La barranquillera Daniella Álvarez sigue dando muestras de que con persistencia las metas se pueden lograr. Luego de la amputación de parte de su pierna izquierda y los problemas que ha tenido en el pie derecho, la exreina publicó un sorprendente video.“¡Contra todo pronóstico pude trotar! Mis fisios y técnicos de prótesis nunca me dijeron que no lo lograría, pero tampoco me dieron esperanzas porque no sabían cómo se comportaría mi pie derecho pues no ayudaría en mi propulsión”, contó en Instagram.Esto porque, como había dicho anteriormente, el nervio de la tibia y el peroné del pie derecho “se dañaron completamente” debido a que la isquemia por la que fue sometida a varias cirugías “los afectó en su máxima expresión”.Sin embargo, sobre su nuevo logro - volver a trotar - señaló: “Yo nunca lo dudé, en mi cabeza solo existe el yo puedo. Cuando me solté de la mano de mi fisio y me vi trotando sola, lloraba por dentro de emoción. Ha sido igual todas las veces que he logrado algo por primera vez, otra vez, demostrándome a mí misma que todo es posible a pesar del grado de dificultad”.Confesó que ha entrenado bastante para lograrlo y cada 30 metros debe parar para descansar el muñón y la cadera, que no están muy adaptados todavía a su prótesis. Aprovechó también para agradecer a todas las personas que han estado a su lado.Entre los comentarios de admiración que recibió se destacan los de las medallista olímpicas Mariana Pajón y Caterine Ibargüen, a esta última Daniella Álvarez le respondió con una solicitud: “otro día me llevas a saltar largo”.
Mariana Pajón empezó la temporada 2021 con victoria en el Citrus Classic Nationals. La colombiana no tuvo problemas para derrotar a su compatriota Andrea Escobar y a la estadounidense Carly Kane.Mariana Pajón, quien contó que tuvo COVID-19, demostró que está recuperada totalmente al imponerse con gran ventaja en la primera jornada del evento que se disputa en Sarasota, Florida (Estados Unidos).Otro colombiano que brilló en el certamen categoría UCI C1 fue Carlos Ramírez, quien ocupó el tercer puesto en la prueba masculina.Vea acá las noticias del mundo del fútbol: selección Colombia, liga nacional, campeonatos internacionales y mucho más.
Mariana Pajón contó cómo fue su batalla para recuperarse del COVID-19, enfermedad que la sacó durante un tiempo de las pistas. La bicicrosista envió un mensaje a sus compatriotas para que se cuiden.“Se me salió de las manos, vinimos a una carrera en Estados Unidos y la gente no se cuida como quisiéramos, incluyéndome. De pronto a veces uno se descuida y en ese momento pasa. Nosotros tuvimos todos los protocolos con toda la responsabilidad del mundo y me pasó, no fueron momentos fáciles estuve mucho tiempo fuera de las pistas y fuera del entrenamiento y más que eso con salud un poco ahí retadora saliendo de este problema”, relato Mariana Pajón.Por otro lado, Mariana Pajón dejó claro que su principal preocupación eran sus seres queridos porque “cuando estás infectado eres un arma para tu familia y para los más cercanos”.Mariana Pajón, de 29 años, finalizó diciendo que “me siento mucho mejor. Quiero decirle a todos que cuiden a los que más quieren. Yo la verdad me cuidé muy bien y a nadie más le pasó, ni a mi familia ni nadie más. Así que a todos mucho ánimo, a cuidarnos y vamos a salir de esta”.La antioqueña se encuentra en Estados Unidos, donde se prepara para empezar la temporada. El tercer oro olímpico en BMX es el gran objetivo en Tokio.Vea acá las noticias del mundo del fútbol: selección Colombia, liga nacional, campeonatos internacionales y mucho más.
Este año Colombia vio la grandeza de sus mujeres en el mundo del deporte.En febrero, Mariana Pajón conquistó el bronce en la Copa Mundo BMX de Shepparton, Australia. Primer y único podio mundial que alcanzó en el año debido a la cancelación del calendario por la pandemia.Septiembre fue el mes para el ciclismo de ruta: por primera vez en la historia, una colombiana obtuvo el título de una carrera UCI con Laura Toconás, del Colnago CM Team, en el gran premio Develi.Mientras que Paula Patiño, del Movistar, fue la primera de las nuestras en alcanzar el top 10 del Giro Rosa, la carrera por etapas más importante del ciclismo femenino.En agosto, Caterine Ibargüen regresó a la arena. La atleta, que llevaba 10 meses sin competir, se ubicó segunda en el salto triple de la Liga Diamante disputada en Estocolmo, Suecia.Aunque no hubo olimpiada en Tokio, noviembre nos sorprendió con la medalla olímpica de Ubaldina Baloyes, que recibió el bronce en halterofilia en los 69 kg, luego de que tres deportistas perdieran sus posiciones por dopaje en Londres 2012.El automovilismo también tuvo protagonista. Tatiana Calderón es la primera colombiana en debutar en la superfórmula japonesa. Fue la única mujer en el Circuito de Suzuka, llegó a la final junto a pilotos exfórmula 1 y en una de las válidas logró el quinto mejor tiempo.Para finalizar el año, diciembre llegó con buenas noticias para Leicy Santos, que fue reconocida con el trofeo EFE como mejor jugadora latinoamericana del año en España y seleccionada junto a Natalia Gaitán en el once ideal del 2020 en Suramérica.Fue un año atípico pero no perdido para las deportistas colombianas.
Mariana Pajón, quien en 2021 buscará su tercer oro olímpico, celebró el aniversario de su boda con Vincent Pelluard dedicándole unas palabras en su cuenta de Instagram.“Eres el capítulo donde mi corazón decidió escribir: "aquí me quedo". 3 años escribiendo nuestra historia y todos los días te amo más Vincent Pelluard. Quién elige el camino del corazón, gana. Feliz Aniversario mi esposito”, fue el mensaje de Mariana Pajón.Mariana Pajón, de 29 años, solo pudo correr diez competencias en 2020 por culpa de la pandemia del coronavirus, pero en 2021 espera volver a brillar sobre las pistas y obtener su tercer oro olímpico.Vea acá las noticias del mundo del fútbol: selección Colombia, liga nacional, campeonatos internacionales y mucho más.
Mariana Pajón contó que en 2020, por la pausa obligada por el coronavirus, solo pudo disputar 10 de las 40 competencias en las que suele participar. Sin embargo, aprendió varias lecciones durante el periodo de para.“Esa es una de las miles de enseñanzas que me deja esta temporada, tomar cada competencia dando más del 100 sin importar la situación, nunca sabemos si tendremos otra oportunidad, así que hoy, en este instante, da todo de ti, ese es el más grande oro”, escribió Mariana Pajón en sus redes sociales.Lea además:Mariana Pajón, de 29 años, tiene como meta en 2021 lograr su tercera medalla de oro en el BMX de los Juegos Olímpicos.Vea acá las noticias del mundo del fútbol: selección Colombia, liga nacional, campeonatos internacionales y mucho más.
Estadios, coliseos, pistas, complejos deportivos, parques vacíos. La pandemia cerró las puertas a las emociones, al esfuerzo individual y colectivo y en especial al grito de aliento de los aficionados, el alimento que nutre al atleta.¿Qué representa no tener ese apoyo del aficionado en la tribuna?“Cuando te animan, tú miras que te gritan ¡Colombia! Entonces sí es una parte que te motiva bastante. No hay cosa más bonita que estar compitiendo y ver a tu público ahí apoyando y gritando, ‘vamos, vamos, Colombia’”, dice un atleta.Hacer deporte, un acto natural para millones de colombianos de un día para otro fue prohibido.El COVID-19 les ganó el partido a todos. Incluso a los atletas élite de nuestro país, quienes con años de preparación vieron como Tokio cerraba sus puertas a los Olímpicos del 2020. Un golpe que noqueó a casi 100 deportistas colombianos que anhelaban llegar a Japón para disputar una medalla.“Nos dio duro, estábamos a tan solo dos días de ir al clasificatorio. La verdad después de nosotros haber entrenado bastante, porque nos preparamos bastante fuerte, que te digan que nos vas a ir, eso nos afectó bastante, porque de igual manera nosotros invertimos tiempo, preparación”, dice el boxeador Yuberjén Martínez.Eso en la ruta olímpica, un ciclo que arropa a más de 500 deportistas en Colombia, según cifras del Comité Olímpico Colombiano.Pero en la base, en el semillero, también el impacto fue contundente. Estrellas futuras como Sofía Pinzón, una bogotana de 12 años de edad, apasionada por el tenis de mesa, vio como una pandemia le cortó las alas a sus sueños.“Mi sueño es llegar a los Olímpicos, representar al país. Y virtual no es lo mismo. No es lo mismo en una cámara a tocar la mesa”, dice la joven deportista.El coronavirus congeló sueños y también emprendimientos alrededor del deporte, que en más de 7 meses de confinamientos y restricciones han desaparecido o, en el mejor de los casos, se encuentran con respirador artificial.Jairo Andrés Ávila es el director del club deportivo Eslavigol, una escuela creada para formar jóvenes futbolistas en el occidente de Bogotá.“Estábamos arrancando año, en donde las diferentes categorías que teníamos nosotros las llevábamos a cumplir partidos amistosos, de pretemporada. Estábamos alistando esas categorías para cumplir un fin y era llevarlos a la liga de fútbol de Bogotá y otros torneos representativos”, dice.Pero un día llegó un virus y lo cambió todo.“Realmente fue una situación difícil, de hacer una pausa, de decirle a los padres de familia y a los niños que no vamos a volver a entrenar hasta que den la autorización. Pensábamos que era unos meses, unas semanas, llevamos seis meses y tenemos la incertidumbre si vamos a volver o no”, agrega el emprendedor.Jairo Andrés vio como el sueño de formar nuevos futbolistas se convirtió, de la noche a la mañana, en una pesadilla. De ser entrenador de fútbol en sólo semanas pasó a ser conductor, en un empleo en el que arriesga ahora su vida.Como Jairo Andrés son cientos los casos de colombianos que vivían gracias al deporte y que hoy hacen parte del 16,8 por ciento de desempleados en Colombia o del grupo de los que se han reinventado para subsistir en medio de la crisis.Mariana Pajón, doble medallista olímpica, recién regresó de Europa al país y se sigue preparando para competir, pero considera que el daño hecho a las futuras generaciones de campeones es en cierta medida irreparable.“Siento que no debemos dejar de apoyar el alto rendimiento, los Juegos Olímpicos y todo este ciclo olímpico, tenemos que pensar en ellos incluso en este momento donde se sienten más abandonados”, explica la campeona.Los calendarios de los grandes eventos deportivos en el mundo se hicieron pedazos. La fórmula uno debió cancelar carreras acosada por el acecho del virus, el tenis vio como Wimbledon -el símbolo de mayor tradición en este deporte- también anunciaba al mundo su cancelación, el fútbol se paralizó en todo el planeta y el ciclismo, que también padeció por los efectos de una enfermedad que arrinconó a todos, finalmente pudo -en medio de la pandemia- realizar sus carreras más importantes.Así lo ve el ciclista Sergio Luis Henao: “Tenemos que adaptarnos todavía a esta nueva vida, a competir así. Pero, bueno, yo creo que salvó mucho la economía de los equipos, salvamos los contratos de tanta gente que vive del ciclismo”.La propagación de la epidemia tocó al deporte. Lo tiene limitado, aun los rebrotes y las burbujas fallidas hacen sufrir a cientos los efectos del coronavirus. Una batalla a la que no se le ve cercano su fin y una disputa que esperan ganar los deportistas para que se dejen de ver escenarios vacíos.
Carlos Mario Oquendo diseñó el ‘TravelPad’ para que los ciclistas puedan viajar tranquilos y sin tener que preocuparse por los rayones o golpes que sufren las bicicletas durante los trayectos.Le puede interesar:“Las maletas no protegían la bicicleta como yo quería y me llegaban golpeadas”, aseguró Carlos Mario Oquendo, quien ahora no sufrirá cuando tenga que viajar a las competencias de BMX.Por su parte, su colega y amiga Marina Pajón dejó claro que “ahora uno empaca la bici y puede regresar sin rayones y sin problemas”.Lea también:La ingeniosa creación del medallista olímpico ha tenido buena acogida entre los ciclistas y ya ha vendido 500 unidades. El producto ha sido comparado en países como Holanda, Francia y Australia.Vea acá las noticias del mundo del fútbol: selección Colombia, liga nacional, campeonatos internacionales y mucho más.
Lilian Ángel de Londoño, abuela de la deportista colombiana Mariana Pajón, falleció.La noticia la confirmó Miguel Pajón, hermano de la doble medallista olímpica, quien dedicó un sentido mensaje a su “buelita”:“Les presento a la personita más fuerte del mundo y nunca pisó un gimnasio. Una persona que nos enseñó que la fuerza más grande está en la mente y en el corazón y no en los músculos; que la autoridad y el respeto se ganan y no se imponen; que lo último que se debe perder es el criterio y la firmeza. Te disfrutamos por mucho tiempo. En cada uno de sus 102 años estuvo siempre firme enseñándole al mundo todo lo necesario para una vida plena y feliz”, escribió.Miguel destacó que doña Lilian, además de ser una mujer maravillosa, tenía el secreto para mantener una familia unida y llena de amor.“Te vas a descansar con el abuelo Juanchito y con los tíos y tías, dejando solo recuerdos bonitos. Gracias por tanto abuelita y sé que nos seguirás cuidando y uniendo desde donde estés. Toda tu familia está hoy unida despidiéndote como te mereces, tristes por no verte más, pero felices por todo lo que te disfrutamos y aprendimos”, destacó Pajón.La Federación Colombiana de Ciclismo lamentó la noticia y envió sus condolencias a la familia Pajón Londoño.
Además del homenaje de Mariana Pajón al personal médico que murió en Colombia por COVID-19, en ese avión se produjeron otras noticias, como el encuentro de las estrellas del ciclismo que representarán al país en próximas competencias."La batalla la perdieron, pero estamos acá con ellos. Van correr con nosotros en esas competencias a las que vamos a ir con todo el corazón", dijo Mariana Pajón.En el vuelo humanitario organizado por el Ministerio de Deportes iba Jorge Luis Pinto, quien tiene nuevas ilusiones de triunfar en tierras lejanas: viajó para asumir el cargo de técnico en la selección de Emiratos Árabes."Un proyecto hermoso, voy con la intención de hacer quedar bien el pueblo colombiano", dijo el director técnico.Y en el avión, los capos del ciclismo como Nairo Quintana y Rigoberto Urán se juntaron.Otro vuelo para deportistas prepara el Gobierno, esta vez hacia Estados Unidos, mientras nuevas expectativas cultiva el deporte colombiano, a pesar dela pandemia.
El Banco Central (BCV) informó este viernes que ampliará el cono monetario: Venezuela tendrá tres nuevos billetes que no suman el equivalente a 1 dólar a la tasa oficial, en medio de una inflación imparable.Los billetes de 200.000, 500.000 y 1 millón "comenzarán a circular paulatinamente a partir del 8 de marzo de 2021", informó el ente emisor en un comunicado."Estos nuevos billetes vienen a complementar y optimizar el actual cono monetario, para cumplir con los requerimientos de la economía nacional", agregó. Juntos suman 1,7 millones de bolívares, por debajo de la cotización del dólar en el Banco Central, de 1,88 millones.Un kilogramo de tomate, ocho bollos de pan, un gaseosa de 250 ml o una pastilla de jabón de baja calidad pueden costar alrededor de 1 millón de bolívares en una economía marcada por una inflación que cerró 2020 en casi 3.000%, transitando así el cuarto año de hiperinflación."El problema en un ciclo hiperinflacionario es que la velocidad con la que el Banco Central actualiza el cono monetario es mucho más lenta", explicó a la AFP el economista Asdrúbal Oliveros."El Banco Central acaba de sacar un billete que será el de máxima denominación que no llega a 65 centavos de dólar y digamos que incluso con esos nuevos billetes en realidad no logras optimizar el sistema de pagos", observa.El efectivo en bolívares además escasea mucho y los usuarios hacen largas filas en los bancos para acceder a no más de 400.000 bolívares, el límite en taquilla.El bolívar terminó siendo sustituido por el dólar, que se ha convertido en la moneda de facto en Venezuela.Es común que los precios en cualquier comercio estén reflejados en dólares y los pagos se hagan en divisas. Para pagar en moneda local se hace normalmente a través de tarjeta de débito o transferencia bancaria.El presidente venezolano Nicolás Maduro ha impulsado la "digitalización total" de los pagos en Venezuela, incluido el transporte público, actualmente el único sector donde impera el bolívar en efectivo."Para eso necesitan tener optimizado un sistema tecnológico, logístico con el transporte que no tienen, y por eso sacan estos billetes para tratar de paliar un poco el problema", indicó Oliveros.El cono monetario se amplió la última vez en junio de 2019.
Una comisión del Gobierno llegó hasta Miacora en el Alto Baudó. En este lugar hay más de cien familias desplazadas y confinadas desde el pasado 19 de febrero.En la reunión hicieron un minuto de silencio en memoria de Luz Aida Conchave Lana, su lideresa que vieron morir en medio de combates entre el ELN y el Clan del Golfo.Miacora chimía es una comunidad de contrastes: cerca de 102 familias viven en medio de la riqueza natural y la pobreza extrema.Dicen que evitan salir de la comunidad por temor a caer en una mina antipersona.“Casi del pueblo no salimos a cortar los plátanos porque no sabemos qué minas hayan enterrado en la trocha”, dice Edilfrido Lana, guardia indígena miacora.Autoridades realizarán una hoja de ruta para el retorno de los desplazados.Temas como seguridad alimentaria, salud y reclutamiento de menores también fueron abordados en la reunión entre los líderes indígenas y el gobierno.
“Que callen las armas", reclamó este viernes el papa Francisco poco después de llegar a Irak para la primera visita de un pontífice a este país diezmado por las guerras y las persecuciones, saludando a los cristianos que decidieron permanecer.Entre fuertes medidas de seguridad y con mascarilla por las medidas anticovid, el papa de 84 años viajó como "un peregrino de la paz" para reconfortar a una de las más antiguas comunidades cristianas del mundo, marcada por la violencia y la pobreza.Durante su estancia, que terminará el lunes tras recorrer 1.445 kilómetros especialmente por aire para evitar las zonas donde se esconden los yihadistas, el pontífice argentino también tenderá la mano a los musulmanes y se reunirá con el gran ayatolá Alí Sistani, la máxima autoridad chiita.El jefe de los 1.300 millones de católicos del mundo evocó todos los asuntos candentes en Irak ante sus principales dirigentes, entre ellos el presidente Barham Saleh, quien le envió una invitación oficial para esta visita sin precedentes."Basta de violencia""Basta de violencia, de extremismos, de facciones, de intolerancias", dijo el papa. Basta también de "corrupción", el motivo por el que cientos de miles de iraquíes se manifestaron a fines de 2019.Entonces, Francisco también urgió al país a dejar de reprimir a sus jóvenes que pedían justicia. "Hay que construir la justicia", reiteró este viernes.Y "que ninguno sea considerado ciudadano de segunda clase", sobre todo los cristianos --1% de la población en este país musulmán-- ni los yazidíes, minoría perseguida por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) que vendió a miles de sus mujeres en "mercados de esclavos".El pontífice denunció así "una barbarie insensata y deshumana" perpetrada en Irak, la antigua Mesopotamia, "cuna de la civilización".El argentino recordó "la antiquísima presencia de los cristianos en esta tierra", donde según la tradición nació Abraham, y abogó por "su participación en la vida pública" como "ciudadanos que gozan plenamente de derechos, libertad y responsabilidad".Tras esta etapa política, el papa inició la parte más espiritual y popular de su viaje.Catedral mártirEl ambicioso programa comenzó a final del día con una oración en la catedral Nuestra Señora de la Salvación, una iglesia católica del centro de Bagdad que fue el escenario en 2010 de la toma de rehenes más mortal contra cristianos en Irak (53 muertos).Ante un grupo reducido de personas, recordó a los "hermanos y hermanas que murieron en el atentado terrorista (...) y cuya beatificación está en proceso" y agradeció al clero iraquí por su "presencia" y su "cercanía" con los cristianos.A continuación, viajará a Nayaf, Ur, Erbil, Mosul y Qaraqosh. En cada etapa, sólo verá a pocos centenares de fieles, salvo por la misa del domingo en un estado del Kurdistán, en presencia de varios miles.Bagdad aseguró haber adoptado todas las medidas de seguridad "terrestres y aéreas". Y, muestra de una inesperada calma en las tensiones entre Irán y Estados Unidos en Irak, uno de los grupúsculos que suele revindicar disparos de cohetes contra intereses estadounidenses anunció una tregua durante la visita papal.Sobre las injerencias extranjeras, Francisco llamó a las "naciones" a no imponer sus "intereses políticos o ideológicos" en Irak.Para Saad al Rassam, cristiano de Mosul, una ciudad que sigue en reconstrucción tras la guerra contra el EI, este viaje se produce en el momento justo en este país cuya tasa de pobreza afecta al 40% de la población en 2020. "Esperamos que el papa explique al gobierno que debe ayudar a su pueblo", dijo.A pesar de las dificultades en materia de seguridad o económicas que padecen 40 millones de iraquíes, los cristianos denuncian discriminaciones y la poca ayuda del gobierno para recuperar sus casas o sus tierras.Mano tendida al chiismoA pesar de todo, el papa llamará a los cristianos a continuar en o a regresar a Irak, donde permanecen 400.000 fieles contra 1,5 millones hace 20 años.Un llamado al regreso "obligatorio" pero "difícil", dice el cardenal Leonardo Sandri, que dirige la Congregación de las Iglesias Orientales en el Vaticano y acompaña al papa a un país que desde hace cuatro décadas vive en conflicto.Según la fundación "Ayuda a la Iglesia en peligro", solo 36.000 de los 102.000 cristianos que se fueron del norte de Irak han vuelto. Y entre ellos, un tercio dice que prevé irse del país para 2024 por miedo a las milicias y debido al desempleo, la corrupción y las discriminaciones.El sábado, y por primera vez en la historia, el papa será recibido en la ciudad santa de Nayaf (sur) por el gran ayatolá Alí Sistani en persona, un hombre de salud frágil de 90 años que no suele aparecer en público.El papa también participará en Ur, tierra natal de Abraham, pilar de las tres religiones monoteístas, en una oración con representantes chiitas, sunitas, yazidíes y sabeos.
El senador del Partido Verde Juan Luis Castro, hijo de la exsenadora Piedad Córdoba, le envió una dura carta a su colectividad y todos los sectores de izquierda. Incluso les reclamó “su hipocresía”.“A los mismos que hoy hablan de un ‘pacto histórico abierto, incluyente, amplio, me gustaría preguntarles si ahora sí me van a incluir o si por ser el hijo de Piedad Córdoba me van a seguir vetando”, cuestiona.En esa misma misiva, en donde hace una defensa férrea de su mamá, le dice a Gustavo Petro, Claudia López, Roy Barreras y Armando Benedetti, entre otros, que hablar de paz en el proceso que impulsó Santos fue relativamente fácil, que la única que habló de paz, la única que habló duro, en los dos gobiernos de Uribe fue ella.Pero quizás uno de los últimos párrafos es de los que más llama la atención.“Algunos de quienes impulsan y hacen parte ahora de la contienda ‘sin veto’ han tenido y tienen investigaciones delicadas por accionares non santas en su vida privada y pública. Pero, para ellos mismos, el pecado de ser hijo de Piedad es más grave. ¿Dónde queda la coherencia ideológica y de formas de la supuesta línea dura de la izquierda? ¿Será que la tal izquierda es una ilusión o más bien sincerémonos y estamos ante políticos que son actores sin guión?”, sostuvo.
Fue cerca del mediodía del pasado 6 de marzo de 2020 cuando, desde Catam, el Ministerio de Salud anunció a través de un comunicado el ingreso de la primera persona contagiada con COVID-19. Se trataba de una joven de 19 años proveniente de Italia.El presidente Iván Duque, a partir de ese momento, pidió al país extremar las medidas de bioseguridad.Inmediatamente se activaron todos los protocolos y las personas que tuvieron contacto con la joven fueron aisladas.En ese momento, el país pasó de estar en alerta a una estrategia para contener el virus.Diez días después, en Bogotá, la alcaldesa Claudia López declaró la alerta amarilla ante el crecimiento de casos positivos en la capital.Esto apenas era el preámbulo del primer simulacro de aislamiento preventivo y las posteriores decisiones de restricción a la movilidad en el país.A partir de ese momento, la vida de los colombianos cambió por completo. El tapabocas se convirtió en una de las prendas de vestir obligatoria, las reuniones sociales desaparecieron y empezaron los confinamientos obligatorios.Personal médico habla tras un año de lucha contra el virus“Veíamos en China cómo se preparaban y cómo se tenían que vestir. Parecían un astronauta para ingresar a un cubículo del paciente afectado por el COVID. Veíamos como en Europa compañeros que trabajan en otras partes, en España, Italia; que también tenían unos protocolos grandísimos. Nosotros decíamos, aquí no tenemos nada", dice Harvey Pereira, jefe de enfermería.El miedo empezó a incrementarse cuando se dieron cuenta de que en otros países las camas UCI no daban abasto.Para ese entonces, Colombia contaba con una capacidad a nivel nacional de 5.346 camas y un muy reducido personal médico para atender el crecimiento acelerado de contagiados por COVID-19. Personal al que, en algunos casos, les debían hasta seis meses de sueldo.Situación que para muchos logró superarse con los 2,1 billones de pesos que el Gobierno le giró a las EPS para cancelar deudas pendientes.“Nosotros tuvimos que ampliar la capacidad instalada, los servicios que eran intermedios tuvieron que adaptarse como cuidado intensivo; para eso se hizo un esfuerzo en cuanto a la logística de la infraestructura de la institución, se adquirió nueva tecnología y se tuvo que contratar más personal. Se tuvieron que adaptar los equipos de trabajo para que quedaran listos, puesto que la gente que llegaba no tenía la misma experiencia que nosotros llevábamos, porque tenemos 15 a 16 años en cuidados intensivos”, indica el enfermero Pereira.También cambió la dotación hospitalaria. Durante este año de pandemia, Colombia aumentó su capacidad UCI a 12.002 camas, 6.656 más que cuando llegó el virus al país.Además, el Gobierno compró 5.131 ventiladores, 4.211 monitores, 50 equipos de rayos X portátil y 1.000 camillas y se giraron 382 mil millones de pesos en bonificaciones para los 251.559 profesionales de la salud que atienden en primera línea a pacientes COVID. Mientras que las inversiones en infraestructura alcanzaron 782 mil millones de pesos.Una imagen de mejoramiento que también se refleja en los recursos del personal de salud que atiende a los infectados con el virus.