El cuello ortopédico que le protege no solo incomoda al médico Guido Porras, sino que le recuerda, a cada minuto, que fue golpeado y ultrajado por un paciente que llegó con heridas leves cuando cumplía su turno en la unidad hospitalaria de Santa Cruz en Medellín.“Se niegan rotundamente y demandan atención de forma muy agresiva, estando en ese momento, siento que a mansalva, por detrás, me toman el cuello, sin darme posibilidades a defenderme”, contó el médico Porras.La agresión fue provocada por un hombre de aproximadamente 30 años que llegó al hospital sin camisa ni tapabocas y embriagado; estaba acompañado de una mujer, también en estado de embriaguez.“No concebimos que el personal médico que está de frente a la atención de los ciudadanos sea objetivo de agresión física o agresión verbal”, declaró Martha Cecilia Castrillón, gerente de Metrosalud.La mujer que acompañaba al paciente, lo ayudó a atacar los médicos con sus uñas. La Policía llegó, pero los agresores fueron dejados en libertad.“Las heridas físicas mejoran, gracias a Dios ya me siento mejor y con ganas de volver a mi tarea, pero el estrés postraumático siempre queda, vueltas en la cabeza y le da a uno temor de regresar”, dijo el profesional.Los dos médicos agredidos fueron incapacitados, uno con trauma craneoencefálico y el otro con trauma cerrado de tórax.Este no es el único caso ocurrido en Antioquia. Según las autoridades, en El Bagre otro médico se encuentra amenazado.“La familia se disgusta y empieza un tema de amenazas a partir de redes sociales. Vamos y lo atendemos y ya estas personas, los médicos y el personal han puesto las denuncias ante las autoridades por las amenazas”, dijo el coronel Jorge Miguel Cabra Díaz, comandante de la Policía de Antioquia.Las autoridades de Antioquia les piden a los ciudadanos respeto por los trabajadores de la salud, debido a que gracias a ellos muchas vidas se han salvado.
La agresión ocurrió en la Unidad hospitalaria de Santa Cruz (nororiente de Medellín) el domingo 21 de junio, fecha en la que se celebró el Día del Padre.Uno de los médicos, quien reservó su identidad por seguridad, relató a Noticias Caracol que tanto él como su compañero recibieron múltiples golpes e insultos.Además, pese al reprochable hecho, ambos profesionales cumplieron con su deber.“Mi compañero queda con trauma de tórax y yo con un trauma craneoencefálico y pérdida del conocimiento, quedando con imposibilidad funcional. Aunque maltrechos, logramos terminar el turno”, dijo el profesional.Metrosalud emitió un comunicado en el que lamentó lo sucedido e hizo un llamado al respeto y trato digno tanto para los pacientes como para los empleados:“Rechazamos las agresiones violentas que se presentaron el día 21 de junio en la UH Santa Cruz contra dos médicos de nuestra institución, exigimos respeto y trato digno por la labor y el servicio que prestan día a día con esfuerzo y dedicación”.De acuerdo con la denuncia de los médicos agredidos, el paciente estaba en aparente estado de embriaguez y no usaba tapabocas.
En ese lugar está él, detrás de la valla, en la zona de peligro y portando su uniforme con orgullo, aunque tema contagiarse. Paradójicamente, quienes brindan seguridad también se sienten vulnerables al COVID-19.“Siente uno nervios cada vez que sale a la calle y vuelve a la casa, no sabe si de pronto lleva el virus”, manifiesto Jorge Fernández, subintendente de la Policía de Infancia y Adolescencia.Tiene el turno nocturno de vigilancia en este barrio que ahora está en cuarentena obligatoria. Aunque su esposa no puede pasar las noches junto a él, lo espera cada mañana junto a sus tres hijas.“Mi hija, cuando yo llego del trabajo, me dice que soy su héroe. Es una gran recompensa”, destacó el uniformado.Como él hay otros 90 policías y 30 soldados que durante 14 días están blindando las calles de este sector del nororiente de Medellín para que no se registren más contagios. Durante las noches los acompaña el halcón y drones para verificar desde el aire que se esté cumpliendo la medida.“Tenemos un sistema de vigilancia aérea que nos permite ver en qué calles se encuentran personas que no están cumpliendo el decreto que aislamiento y por medio de esta lo que hacemos es activar el servicio de policía para que vayan y conduzcan a esta persona hasta su residencia”, explicó el coronel Iván Santamaría, comandante operativo del Valle de Aburrá.Durante los tres días de cuarentena en Santa Cruz parte baja, 35 personas han sido sancionadas y dos personas capturadas por reincidencia, cada uno, hasta con cinco comparendos.“No han cumplido el pico y cédula, no se han inscrito en la plataforma ‘Medellín me cuida’ y aparte de eso es de ambular en los sectores”, indicó el coronel Santamaría.Según las autoridades este brote obedece a la indisciplina de algunos ciudadanos, unas 65 fiestas se han intervenido, por incumplir la medida.
El domingo, mientras Medellín se alistaba para la reapertura de sus grandes centros comerciales, la parte baja del barrio Santa Cruz fue cercado por un brote de coronavirus.“El 31 de mayo iniciamos un aislamiento inteligente porque tenemos 55 casos, de los cuales 13 se recuperaron. Lo que queremos es cortar las cadenas de transmisión para poder controlar este virus y minimizar que se puede expandir a otras zonas”, explicó Ruth Elena Mena, subsecretaria de Servicios de la Secretaría de Salud de Medellín.La Policía y el Ejército permanecen en la zona para garantizar el confinamiento de cerca de 2.000 familias.“Con Secretaría de Inclusión Social se hizo una caracterización de la zona y se entregaron 400 paquetes alimentarios a 400 familias, hoy seguimos el mismo proceso, estamos garantizando todo, no solo los servicios de salud”, indicó la subsecretaria.“También, vamos a hacer unas pruebas, una búsqueda activa para encontrar casos y para controlar el virus, para que no se nos vaya a propagar”, añadió la funcionaria.Actualmente, Medellín registra 225 casos activos de coronavirus, de los cuales 42 están en Santa Cruz.
El hermano menor de la víctima es señalado como responsable del homicidio. El joven fue capturado por las autoridades. Como Yuliana María Marín Gómez, de 25 años, fue identificada la mujer asesinada este fin de semana en Santa Cruz, comuna 2 de Medellín. De acuerdo con el Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (Sisc), la joven presentaba una herida en su cuerpo ocasionada con arma de fuego. Aunque familiares de la víctima la trasladaron a un hospital, la mujer no resistió y llegó sin signos vitales al centro asistencial. Señalado del homicidio fue capturado un joven de 22 años, quien es el hermano de Yuliana Marín. El crimen ocurrió el sábado 2 de mayo a eso de las 10:00 de la noche en el barrio Moscú número 1. Las autoridades investigan el caso para esclarecer lo sucedido. Ante el aumento de denuncias de violencia intrafamiliar en Medellín por la cuarentena, la Secretaría de la Mujer habilitó dos números de WhatsApp para atender y acompañar a las víctimas: 321 467 7071 y 305 319 2872. Además, la línea 123 está dispuesta las 24 horas del día para denunciar estos casos. Le puede interesar: Investigan como feminicidio crimen de mujer cuyo cuerpo apareció en el río Medellín
Su nombre es Alexánder Mosquera Hinestroza, quien según la Fiscalía aprovechó que un juez le dio detención domiciliaria para escapar. Esto fue en febrero de 2019 cuando fue detenido y llevado ante un juez de control de garantías de Cali, quien en la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento le dio ese beneficio. Pero la agresión se remonta siete años atrás. El 29 de enero de 2012 Millerly Palacios Mosquera, de 27 años, sufrió un ataque con arma blanca en su casa del barrio Santa Cruz, en el nororiente de Medellín. Al ser entrevistada por los investigadores de la Unidad de Vida de la Fiscalía, la víctima señaló a Mosquera Hinestroza de atacarla “luego de una discusión con el victimario a quien le pidió que no derrochara agua”. También lo acusó de golpearla cuando estaba en embarazo de su hija, aunque manifestó que no lo denunció porque sentía temor. El juicio contra Mosquera Hinestroza avanzó y ahora el juzgado Segundo Penal del Circuito de Medellín, con funciones de conocimiento, lo sentenció a 16 años y 8 meses de prisión por el delito de tentativa de homicidio agravado. Sobre Mosquera Hinestroza, de 37 años, pesa una orden de captura por estos hechos.
Setenta días después de ocurridos los hechos, el presunto delincuente se entregó a las autoridades en Medellín y relató detalles de este trágico suceso familiar. La historia, según informó la Fiscalía, comenzó el 2 de noviembre de 2019 en el barrio El Playón, de la comuna 2 Santa Cruz, en el noroccidente de la capital antioqueña. Ese día, Marlon Julián Ospina Usme fue a visitar a su papá, identificado como Pedro Nel Ospina Castrillón, de quien sabía que ahorraba unos pesos producto de la pensión que recibía mensualmente y del alquiler de unas propiedades que tenía en la ciudad. En medio de la visita, Marlon Julián habría intentado robar a su papá, quien “al parecer, cuando este estaba sacando el dinero, se dio cuenta del hurto e intentó evitarlo”, informó la Fiscalía. Por lo que “se presume que al ver esta reacción, su hijo lo amarró y le habría puesto una bolsa en la cabeza, además de golpearlo y apuñalarlo”, detalló el ente acusador. Tres días después de que las autoridades hallaron sin vida al viejo Pedro Nel, el 5 de noviembre de 2019, su hijo apareció muerto en el barrio Zamora, cerca de El Playón. Su cadáver presentaba múltiples impactos de arma de fuego a la altura del tórax y la cabeza. Tras lo sucedido, las autoridades comenzaron la investigación del caso y este martes 14 de enero, 68 días después, un hombre se presentó ante la Fiscalía General de la Nación para confesar que él había asesinado a Marlon Julián. Dijo llamarse Juan Camilo Cortés Castañeda y dio un dato que sorprendió a los investigadores: dijo que la víctima era su tío, que tenía 24 años. Luego relató, según la Fiscalía, cómo le quitó la vida a su tío Marlon Julián aparentemente en una venganza porque este le confesó que había matado a su abuelo para poder robarlo. “Según la información obtenida por el ente investigador, el día de los hechos Ospina Usme llamó a su sobrino para que hablaran y, después de varias horas de conversación, el tío le confesó que él había asesinado a su propio padre, Pedro Nel Ospina Castrillón”, reveló la Fiscalía. Además, el ente acusador informó: “Al escuchar la versión, Cortés Castañeda le dijo a su tío que se fuera y le reprochó el hecho; Ospina Usme se fue del lugar, pero minutos después cuando salió de su casa, su sobrino le habría propinado siete impactos con armas de fuego”. Luego de contar la historia, el sobrino, de 20 años, fue detenido y llevado a audiencias judiciales. Por solicitud de la Fiscalía, el Juzgado 28 Penal Municipal de Medellín con funciones de control de garantías le impuso medida de aseguramiento y lo envió a prisión. Pero no aceptó ser culpable de los delitos de homicidio simple y porte ilegal de arma de fuego de defensa personal.
Uno de los cadáveres estaba atado de pies y manos dentro de un costal, el otro fue envuelto en un colchón. Medellín vivió un violento fin de semana. En menos de 24 horas se registraron seis homicidios; dos de ellos figuran como cuerpos abandonados en vía pública. El primer caso ocurrió el sábado 14 de septiembre en el corregimiento de San Cristóbal, donde la Policía encontró a un joven de 22 años envuelto en un colchón cuando patrullaban la zona. El segundo caso se registró en el barrio El Playón el domingo 15 de septiembre. A las 3:30 de la tarde habitantes del sector alertaron a las autoridades de un cuerpo dentro de un costal, que estaba atado de pies y manos. Los dos homicidios son materia de investigación para las autoridades. A estos casos se suma el asesinato de dos hombres de nacionalidad venezolana que fueron baleados en el barrio San Pablo. Las víctimas son Yuliany Enrique Colmenares de 31 años y José Gregorio Pachano de 49 años. Además, una mujer de 38 años, identificada como Ángela Isabel Hidalgo, fue apuñalada a la altura del cuello cuando intentó mediar en una riña. El hecho ocurrió a las afueras de un establecimiento comercial del barrio Versalles No. 2, uno de los protagonistas de la gresca era el compañero sentimental de la víctima, según indicó el comandante de Policía del Valle de Aburrá, general Eliécer Camacho.
Según la Policía, alias ‘Buchepisca’ estaría implicado en el asesinato de 15 personas en el Bajo Cauca. Una de las víctimas era un agente de tránsito. El rostro de Luis Ángel Arango Montoya aparece en uno de los carteles de los hombres más buscados por las autoridades del Bajo Cauca. Y es que según la información entregada por la Policía, no es para menos. Este hombre, conocido con el alias de ‘Buchepisca’, es acusado de participar en los homicidios de 15 personas, tres de ellas de manera directa. Información entregada por la Policía de Antioquia indica que él le habría disparado a Diego Mauricio Terán Puerta, un agente de tránsito de Cáceres, en febrero de 2019. Además, le atribuye la fuente oficial las muertes de Enuar Santiago Ramírez y Sebastián Paternina Londoño, ocurridas el 24 de enero de 2017. “Su actuar delincuencial data desde el año 2016 y consistía en la comisión de homicidios selectivos; durante su permanencia en el grupo criminal los caparros, ‘Buche Pisca’ habría sido destinado al municipio de Cáceres adoptando el alias de ‘Jhon Cero’”, informó la Policía. Los asesinatos habrían sido cometidos “con el objetivo de disputarse el negocio de la droga y las extorsiones con otras organizaciones con presencia en Tarazá, Cáceres y Caucasia desencadenando una guerra entre estructuras criminales”, según la Policía. Al verse cercado por las autoridades, que le seguían la pista hacía seis meses, el hombre habría escapado en Medellín y se habría dedicado a la venta de perros calientes y otras comidas rápidas en el barrio Santa Cruz, en el nororiente de esa ciudad. Sin embargo, no logró evadir el cerco policial. “Grupos Especiales y de Inteligencia adelantaron operaciones y labores investigativas de alto nivel en esta zona, creando un cerco a este delincuente del que no pudo escapar; y que al verse presionado por las constantes operaciones, trato de evadir a las unidades de inteligencia utilizando como fachada una venta de comidas rápidas callejera”, explicó la fuente. En contra de ‘Buchepisca’, las autoridades lograron declaraciones juradas, entrevistas, reconocimiento fotográfico, interceptaciones telefónicas, inspecciones judiciales, vigilancias y seguimientos y búsqueda en base de datos avanzadas, las cuales deberá desmentir ante los jueces. Golpes a Los Caparros En medio de estas operaciones, la Policía realizó varios allanamientos en los barrios Divino Niño y Villa Garzón de Caucasia, donde aprehendieron a dos menores de 17 años conocidos como ‘La Flaca’ y alias ‘Jawey’, señalados de haber lanzado un artefacto explosivo a la estación de Policía Caucasia el 12 de Julio de 2019. Ambos deberán dar la cara ante el Sistema de Responsabilidad Penal Para Adolescentes por el delito de terrorismo. También cayó otro menor de edad de 17 años que tenía en su poder 79 cigarrillos de marihuana listos para ser comercializados en esta zona. Según la Policía, este 2019 se han capturado 104 integrantes de Los Caparros y el Clan del Golfo.
Las autoridades investigan los hechos alrededor de la muerte de la menor, luego de caer en un balde con agua. Este viernes se conoció el caso que generó el cierre de un hogar comunitario del Instituto Colombiano de Bienestar Familia, ubicado en el barrio Popular número 2, nororiente de Medellín. En un aparente descuido, una menor de 18 meses que era atendida en el lugar, cayó en un balde con agua, y aunque fue trasladada a la Unidad Intermedia del sector, allí llegó sin signos vitales. “Desafortunadamente, dan cuenta de que, en un descuido, esta niña cae en un balde que tenía agua, no se percatan y cuando la observan ya estaba muerta”, señaló el general Eliécer Camacho, comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá. Nadie en la familia de la niña se explica lo ocurrido, no entienden cómo la menor terminó en el recipiente. Por su parte, el ICBF emitió un comunicado en el que se refirió a este caso y aseguró que suspendió el hogar comunitario luego de que se registrara la muerte de la niña, "en circunstancias que son materia de investigación por parte de las autoridades". Asimismo, el ICBF ordenó la reubicación de otros niños que eran atendidos en dicho hogar. "Desde el momento que se conocieron los hechos un equipo de profesionales del Instituto ofrece acompañamiento psicosocial a la familia de la niña", agregó Selma Patricia Roldán Tirado, directora regional en Antioquia del ICBF. Todavía no hay una denuncia formal por el hecho, pero la responsable del hogar comunitario podría enfrentar cargos por homicidio culposo.
De Colombia fue expulsado un ciudadano australiano que, presuntamente, estaría vinculado al delito de explotación sexual de menores. Esta acción fue llevada a cabo por Migración Colombia en el aeropuerto de Santa Marta.>>> Le puede interesar: Hombre es señalado de lanzar a su pareja por la ventana de un segundo pisoEste sujeto fue expulsado de Colombia tras una denuncia que fue interpuesta por Federico Gutiérrez, alcalde de Medellín. Con este extranjero ya van 41 los reportados a Migración.En su cuenta de X, Migración Colombia manifestó que se hizo “efectiva la medida de expulsión al australiano Charlie Hardy, quien al ingresar al país presentaba en nuestros sistemas una consigna expedida por la Alcaldía de Medellín por vulneración de normas restrictivas relacionadas con la explotación sexual”.>>> Vea, además: Inauguran moderna planta para producir vacunas en Rionegro, Antioquia
Durante la noche de este viernes, 17 de mayo de 2024, se registró una asonada en el municipio de Tibú, Norte de Santander. Al parecer, la situación fue desencadenada por la captura de un sujeto que, supuestamente, se movilizaba con pasta de coca.>>> Otros temas: Asonada contra policías en Bello en medio de velorio de un supuesto delincuenteLa comunidad empezó a lanzar bombas molotov contra la estación de Policía del corregimiento Campo Dos. Según las autoridades, algunos hombres instrumentalizaron menores para tratar de quemar la estructura y generar caos.En videos publicados en las redes sociales se aprecia el momento en el que algunas personas se esconden detrás de un camión, que quedó atravesado en la carretera, para lanzar elementos contra la estación de Policía.Organismos de defensa de derechos humanos están tratando de mediar para controlar la situación, que es crítica en esa zona de Norte de Santander.>>> Vea, además: A militares heridos en asonada en Caloto los golpearon con piedras y los atacaron con machetes
La película colombiana ‘Mi bestia’, de la directora Camila Beltrán, se presentó en ACID, sección alterna del Festival de Cannes. >>> También puede leer: El director Mauro Mauad habló de Sin Clemencia, película que ya está en las salas de cine‘Mi bestia’ es la primera película colombiana en llevarse el honor de hacer parte de la sección ACID del Festival de Cine de Cannes, que este viernes, 17 de mayo de 2024, recibió su distinción en tan importante escenario.ACID es la sección paralela de Cannes que premia el trabajo del cine independiente. Elige a nueve películas entre miles de obras postuladas de todo el mundo."Es un gran orgullo poder hacer parte de esta selección, es una selección muy especial porque es una selección que está hecha por cineastas que defiende el cine singular, que defiende las propuestas diferentes y, bueno, estamos muy felices", señaló la directora de la cinta. El reconocimiento fue para Camila Beltrán y Marcela Mar, quien, además de actuar, por primera vez asume el rol de productora en el cine, entre otros personajes de esta cinta orgullo colombiano.'Mi bestia' es la ópera prima de Camila Beltrán, quien desde el 2018 escribió esta historia que ocurre en la Bogotá de los años 90 y que protagoniza la actriz natural Stella Martínez, que interpreta a Mila, una joven que experimenta los cambios de la adolescencia alrededor de una profecía.‘Mi bestia’ fue aplaudida este viernes en Cannes. Es una obra beneficiaria del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico, FDC, y deja una emoción inevitable tras el trabajo duro del cine colombiano.>>> También puede leer: Oppenheimer: conozca al colombiano que participó en efectos especiales de la cinta
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, desde Ayapel, en el departamento de Córdoba, reconoció su responsabilidad en el escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), relacionado con los carrotanques para La Guajia. Hizo referencia a Olmedo López, exdirector de la entidad, y la situación que ahora debe enfrentar su reemplazo, Carlos Carrillo.>>>Vea también: Olmedo López afirma que asume “un riesgo de muerte” por hablar de escándalo en la UNGRD“Nosotros fuimos a través de los decretos de emergencia a otro tipo de solución en La Guajira... Los decretos se cayeron y no es culpa de la Corte porque la Corte no, sino que mire lo que pasó. En la rapidez se robaron la plata y es una responsabilidad mía porque yo puse a Olmedo (López) al frente de la UNGRD. Y ahora usted está recién posesionado y tiene que asumir esta tormenta. Así que tiene que mover el cerebro rápidamente porque si no el caballo lo tumba”, afirmó el jefe de Estado.Justamente en Ayapel, según reportó la Presidencia de la República y el mismo Gustavo Petro, se realizó “una asamblea con los damnificados de las inundaciones en la región de La Mojana, para ofrecer soluciones que permitan enfrentar la crisis de la ruptura del boquete de Caregato”.“Informamos a la comunidad la destinación de $680.000 millones para adquisición de tierras y desarrollo productivo en esta región”, indicó la Presidencia.>>>Le puede interesar: Procuraduría abrió nueva investigación contra Olmedo López, exdirector de la UNGRD
Durante la noche de este viernes, 17 de mayo de 2024, se realizó un escabroso hallazgo en Bogotá. Dos cadáveres fueron encontrados en el interior de un vehículo que estaba abandonado.>>> Otros temas: Periodista agredido tras crimen de director de La Modelo: “Auxiliar obedecía órdenes”Según versiones preliminares, los cuerpos estaban dentro de un carro marca Renault Logan. El vehículo estaba al frente del CAI de Santa Librada, ubicado en el suroriente de la capital de Colombia.Al parecer, las personas que dejaron los cadáveres escaparon en un taxi. Las autoridades de Bogotá se trasladaron al lugar para realizar las inspecciones a la escena y adelantar las primeras pesquisas.>>> Vea, además: La denuncia de Elmer Fernández antes de ser asesinado: “Temo por mi vida”