba y el celular en la mano es popularmente conocido José Molina. Su trabajo es recoger los escombros en las calles de Bogotá, pero también publicar mensajes llenos de esperanza a través de sus redes sociales.Cariñosamente los ciudadanos en las calles ya lo empiezan a llamar el influenciador escobita.“Yo creo que todos influenciamos en algo y sí me han dicho que muchas veces, sin conocer a la gente, les he dado esperanza, les he dado ánimo, los he reconciliado con Dios", comenta este hombre de 43 años.
El Ministerio de las TIC, una empresa de telecomunicaciones y el Hospital Militar de Bogotá pusieron en marcha en la unidad de cuidados intensivos de dicho centro asistencial una nueva tecnología que ayuda a que los médicos estén menos expuestos al coronavirus COVID-19.Se trata del medical trolly, un carro de telemedicina que recorre los pasillos de la unidad, siendo controlado a distancia por un médico que atiende virtualmente a quienes están contagiados con el virus.“Vamos a contar con un trolly que está monitorizando permanentemente a los pacientes y que va a facilitar la atención de los interconsultantes”, señala la general Clara Esperanza Galvis, directora del Hospital Militar Central.Desde que se implementó, el medical trolly ha logrado que el personal de la salud tenga menos contacto con los pacientes que han contraído coronavirus.Además de contribuir con la salud, este carro de telemedicina aporta también al avance tecnológico en el país, ya que usa la red 5G de telecomunicaciones.“Implementamos este carro de telemedicina, que es una solución que permite la conectividad entre los profesionales de la salud y los pacientes que están en las salas COVID con unas cámaras de conferencia de alta definición y con una serie de tecnología dispuesta para este tipo de situaciones”, explicó Fabián Hernández, presidente de Movistar Colombia.Desde una perspectiva técnica, la tecnología 4G alcanza una velocidad de conexión de 350 megabits, mientras que la 5G, aplicada en el medical trolly, llega a 1.6 gigabits por segundo, lo que representa una mayor transmisión de datos y mejor eficacia en este tipo de labores médicas.“Esto lo que hace es una comunicación en tiempo real entre los profesionales de la salud que están dentro del hospital, pero no están ingresando a las salas UCI de COVID y lo hacen a través de este carro de telemedicina”, anota Hernández.Se espera que elementos como estos sean utilizados en otros ámbitos de la ciencia, la salud y la tecnología en Colombia.
Investigadores de la Policía recopilan pruebas y testimonios para determinar qué pasó con el economista de 33 años Jaime Zamora, cuyo cuerpo sin vida fue hallado en el shut de basuras del edificio donde vivía en Bogotá.El grupo de criminalística fue alertado por los habitantes del complejo residencial, que no salen del asombro por el hallazgo del cadáver de uno de sus vecinos en una caneca de la basura.“Solo saben ellos. Ojalá que encuentren una respuesta adecuada para que el resto de gente esté pendiente y sepa lo que pasa”, dice una habitante del sector.Testigos aseguran haber visto el viernes por la noche al economista en una reunión con amigos en su apartamento. Según uno de los asistentes a la reunión, hubo consumo de bebidas alcohólicas.El amigo de Zamora también les contó a los investigadores de la Sijín que el hombre había anunciado que iría al baño y luego de un tiempo, cuando lo echaron de menos y lo buscaron, no lo encontraron en ningún lado. Pensaron, dicen, que se había ido.Fue solo hasta el día siguiente, el sábado a las 7:15 a.m., cuando una de las aseadoras que realizaba las labores de limpieza en el cuarto de aseo del sótano halló, dentro de una caneca negra, el cadáver del economista que se desempeñaba en el área de importaciones en una reconocida aerolínea.“El primer análisis por parte de este grupo de criminalística observa que no hay un hecho violento. Continuará la investigación”, comentó la mayor Nohora Ñustes, comandante de la estación de Policía Teusaquillo.La principal hipótesis apunta a que Jaime cayó por el ducto de basuras desde el segundo piso y la investigación de las autoridades se centra en determinar si el profesional fue lanzado o se trató de un accidente.Noticias Caracol conoció que el cuerpo no presentaba heridas externas visibles y que el hombre no tenía antecedentes penales.