Diego Molano, director del Departamento Administrativo de Presidencia, le pidió a la alcaldesa que escuche a los ciudadanos de Bogotá.
Desde la anoche del jueves, cuando se conoció cómo funcionaría el aislamiento preventivo en junio, Claudia López ha criticado al gobierno por ampliar las excepciones.
En uno de sus últimos comentarios se refirió a los casos de COVID-19 en la Casa de Nariño.
“Para que entendamos la magnitud del riesgo que enfrentamos con la reapertura casi total ordenada por el presidente: la Presidencia de la República, por obvias razones, ha sido uno de los sitios más aislados para evitar el contagio de coronavirus y tiene más de 13 casos positivos”, escribió la alcaldesa en Twitter.
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A lo que Molano le respondió: “Ante una tasa de desempleo del 23 % que afecta a más de 5 millones de colombianos, la solución no es una cuarentena permanente, sino un aislamiento inteligente que permita un sano equilibrio entre proteger la salud y el trabajo”.
Y añadió: “Debemos hacer frente al virus y a la pobreza. Por eso avanzamos en aislamiento que prioriza el autocuidado, sin excusas. Escuchemos a los ciudadanos de la capital, ¿cuánto más pueden sostenerse sin ingresos”.
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Este es un episodio más de las evidentes diferencias que han tenido la Alcaldía de Bogotá y el Gobierno Nacional sobre el manejo de la pandemia del COVID-19.
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