Al menos 21 muertos y 17 heridos dejó este martes un accidente en una carretera de Cochabamba, en el centro de Bolivia, al caer un autobús de pasajeros a un precipicio, informó la policía.El hecho ocurrió hacia la 01h00 de la madrugada (05h00 GMT) en una carretera que une los departamentos de Cochabamba y Santa Cruz (este), cuando el autobús cayó por un precipicio de una profundidad de 150 metros.La Policía investiga las causas del accidente, el más grave de 2021, y no descarta que aumente la cifra de fallecidos.Torrico agregó que los heridos fueron trasladados a hospitales de la zona y a la ciudad de Cochabamba, 400 km al este de La Paz."Yo he perdido a mi tía, mi tía era como una madre para mí", dijo una mujer a la prensa en medio del llanto en el hospital de la ciudad de Cochabamba. Contó que una prima sobrevivió y está herida.Señaló que habló telefónicamente con su prima, quien le contó que "el chofer estaba corriendo harto [mucho] y los pasajeros han gritado 'por favor baje velocidad', se han asustado, pero el chofer seguía corriendo y sintieron el golpe"."Hemos perdido a mi hermano y deja dos niños en la orfandad", dijo un hombre en el mismo hospital. La esposa y los pequeños resultaron heridos.Otro de los heridos es Erwin Tumiri, quien sobrevivió a la tragedia del Chapecoense y ahora volvió a salvarse.“Los doctores me dicen que tengo un buen ángel de la guardia”, dice Tumiri.Cuenta que iba dormido, pero al escuchar los gritos se aferró al asiento delantero.El bus de pasajeros salió de Cochabamba bajo una persistente llovizna, lo que reducía la visibilidad en la carretera, según medios locales.Rescatistas se encontraban en el lugar del accidente, pues se teme que haya otros cuerpos atrapados debajo del bus.El último incidente vial grave ocurrió en Bolivia en septiembre pasado, cuando un bus cayó por un despeñadero, con saldo de 19 muertos y 17 heridos.
Noticias Caracol habló con Eliana, la médica que grabó fiesta dentro del Hospital Santa Clara en pleno segundo pico de la pandemia del coronavirus en Bogotá.Ella recuerda que en la reunión vio a “varias personas en alto estado de alicoramiento, la gente enrumbada con licor. Yo les pido que por favor apaguen toda la celebración y les digo que salgan de la institución”.Según Eliana, denunciar esta fiesta hoy la tiene fuera de su cargo por supuestas represalias de las directivas del centro asistencial y de la Subred Centro-Oriente.Afirma que -una vez el video se hizo viral- recibió amenazas anónimas y que sin ninguna explicación fue trasladada, removida del cargo que desempeñó durante cuatro años.Además, sostiene que su salario se vio afectado, pues le quitaron las horas extras. Al final, no aceptó las nuevas condiciones y renuncióEl tema llegó al Concejo de Bogotá, donde condenaron la persecución a la médica y pidieron la renuncia de la gerente de la subred, que habría estado detrás de la presunta represalia.“No solamente no hizo nada, sino que después se encargó de perseguir a la persona que había grabado el video”, sostiene Andrés Forero, concejal del Centro Democrático.Incluso algunos cabildantes dieron a conocer una conversación telefónica que probaría que la funcionaria trató de ocultar la fiesta. Ahora la Personería investiga.
Tres golpes en un mes, dos de ellos registrados en videos, volvieron a alertar a las autoridades sobre una banda que consideraban desarticulada en Bogotá: la de Los Rolex."Es posible que hagan parte de una vieja estructura que ya fue desarticulada en el año 2019”, dice el jefe seccional de investigación criminal. Parte o no de aquella banda, aparecieron para robar relojes Rolex avaluados en 20 millones de pesos o más.“Aprovecharon esa oportunidad para intimidarme, encañonarme con la pistola y así obligarme a que les entregara el reloj", cuenta una de las víctimas.Los asaltantes operan en sectores específicos de Bogotá como la Zona T, la Zona Rosa, Quinta Camacho y el Parque de la 93.El 6 de febrero, en un café ubicado en la carrera 11 con calle 93A, un funcionario de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) fue la víctima. Lo amenazaron con arma de fuego para que entregara su reloj de alta gama.“Se están realizando labores de vecindario, análisis de video y entrevistas a posibles testigos para lograr la individualización y la captura de estos delincuentes”, sostiene el coronel Miguel Cabrero, comandante de Seguridad Ciudadana.El 12 de febrero, Angélica Valderrama estaba en un restaurante del Parque de la 93, norte de Bogotá, cuando fue abordada dentro del establecimiento por un delincuente vestido de negro que la amenazó con arma de fuego y le quitó el reloj.El 16 de febrero, al mediodía, el blanco fue un coronel retirado del Ejército. Dos hombres en moto lo abordaron en su vehículo cuando llegaba a su residencia en la localidad de Suba. Aunque el sitio no está en la zona de acción de la banda, la modalidad fue igual."Entré en pánico porque iba en compañía de mi esposa y mi hija y con palabras soeces me obligaron a que les entregara el reloj o si no accionaban el arma de fuego", relata la víctima.La banda no solo incluye hombres armados que roban el reloj, sino que tiene un experto que les indica a quién robar."Por lo general utilizan un marcador, siendo este el encargado de ubicar a la víctima. Pasa cerca de ella y detecta que el reloj o la joya es real, luego hacen el seguimiento hasta donde la víctima es vulnerable y generan el ataque", detalla Orlando Carrillo, experto en seguridad y defensa.Con la forma de actuar, los testimonios y los videos, la Policía espera cerrar el cerco sobre la banda.
Esta semana sorprendió la declaración del presidente Iván Duque, quien dijo que si la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez renuncia, designaría como su reemplazo a una mujer.Expertos constitucionalistas y congresistas le recordaron que esa elección la hace el Congreso en forma libre y que el presidente no puede formalmente postular candidatos.El senador Roy Barreras fue más allá e incluso propuso a los Partidos Liberal y Cambio Radical que se unieran con la oposición y eligieran un vicepresidente independiente.Aunque la propuesta de Barreras es teóricamente posible, seguramente no tiene ninguna viabilidad política.Solo una vez en la historia no se ha respetado el guiño presidencial para designar su potencial reemplazo: fue en 1993, cuando Juan Manuel Santos se hizo elegir designado sin contar con el beneplácito de César Gaviria, entonces presidente.De cualquier manera, esta vez el presidente Iván Duque tendrá que hacer más trabajo político porque el Partido Conservador, con el apoyo del expresidente Uribe, ya se metió y dijo que debería ser una conservadora.Lo dicho por Uribe se entendió como una desautorización al nombre de María Paula Correa, que es la candidata que el presidente Duque quisiera.Si finalmente el pulso lo ganan los conservadores, todos los caminos conducen a Ángela Ospina de Nicholls, quien no es muy conocida pero tiene relaciones familiares que a veces en la política colombiana pesan mucho: es consuegra de Andrés Pastrana y nieta del expresidente Mariano Ospina Pérez.
Con una calle de honor, entre aplausos, globos y lágrimas, fue dada de alta Isabella, quien a sus dos años ya batalló contra los pronósticos que no le daban esperanzas de vida por una grave cardiopatía congénita terminal.“La niña empezó a ponérseme moradita en los labios, caminaba y se tocaba el corazoncito y decía ‘me pica, me pica’ y yo no sabía qué era”, cuenta Sandra Salamanca, madre de Isabela.Milena Prada, cardióloga pediatra, afirma que la pequeña “ingresó a la clínica Imbanaco en agosto del año pasado con recaídas de falla cardiaca importantes”.Isabella y su familia viven en Popayán, pero desde hace un año la vida les cambió, tuvieron que desplazarse hasta Cali para atender su enfermedad y, luego del diagnóstico, debieron someterse a la espera para lograr encontrar un donante de corazón. Después de seis meses, recibieron la noticia más anhelada.“Recibí la llamada de la doctora Milena diciéndome que tenía que venirme urgente a la clínica porque había salido un donante para Isabella”, asegura Sandra.Durante cinco horas, la pequeña fue intervenida en una cirugía a corazón abierto.“Es un procedimiento exitoso, no ha habido ninguna complicación y la niña lo ha tolerado”, señala Carlos Enrique Fragoso, médico cirujano cardiovascular.La donación de órganos en menores de 5 años es muy baja en Colombia, entre otras razones, porque las muertes violentas en ese grupo de población son muy escasas.Luego del exitoso trasplante, Isabella deberá tomar medicamentos y mantener un seguimiento ecocardiográfico. Con toda una vida por delante y llena de esperanzas, ahora esta pequeña tiene un nuevo corazón para disfrutar cada latido al lado de su familia.