Ladrones en el SITP hirieron a dos hombres y una mujer, pero también sufrieron golpiza

Tres delincuentes atracaron a pasajeros que iban un bus del SITP en Ciudad Bolívar, en el sur de Bogotá. Según cuenta uno de los usuarios, los bandidos aprovecharon la parada del bus para subirse y con armas cortopunzantes intimidar a todas las víctimas.

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Con insultos y muy agresivos, dicen las personas asaltadas, despojaron de sus pertenencias a varios de ellos. Al parecer, algunos reaccionaron y por no dejarse quitar lo que llevaban los criminales los agredieron con navajas.

El hecho dejó a una mujer y dos hombres heridos, los cuales fueron remitidos al Hospital de Meissen con varias cortadas en los brazos y las manos.

Mientras los ladrones del SITP se escapaban algunos policías del sector y víctimas reaccionaron y lograron retener a dos de ellos, que también se llevaron una fuerte golpiza. Un tercer hampón se alcanzó a escapar.

Los delincuentes que hurtaron en el bus del SITP fueron llevados hasta la URI de Tunjuelito.

Quienes se transportan en estos buses por los barrios Meissen, Lucero y México, en la localidad de Ciudad Bolívar, dicen que a diario los están atracando las bandas que delinquen entrada la noche. Aparentemente, se esconden en una casa cercana, pues luego de cada hurto desaparecen en cuestión de segundos.

Valientes mujeres sacaron corriendo a ladrones en Bosa

En un hecho similar, cuatro mujeres sacaron corriendo a dos hombres que intentaron asaltarlas en un salón de belleza ubicado en el barrio Bosa San Pedro, en el sur de Bogotá.

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Los sujetos ingresaron al sitio con armas cortopunzantes y tenían la intención de arrebatarles celulares, dinero y los objetos de valor del establecimiento.

Sin embargo, las cuatro mujeres golpearon a uno de los sujetos y, aunque una de ellas se cayó al piso, las demás agarraron lo que encontraron en el salón de belleza -secadores, pinzas, cepillos- y espantaron a los dos ladrones, que no tuvieron otra opción que salir corriendo del sitio.

A escasos metros, un tercer delincuente en un carro negro estaba esperando por los sujetos, que arrancó a toda velocidad para huir de las valientes clientas y trabajadoras.

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