Muy mal le salió a Juan Carlos Pardo el experimento de poner a estas aves a adivinar el resultado de un partido del Mundial.
Juan Carlos Pardo sufrió los rigores de la lluvia, pero encontró una forma muy particular de mantenerse calientico.
Hasta hace unos meses, el glaciar Ritacuba Blanco, uno de los picos más altos de Colombia, estaba cubierto por un manto de nieve homogéneo. Pero el brutal fenómeno de El Niño lo resquebrajó, provocando gigantescas zanjas, inéditas señales de su agonía.>>> Le puede interesar: Por incendio en Isla Salamanca, presuntos responsables fueron judicializadosDesde noviembre, cuando la temperatura comenzó a subir en el país como consecuencia del evento climático, la capa blanca empezó a desaparecer a una velocidad que los expertos de la Sierra Nevada El Cocuy, en el extremo este del departamento de Bocayá, calificaron de alarmante.En la parte más baja del Ritacuba Blanco, a unos 4.950 metros sobre el nivel del mar, aparecieron hendiduras de varios metros, constató la agencia de noticias AFP en una visita reciente. La roca, que durante siglos se ocultaba bajo la nieve, quedó expuesta.Autoridades culpan a El Niño, fenómeno natural causado por el calentamiento del océano Pacífico, que desde finales de 2023 golpea a Colombia. El país, uno de los más biodiversos del mundo, registró en marzo el mes más caluroso de su historia, con temperaturas de hasta 42,4° C en algunas zonas."El fenómeno de El Niño es quizás lo peor que le puede pasar a nuestros nevados o glaciares colombianos ya que hay ausencia de nubosidad y por lo tanto no precipita nieve en los glaciares, que es lo que necesitamos para que se mantengan", explica Jorge Luis Ceballos, glaciólogo del estatal Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam).El Ritacuba Blanco es el más quebrado de los picos nevados del país, en cuenta regresiva hacia la extinción. Mientras se deshiela gota a gota, los turistas lo visitan y posan para fotografías entre los altos muros de las grietas. De los 14 glaciares tropicales que existían en Colombia a comienzos del siglo XX solo quedan seis."A finales del año pasado en este lugar las paredes medían seis metros aproximadamente", pero ahora "prácticamente no alcanza ni al metro, es bastante la cantidad de hielo" que se ha perdido en los últimos "seis meses", cuenta preocupado Edwin Prada, un guía local.El Niño aceleró la desaparición de los glaciares de El Cocuy, un paraíso frío en el que nacen ríos y al que solo se llega tras una caminata de siete kilómetros en ascenso.Esas montañas son hogar de cóndores y mamíferos como tapires y venados.Según cifras de 2022, unos 12,8 km2 de ese territorio estaban entonces tapados de hielo y nieve, la extensión más pequeña desde que el Ideam monitorea los datos. En 2010 eran 16,5 km2 y en 2003 19,8 km2.En los últimos meses "se derritió la nieve por ausencia de precipitaciones, quedó expuesto el hielo a la radiación solar y esto aceleró la fundición del hielo", sostiene Ceballos, la principal autoridad del tema en Colombia."Observamos un cambio en los espesores de hielo entre 2 y 3 metros (...) eso para un glaciar colombiano es demasiado", agrega.En 2023 el planeta experimentó las temperaturas más altas desde que se tiene registro, según el Observatorio Europeo del Clima Copernicus (C3S). La ONU calcula que 2024 el mundo podría romper ese récord.Los glaciares, fieles termómetros del calentamiento global, dan señales de alerta. En Asia, el continente más afectado por los calores extremos, los picos helados del Himalaya también perecen, amenazando la seguridad hídrica de la región, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).Según informó el observatorio Copernicus este miércoles, El Niño está "debilitándose", permitiendo vislumbrar un posible respiro más tarde en el año, pero sin cambiar la tendencia fundamental de un calentamiento alimentado por el uso masivo de petróleo, carbón y gas fósil.Los estragos del fenómeno de el NiñoEl Niño provocó en enero incendios que arrasaron una parte de los emblemáticos cerros de Bogotá. Ese mes, el fuego consumió más de 17.000 hectáreas de bosque en todo el país.Algunas de las llamas llegaron hasta los páramos, ecosistemas frágiles únicos de países andinos cuyos frailejones (vegetales típicos) quedaron calcinados. Allí también se secaron pequeñas lagunas que suministran el agua a poblados.En una decisión sin precedentes en este siglo, la capital colombiana decretó un racionamiento en el servicio del acueducto ante el bajo nivel de sus embalses.Humberto Estepa, habitante de Güicán, un poblado cercano al glaciar, se estremece cada vez que sube al Ritacuba Blanco.El deshielo "no era tan notorio como ahora, este año ha sido demasiado el descongelamiento", sostiene. "Este año, cada vez que subo está peor, ya hay una grieta nueva, más descongelado (...) uno siente mucha nostalgia como habitante de acá", lamenta.Luisa Cepeda, una médica de 39 años, caminó junto a su hija adolescente para ver el ocaso del glaciar. "Quería conocerlo, no me lo quería perder antes de que se acabara (...) da tristeza ver cómo se está fracturando", dice.>>> Vea más: Campesino en Caquetá encuentra pez en peligro de extinción y lo devuelve a su hábitat
Al parecer, una modalidad de robo está tomando fuerza en Bogotá y Tolima, donde delincuentes se aprovechan de la buena fe de las víctimas para hurtar el dinero que tiene destinado a comprar teléfonos celulares marca iPhone.>>> Le puede interesar: Ladrones fueron cogidos con las manos en la masa y casi son linchados en CundinamarcaSegún la denuncia de las víctimas, los delincuentes les ofrecían celulares por el asombroso precio de 1 millón de pesos.Cuando llegaban al sitio de encuentro, en El Espinal, Tolima, para entregar el dinero y reclamar el teléfono terminaban siendo asaltadas.El coronel Fabio Ojeda, comandante de la Policía del Tolima, explicó que “estos sujetos se dedicaban al secuestro extorsivo. Citaban a personas de la ciudad de Bogotá al municipio de El Espinal, con el propósito de suplantar comerciantes para vender objetos”.Luego de que los lograban engañar, las víctimas “eran amordazadas, amarradas y a sus familiares les exigían altas sumas de dinero por su liberación”.Gracias a las denuncias e investigaciones, las autoridades detuvieron a los señalados ladrones y secuestradores en la localidad de Usme, en el sur de Bogotá.>>> Le recomendamos leer: Familia fue víctima de estafa: pagó el viaje de sus sueños y terminó tumbada
Conducir un vehículo implica una gran responsabilidad y exige atención a diversos factores, entre ellos, la elección del calzado adecuado. En Colombia, al igual que en otros países, ha surgido la duda sobre la legalidad y seguridad de conducir descalzo, con sandalias o hasta chanclas.>> ¿Cuáles son los barrios donde más roban carros en Bogotá?¿Qué dice el Código Nacional de Tránsito sobre el calzado para conducir?Si bien no existe una normativa específica en el Código Nacional de Tránsito que prohíba explícitamente esta práctica, la seguridad vial debe ser el factor primordial. Expertos en la materia, como el abogado Pedro Rodríguez Martín, recomiendan evitar conducir descalzo o con calzado inadecuado, ya que esto podría aumentar el riesgo de accidentes. Así mismo, Rodríguez explicó para el portal CarroYa que esta debería ser una práctica sancionada teniendo en cuenta el alto índice de accidentalidad del país.>> Las razones por las que su moto puede perder la revisión tecnomecánica¿Por qué evitar conducir descalzo o con chanclas?Falta de control del vehículo: el calzado inadecuado, como las sandalias o zapatos sueltos, puede dificultar el manejo de los pedales, especialmente en situaciones que requieren reacciones rápidas, como frenadas repentinas o maniobras evasivas. Riesgo de lesiones: en caso de accidente, la falta de protección adecuada en los pies puede agravar las lesiones. Distracciones: conducir descalzo o con sandalias puede generar incomodidad o molestias que desvíen la atención del conductor de la carretera. >> ¿En qué casos podrían inmovilizar su moto? Tome nota¿Qué tipo de calzado es adecuado para conducir?Zapatos cerrados y ajustados: brindan mayor sujeción al pie y evitan que se deslice de los pedales. Suela antideslizante: garantiza mejor adherencia y control al pisar los pedales. Tacón bajo y ancho: Permite un manejo más preciso de los pedales y reduce la fatiga en los pies. Evitar correas y adornos: disminuye el riesgo de que se enganchen en los pedales o en otros elementos del vehículo.
En la noche del 9 de mayo, en la localidad de Kennedy, la Policía Metropolitana de Bogotá se llevó una sorpresa al incautarse de 100 kilos de marihuana, distribuidos en 175.000 dosis, que eran guardados en una casa de la zona.>>> Le recomendamos leer: Familia fue víctima de estafa: pagó el viaje de sus sueños y terminó tumbadaEl coronel Julio Cesar Botero, oficial de Inspección de la Policía, le contó al Ojo de la Noche de Noticias Caracol que la comunidad de Kennedy fue la que alertó sobre el almacenamiento y distribución del estupefaciente.“Logramos sacar un total de de 175.000 dosis de estupefaciente de la calle y en estos momentos, la persona (señalada y capturada por guardar la marihuana) se encuentra siendo judicializada por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes”, relató el coronel Botero.Además, reveló que el señalado delincuente se encontraba dentro de la vivienda cuando fueron a hacer las respectivas investigaciones.>>> Le puede interesar: Volvieron a atacar los ladrones de camionetas en Bogotá: robaron a víctima frente a garaje
En las últimas horas, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, anunció que el nivel del embalse Chingaza llegó a 20,11%.>>> ¿El racionamiento de agua en Bogotá podría ir hasta el 2025? Esto es lo que se sabePese a que la meta propuesta de la Alcaldía se cumplió, el mandatario capitalino insiste en la necesidad de reducir el consumo de agua, pues el bajo nivel en Chingaza ha hecho que Bogotá haya entrado en racionamiento desde hace un mes.“Las lluvias de los últimos días han ayudado, pero debemos mantener la tendencia de reducir nuestro consumo. Bogotá nos necesita”, señaló Carlos Fernando Galán.>>> Pronóstico del clima hoy 10 de mayo en Bogotá: ¿hasta qué hora habrá aguaceros?