El presidente Gustavo Petro anunció un
“Se hará una ley de la reconciliación nacional para que todos aquellos que hayan estado incursos en ilicitud, en la violencia, puedan tener un camino y un vivir en esta nación colombiana una vez se deje de la mente, del cerebro, la idea de matar al compatriota, la idea de quitar y despojar al compatriota humilde”, expresó el jefe de Estado en Ciénaga de Oro, Córdoba, en donde entregó dos fincas -expropiadas al narcotráfico, de 1.641 hectáreas- a 200 familias.
Respecto a esos terrenos, el presidente Petro afirmó que los criminales amenazaron a los funcionarios de la SAE (Sociedad de Activos Especiales) que traspasaron esas propiedades. Por ello les advirtió que “hoy hay un gobierno, un Ejército y una Policía que, a diferencia del pasado, van a cuidar al hombre y a la mujer humilde, campesina, y a sus niños y a sus niñas”.
Además de enviarles este mensaje a los narcotraficantes, el presidente propuso imponer “a todo aquel que tenga más de 500 hectáreas y no produzca ni una mata de yuca el más alto impuesto predial”.
En el mismo evento,
El jefe de Estado estuvo acompañado por el presidente de la Cámara de Representantes, Andrés Calle, quien anunció que la próxima semana comienza el debate de la reforma a la salud.