Las autoridades de Bogotá y Soacha siguen en alerta contra el licor de mala calidad tras la muerte de 27 personas por consumo de tragos adulterados. En las últimas horas hubo varios operativos en los que decomisaron más de 2.000 botellas que no cumplían las condiciones para su comercialización.
En una bodega de la localidad de Bosa Carbonel denunciaron que se estaba envasando, en botellas parecidas a las de vino, un refresco para las anchetas navideñas, pero que no tiene licor. Investigan si esta bebida era apta para el consumo humano.
Otro golpe al licor de mala calidad fue en Soacha. Policías del municipio hicieron dos allanamientos en los que encontraron bebidas de contrabando y otras en mal estado que estaban a punto de ser vendidas para las festividades de diciembre.
El último operativo fue el hallazgo de licor de mala calidad escondido entre maletas que iba en bus de Melgar hacia Bogotá: eran 210 botellas que no cumplían los requisitos de comercialización.
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