Superalimentos: se consumen en pequeñas cantidades, pero tienen grandes beneficios

Se consideran en este grupo a especias que proceden de semillas, frutas, flores, raíces o cortezas secas de las plantas. Poseen sustancias nutritivas y medicinales.

Según la médica bioenergética Liliana Rojas, "los efectos en la salud se deben a los componentes biológicamente activos como minerales, vitaminas, antioxidantes y fibra. Especias como la canela, el jengibre, la cúrcuma y el clavo tienen un efecto modulador en el metabolismo de la insulina; esto quiere decir que ayudan a controlar los niveles de glucosa. Además, el jengibre y la pimienta son potentes antinflamatorios, tienen efectos benéficos en el sistema inmune".

Por su parte, las semillas de cardamomo se destacan por ser  aliadas de los sistemas respiratorio y digestivo.

“La quinua, el ajonjolí, la chía y la linaza son consideradas superalimentos en grano pequeño, el ajonjolí aporta vitaminas del complejo B, vitamina E y tienen un efecto hormonal benéfico en la menopausia, la quinua también aporta proteínas minerales y es una fuente importante de fibra. La chía y la linaza son dos potentes antioxidantes ya que proporcionan fibra, calcio, proteínas y ácidos grasos omega 3 pero, además, al tener gran cantidad de fibra nos ayuda a regular el peso", explicó la experta.

También, ricas en fibra, las algas marinas tienen propiedades desintoxicantes y nutrientes de fácil asimilación, son bajas en calorías y compatibles con otros alimentos.

"Las algas marinas son un superalimento por aportar nutrientes como vitamina A, D, E, vitamina B, vitamina C, fósforo, potasio, yodo, fibra y proteína vegetal. A pesar de sus bondades, esta contraindicada en pacientes con enfermedades renal y con enfermedad tiroidea", indicó Rojas.

Los hongos comestibles, en todas sus variedades, contienen minerales, vitaminas y proteínas. Su consumo frecuente fortalece las defensas y beneficia el sistema circulatorio.

Otro superalimento es el ajo que, por su alto contenido de antioxidantes, ayuda a regular los niveles de colesterol y tensión arterial. Además, protege el cerebro y contribuye a retardar el proceso de envejecimiento.

Por otro lado, la maca, una raíz originaria de los Andes con un potente efecto remineralizaste, así como fuente de vitaminas, de complejo B y enzimas.  

"Los germinados de semillas y granos aportan variedad de beneficios ya que provienen del embrión de la semilla lo que hace que los nutrientes estén más disponibles, aumentan el contenido de vitaminas del complejo B, ácido fólico, enzimas digestivas, vitaminas C y además favorecen la absorción de calcio, hierro, zinc, magnesio y acido grasos esenciales, por esto mismo, están recomendados en la nutrición en todas las edades", puntualizó Rojas.

Y, por último, todos los productos que nos ofrecen las abejas aumentan las defensas del cuerpo, favorecen el tránsito intestinal, mejoran la memoria y, por sus propiedades energizantes, son útiles en casos de cansancio crónico y fatiga.