Su líder, que se hace llamar Tom Sawyer, expresó que “si uno siente frío en la casa, ¿cómo será la gente habitante de calle, que este es su día a día?”.
Uno a uno, los felices beneficiarios recibieron un tamal y chocolate calientes, además de un abrigador obsequio, una cobija.
“Está haciendo demasiado frío, pero verdaderamente siempre Dios nos bendice con cualquier cobija, con cualquier, así como están haciéndolo ustedes. Nunca nos habían dado, pero hoy estamos llenos de alegría”, dijo uno de los habitantes de calle.
Publicidad
Ellos siguieron deambulando por el centro de