En Miami, un ciudadano estadounidense fue detenido bajo señalamientos de abuso sexual de menores colombianas. El sujeto fue capturado en el aeropuerto de esa ciudad minutos antes de abordar un vuelo con rumbo a Bogotá y confesó haber ingresado a Colombia en numerosas ocasiones para cometer ese delito.Habla periodista que, en pleno programa de TV, acusó a su papá y su tío de abuso sexualSegún la denuncia penal interpuesta en la Corte Federal del Distrito Sur de Florida, se trata de Estefan Andrés Correa, ciudadano estadounidense residente en Miami.Al ser detenido se disponía a viajar a Bogotá y llevaba consigo 9 celulares en los que tenía cerca de 50 videos en los que aparecía abusando de unos 10 menores entre los 9 y 15 años.En uno de los dispositivos, las autoridades encontraron chats con quien sería la persona que traficaba a las niñas en Medellín.Padrastro de niña víctima de abuso fue capturado luego de escaparse con la mamá de la menorEn el momento de su captura, ya había negociado a 4 menores de edad y confesó que no era la primera vez que lo hacía. Desde 2022 hay registro de 45 viajes que hizo a Colombia.Ahora enfrenta cargos por intento de tráfico sexual de menores e intento de viajar para participar en conductas sexuales ilícitas. Por su parte, el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, señaló que esta operación es un claro mensaje a aquellos que van a Antioquia a explotar a menores.Cayó violador en serie: engañaba a sus víctimas diciendo que tenía agencia de modelaje¿Dónde denunciar violencia sexual o intrafamiliar en Colombia?Línea Púrpura en Bogotá 018000 112137, WhatsApp 3007551846 o escribiendo al correo electrónico lpurpura@sdmujer.gov.coLínea Nacional: 155Policía Nacional: 123Línea Fiscalía General de la Nación: 122Instituto Colombiano de Bienestar Familiar: 018000 918080Línea de Protección para niños, niñas y adolescentes: 141
La Selección Colombia femenina Sub-20 expondrá este martes 23 de abril, en Guayaquil, su invicto en el comienzo del hexagonal final del Sudamericano de la categoría, que abrirá con el superclásico entre Argentina y Brasil, y continuará con el choque entre Paraguay y Venezuela. A las 9:00 de la noche, en horario de nuestro país, será el partido entre cafeteras e incas.
El Gobierno nacional dejó en firme la resolución que fija el castigo para quienes derrochen energía eléctrica en Colombia. Dependiendo del estrato se cobrará un sobreprecio por cada kilovatio adicional.Gobierno anuncia incentivos para quienes ahorren energía en Colombia: ¿bajará valor de la factura?Lo primero que se debe tener en cuenta es que la resolución aplica para todos los usuarios del país, es decir, hogares, negocios e industrias.A cada usuario se le calculará un consumo individual promediando los consumos de los últimos tres meses. La idea es que las familias procuren no pasarse de ese promedio. De hacerlo, se cobrará un sobreprecio por cada kilovatio adicional.Así será el cobroPara estratos 1, 2 y 3 por cada kilovatio hora adicional pagará 30% más de lo que cuesta el kilovatio.Para estratos 4, 5 y 6 por cada kilovatio hora adicional pagará 50% más de lo que cuesta el kilovatio.Para comerciales e industriales por cada kilovatio hora adicional se pagará el doble.Por ejemplo, para sacar el consumo promedio de una familia estrato 2 se suma el consumo de los últimos 3 meses hasta marzo y se divide en 3. Si en enero consumió 40 kilovatios, en febrero 45 y en marzo 42, el promedio dará 42 y ese resultado es su consumo promedio, que no debería ser sobrepasado.¿Esperanza en la generación de energía por las lluvias? Hay leve incremento en niveles de embalsesSi se pasa de ese tope y consumió, por ejemplo, 60 kilovatios, entonces quiere decir que se pasó por 18 y allí ocurrirá lo siguiente: los primeros 42 kilovatios se los cobrarán al valor nominal del kilovatio, que para este ejercicio es de 870 pesos.Los 18 kilovatios de exceso se los cobrarán a 1.131 pesos, que es el valor nominal con el 30% de recargo.Las comercializadoras de energía tienen 5 días hábiles para socializar y explicar este programa. De la medida están exentos centros de salud, hospitales, clínicas y centros educativos.Sanciones por excederse en consumo de energía: esto es lo que pagaría
Un niño de 10 años confesó haber asesinado a un hombre en Texas, Estados Unidos. Cuando ocurrió el hecho, el menor tenía tan solo 7 años de edad.Niño de 12 años mató a balazos a un compañero e hirió a otros dos en FinlandiaLa justicia del estado de Texas determinó que el niño no podrá ser juzgado por ese caso porque la ley no permite imputar a menores de 10 años y el hecho pasó cuando no tenía esa edad.El hombre víctima del asesinato fue identificado como Brandon O’Quinn Rasberry, de 32 años y quien fue encontrado sin vida con un tiro en la cabeza el 18 de enero del año 2022.El niño de 10 años, durante un interrogatorio, confesó que asesinó a este hombre. "En el momento del asesinato, el menor sospechoso tenía 7 años, una semana antes de cumplir 8 años", dice en un comunicado de la oficina del sheriff del condado de Gonzales.Las autoridades sí acusaron al niño con relación a unos hechos en donde él habría amenazado a un estudiante de su escuela. De acuerdo con el diario USA Today, la oficina del sheriff afirmó que la amenaza desembocó la confesión del homicidio de Rasberry.De acuerdo con las revelaciones del menor, él no tenía ninguna razón para asesinar a Brandon O´Quinn. El comunicado detalla que "también le preguntaron al niño si estaba enojado con Brandon por alguna razón o si Brandon alguna vez le había hecho algo para enojarlo. El niño dijo que no".Los investigadores dieron a conocer detalles del asesinato: "El niño declaró que observó a Brandon durmiendo en su cama y se acercó a Brandon y disparó el arma de fuego contra Brandon, golpeándolo una vez en la cabeza. El niño dijo que, cuando salía de la casa rodante, disparó el arma de fuego otra vez contra el sofá dentro de la casa rodante".Finalmente, se estableció que el niño de 10 años será sometido a una evaluación y a un tratamiento de salud mental.Joven de 16 años fue asesinado por su exnovia tras una discusión
Una polémica se desató en Ibagué luego de que la Alcaldía decidiera unirse al INPEC para llevar a estudiantes a la cárcel Picaleña. La estrategia pretende que los jóvenes se enfrenten a esta realidad.Sacerdote que administra cementerio en el Quindío fue amenazado de muerte“Esto es un paseo, eso de robar no pasa nada, cometer un delito no pasa nada, ir contra las normas no pasa nada, pero acá ustedes se van a encontrar con la realidad de lo que sí pasa. En el complejo de Ibagué tenemos 5.050 privados de la libertad, dentro de los cuales hay 460 mujeres. Aquí es para todos”, con estas palabras de un portavoz del INPEC empieza el recorrido que hacen estudiantes de colegios públicos y privados de Ibagué a la cárcel de Picaleña.“No cabe duda de que el programa Delinquir No Paga salva vidas. Los muchachos hoy viven en una burbuja y con este programa ellos se acercan a una terrible realidad. Además de eso, después hacemos una reunión con los padres de familia y con los estudiantes, y en esa reunión siempre hemos encontrado que es un programa positivo”, explicó Edward Amaya, secretario de Gobierno de Ibagué.Los estudiantes, acompañados de apoyo sicológico, algunos padres de familia y organismos de derechos humanos, recorren los patios del penal.“Lo que queremos es que nuestros jóvenes, que viven ocupados en las redes sociales, se acerquen a la realidad y puedan tomar buenas decisiones”, aseguró Johana Aranda, alcaldesa de Ibagué.Aunque para algunas personas este método no es acertado, la sicóloga Fabiola Téllez, quien trabaja con menores de edad, dijo que lo importante es que tengan un debido acompañamiento. “Es acorde a la situación de que ellos afronten esto desde el efecto espejo: solamente cuando yo me veo en ese espejo puedo minimizar riesgos de tener una situación parecida", explicó.Esta estrategia fue implementada desde el año 2021 por el INPEC en la cárcel Bellavista de Bello, Antioquia, y, debido al aumento de jóvenes inmersos en delitos, la Alcaldía de Ibagué decidió adoptarla.¿Dejaron volar a alias Zeus? Investigan a policías que tenían que custodiarlo