“Lo único que tenemos para subsistir es la matica porque es lo único que nos ha dado el Estado”, afirma Daniel Caicedo, líder de la cuenca del río Salaquí, que denuncia el abandono por parte de los gobiernos departamental y nacional.“Nosotros somos parte de este país, no somos el problema, y hemos visto nuestros derechos vulnerados”, afirmó.Insistió que el cultivo ilícito “es lo único que nos ha dejado el Estado para supervivencia y hoy se encuentra el Estado metiendo aquí la tropa”.Édgar Rentería, habitantes de Riosucio, denuncia que “lo de nosotros los campesinos, los pobres, no vale nada. Hay gente que tiene cinco, seis, diez, doce hectáreas de plátano. ¿Para qué las tenemos? Para nada las tenemos porque no tenemos un comercio asegurado. Entonces lo único que nos está dando la comida son esas maticas y nos las quieren arrancar, tampoco vamos a aceptar que nos las arranquen así hasta no llegar a algún acuerdo”.Sugeli, una de las afectadas, reconoce que hay gente que vive “de la coca, no es mentira, otros también vivimos del plátano, pero necesitamos los ríos, necesitamos que el pueblo de Riosucio, las veredas, todos seamos escuchados”.Y es que Conrad Valoyes Mendoza, alcalde de Riosucio, recalca que “cada vez que se incrementan las lluvias, la cuenca de Salaquí -por la tala indiscriminada de bosque- se tapona”, y en la población “se están perdiendo 600.000 plátanos semanales en virtud de que no hay vía por donde sacarlos”.A esta situación se suma el problema de la salud y la educación, que brilla por su ausencia en la región chocoana.
Conrad Valoyes, alcalde de Riosucio, Chocó, envió un mensaje urgente al gobierno nacional para prevenir “una catástrofe peor” al incendio que hace apenas una semana acabó con la vida de una niña y una joven.“En la ribera del río Atrato tenemos 120 casas que están en riesgo, en este sitio se fueron más de 14 río abajo”, explicó el mandatario, por causa de la erosión.Según el alcalde de Riosucio, esta población ya ha perdido cinco calles, pues cada vez cede más el agua y decenas de familias quedan en riesgo.“Esperamos que el gobierno, a través de la oficina de Gestión del Riesgo, nos puedan ayudar para que estas personas las podamos reubicar”, solicitó Valoyes.Además, pidió colaboración para la construcción de un muro de contención.
Un cortocircuito habría sido la causa del gigantesco incendio en Riosucio que, en cuestión de minutos, dejó 97 familias damnificadas, 49 viviendas incineradas, 25 semidestruidas, 8 locales comerciales afectados, dos personas fallecidas y una lesionada.Una de las personas afectadas por las llamas es Hanier Matute Márquez, que dejó a un lado el miedo para ayudar a sus vecinos.Primero se roció agua para resistir el calor de las llamas y, sin escatimar esfuerzos, lanzaba baldados a las viviendas que eran consumidas rápidamente por la conflagración en el municipio de Riosucio.“Nos tocó duro, la candela estaba demasiado dura, pero nos metimos; la idea era apagar el incendio y gracias a Dios se logró”, recordó sobre la tragedia.Otra de las damnificadas fue la profesora Helena Moreno, que recorre entre puñados de cenizas la que hace unos días era la casa que habitaba con sus cuatro hijos.Tres manzanas quedaron reducidas a escombros por el incendio estructural en pleno corazón de la cabecera municipal de Riosucio.Para Hanier es triste saber que perdió todo de un momento a otro.“Tener sus cosas y quedarse sin nada, eso es muy duro. Uno hace un sacrificio para conseguir sus cosas y quedar sin nada uno, eso deprime”, sostuvo.Con ollas comunitarias, la Alcaldía del municipio chocoano atiende a los damnificados, que también denuncian la falta de un albergue con las condiciones necesarias para resguardarse.El gobernador del Chocó, Ariel Palacios Calderón, se comprometió con dotar al nuevo cuerpo de bomberos y entregar una motobomba a la unidad de gestión del riesgo del municipio.Asimismo, pidió al alcalde de Riosucio a “que se presenten todos los proyectos que el considere sean necesarios y nosotros, con los recursos de regalías, poderlos financiar”.Los damnificados, por su parte, solicitan ayuda de utensilios de cocina, ropa y colchonetas mientras recuperan lo que perdieron.Hace una década, en esta población del Chocó, ubicada al lado del Atrato, otro incendio acabó con 45 casas, dejando sin techo a más de 500 personas.Por su parte, Daniel Palacios, viceministro del Interior, afirmó “que en un mes iniciará la construcción de las nuevas viviendas para esas personas que perdieron todo y en un plazo máximo de seis meses estaremos entregando esas viviendas”.
El aguacero que por ocho horas cayó en la comunidad indígena de Chintadó en Riosucio, Chocó, provocó el desbordamiento del afluente. Sus habitantes quedaron en medio del agua y claman por ayuda.“Por favor, que las autoridades competentes nos ayuden con alimentación, estamos en el agua, los cultivos de pancoger también”, dijo uno de los damnificados.En la comunidad de Santa Cruz la situación es la misma y el agua del río Tumaradó está a pocos centímetros de entrar a las viviendas. La Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres mantiene la alerta naranja por nuevas crecientes y eventuales inundaciones.“El caudal del río está ascendiendo y lo que nos ha pronosticado el Ideam es que va a seguir subiendo”, aseguró Jorge Durán Moya, coordinador de Gestión de Riesgo de Riosucio.En el municipio del Atrato, los corregimientos Arenal, Doña Josefa y La Molana, así como las veredas Bocas de Cascajo y Los Naranjos, sufrieron serías afectaciones debido a la creciente súbita del río Atrato. Cientos de hectáreas de cultivos se inundaron."Plantas eléctricas que teníamos, cultivos, casa, todo, perdimos todo, no tenemos nevera ni tanque para recoger agua, nada, ni agua filtrada, todo está perdido”, afirmó Senen Castillo, uno de los afectados.Juan Bejarano, alcalde del Atrato, señaló que la creciente arrasó con “la parte agrícola, la parte pecuaria y muchas viviendas”.El Ideam mantiene la alerta naranja en el departamento del Chocó y el pronóstico para las próximas horas indica que habrá lluvias, además de que podrían presentarse deslizamientos de tierra y crecientes súbitas de los ríos.
Desde hace cinco años, el matrimonio Cuesta encontró a través de la costura el sustento para su familia. También, el impulso para que otras mujeres se empoderen.En un país donde abunda la desigualdad, para doña Nelly, brindar una oportunidad es otra forma de construir paz.“La paz se construye por medio de cada una de las actuaciones que nosotros hacemos. ¿Por qué se genera tanta guerra? Porque quizá no tienen el sustento para darle a sus familias”, expone Nelly Cuesta Durán, integrante Macoripaz.“De coco, de borojó, de cola champaña, de guanábana, usted no más diga yo se lo llevo”, dice Maryoris Romañan, una aguerrida mujer que sufrió desplazamiento forzado. La violencia la sacó de su tierra natal, pero no le arrebató su actitud.“Para nosotros no fue fácil haber vivido esa violencia y hoy nace una iniciativa de gozo y de alegría porque cada vez que grito me le robo la sonrisa de los vecinos”, destaca la integrante de Macoripaz.El emprendimiento de Máryoris combina los sabores de los frutos de Riosucio; su esposo y su hijo se encargan de vender los helados.“Yo le ayudo a mi papá a ofrecer los bolis, también, a dar los vueltos y a decir qué hay”, comenta José García Romaña, hijo de Máryoris.Así como Nelly y Máryoris hay otras 400 mujeres que hacen parte de la Fundación Mujeres Riosuceñas Constructoras de Paz. En el 2010 se hicieron merecedoras del Premio Nacional de Paz por sus iniciativas sociales en esta zona del Chocó.“El decir sí podemos y como mujeres no nos podemos rendir; vamos a sacar a nuestras familias adelante porque la paz se construye desde estos escenarios”, resalta Rosa Romaña, representante de Macoripaz.“A estas mujeres que quieren hacer negocios, que quieren emprendimientos, es el mecanismo que ellas tienen para sacar a su familia adelante y abrazar la solución”, manifiesta Conrad Valoyes Mendoza, alcalde de Riosucio.Macoripaz recibió hace poco el apoyo de la Administración Municipal para que 100 mujeres en condición de vulnerabilidad puedan trabajar con sus familias a través del proyecto ‘Empréndete y empodérate’.
Un promotor de salud había alertado a una IPS que 96 persona de esa comunidad presentaban síntomas relacionados al COVID-19, al menos un mes atrás. En medio de ese panorama, dos menores, de 3 y 4 meses de edad, y un hombre de 60 años de un resguardo embera dobidá en Riosucio, Chocó, fallecieron con síntomas relacionados al virus. Disman Mecheche, promotor de salud, informó el 15 de marzo que cerca de 100 personas de esa comunidad de Peñas Blancas presentaban signos de fiebre, dolor de cabeza, brotes y dolor general en el cuerpo. “Hice la solicitud para que hubiera un cuerpo de brigada allá de inmediato, para que atendieran esos enfermos allá”, señaló Mecheche. Denuncia que en ese resguardo los indígenas duermen en plásticos y no hay posibilidad de mantener medidas de salubridad ni alimentación. El promotor de salud indicó que “falleció un señor con pulmonía, tenía tos seca, gripa y dolor en el cuerpo. Un niño también murió el mismo día, tenia tres meses, también por tos seca y gripa. Y el 4 de abril una niña con dolor de oído”. Por su parte, el secretario de Salud del Chocó, Carlos Tirzo Murillo, dijo que esta información no está en estos momentos notificada en los sistemas de vigilancia y añadió que “eso ha hecho que las acciones no sean oportunas”. Dos equipos de la IPS en Riosucio llegarán hasta la comunidad de Peñas Blancas para tomar las pruebas a unos 90 emberas dobidá enfermos.
El sismo tuvo una magnitud de 5,0 en la escala de Richter. Hubo una fuerte réplica minutos después. El primer sacudón se sintió este Domingo Santo a las 7:31 a.m., usuarios en redes sociales reportaron que fue percibido en Medellín y algunos sectores de Antioquia. Según el Servicio Geológico Colombiano, el movimiento telúrico tuvo una profundidad superficial, menor a 30 kilómetros, y su epicentro fue en Riosucio, Chocó. Once minutos después, a las 7:42 a.m., hubo una réplica de 4,5 en la escala de Richter. Hasta ahora no se reportan daños ni lesionados. Jazmir Blandón Palacio, secretario de Gobierno de ese municipio, manifestó que en el casco urbano no hay reporte de afectaciones. Sin embargo, está por establecer si hubo daños en la zona rural.
Organismos de socorro encontraron sin vida a Diego Alejandro Campeón Calvo, Hernando Romero y Julián Fernando Romero, luego de 27 horas de labores de rescate. Los tres hombres habían quedado atrapados en la mina El Tesoro, ubicada en zona rural de Riosucio, cuando explotaban para sacar oro. Una vez se conoció que la estructura había colapsado por una bomba de agua y lodo, que se desprendió de un socavón contiguo y que había arrastrado hasta el fondo a los tres trabajadores, los organismos de socorro hicieron esfuerzos por rescatarlos, pero horas después fueron hallados sin vida. Los mineros eran Hernando Romero, de 56 años; su hijo Julián Fernando Romero, de 30; y Diego Alejandro Campeón, de 57. Por su parte, la gobernación de Caldas lamentó la tragedia e indicó que se compromete “a tomar acciones y buscar, con el Gobierno Nacional, controlar este tipo de situaciones para que no se repitan”.
Afros e indígenas, marcados por un histórico olvido institucional, reciben servicios de profesionales en distintas áreas de la salud. El recorrido inició el pasado 5 de septiembre, el primer punto fue Riosucio, la capital del Bajo Atrato, principal receptor de desplazados por el conflicto armado. Según la Alcaldía de Riosucio, en los últimos cinco años, diez mil personas, entre afros e indígenas, han llegado a la cabecera municipal. Esta población vulnerable es foco de atención de una brigada del Ministerio del Interior, que puso sus ojos en el río Atrato. En la misión viajan odontólogos, pediatras, ginecólogos y una extensa rama de médicos especialistas empeñados en brindar sus servicios a los más necesitados. “Hay que hacer patria y ayudar a todos nuestros territorios colombianos, sobre todo en las zonas más vulnerables que tiene nuestro país, hay que ayudar”, dice Gladys Rosales, ginecóloga que integra la misión. Habitantes creen que misiones como esta son las acciones que pueden desactivar a los grupos armados y proteger a sus muchachos de los violentos.
Ferney de Jesús Naranjo salió del país ante las intimidaciones y un atentado. En Caldas se registran más de 20 denuncias como estas contra candidatos. “Hace más o menos un mes sufrí un atentado, pues casi me matan, me tocó volarme. Luego me hicieron una llamada, luego llego un pasquín muy feo a mi casa. Ya eso fue como lo que rebosó la copa. Ya paro acá, no quiero seguir más”, dijo Naranjo. Según Carlos Alberto Piedrahita, secretario de Gobierno de Caldas, “el municipio que más amenazas tiene reportadas, de los 102 líderes amenazados en todo el departamento, es el municipio de Riosucio con un total de 33 amenazas”.
Desde este sábado se corre la 'corsa rosa' con la presencia de Nairo Quintana, Daniel Felipe Martínez y otros pedalistas colombianos.
En su cuenta de X, el presidente Gustavo Petro se refirió de nuevo al escándalo al interior de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, UNGRD. El jefe de Estado indicó que es responsable por el nombramiento de Olmedo López.>>> Siga en noticiascaracol.com: Andrés Idárraga se enteró en entrevista con Noticias Caracol de que lo habían despedidoAsimismo, se pronunció sobre Iván Name, presidente del Congreso, quien resultó salpicado en las declaraciones de Esneyder Pinilla, exsubdirector de la UNGRD.“Ni el gobierno ayudó a elegir al senador Name como el presidente del Congreso, lo hizo la oposición. Ni el senador Name ha apoyado nuestros proyectos de ley. Ni en la época de transferencias del dinero del que habla Esneyder estaban los carrotanques, pero lo que sí estaban eran las elecciones”, trinó Petro.En ese orden de ideas, habló de Olmedo López, exdirector de la UNGRD, mismo que salió de la entidad cuando estalló el escándalo de los carrotanques para La Guajira.“Soy responsable del nombramiento de Olmedo, en el que creí como dirigente de la izquierda antioqueña. Lo que veo es una transferencia ilegal de dinero que iba de las víctimas de tragedias hacia campañas electorales adversas a mi gobierno”, complementó el mandatario.>>> Vea, además: Presidente Petro habría pedido la renuncia de Sandra Ortiz y Andrés IdárragaPetro concluyó hablando sobre los servidores de su gobierno inmersos en este escándalo: “El dinero público no es para financiar campañas electorales, ni proclives, ni adversas. Todo funcionario que se haya vinculado a este hecho atroz será desvinculado de la administración”.>>> Más sobre este escándalo: Fiscalía pide “prudencia” en caso de carrotanques para La Guajira
El de Katherin Sánchez es el más reciente rostro del feminicidio en Colombia. Ella falleció en Bogotá tras luchar durante dos semanas por su vida. La mujer fue atacada en su vivienda por su expareja y ante la atónita mirada de sus hijos menores de edad. >>> Otros temas: Así fue cómo, en plena vía, sujeto apuñaló a su esposa embarazada y le hizo perder el bebéDe acuerdo con la información reportada por la hermana de Katherin, el agresor sería su expareja, quien la habría buscado para recuperar su relación hasta el pasado 19 de abril, cuando llegó hasta la casa de la joven y la atacó con un cuchillo.El círculo más cercano de la mujer llegó a auxiliarla, pero la encontraron gravemente herida.Lograron trasladar a la joven al Hospital Meissen. Según el reporte médico ella sufrió una lesión en el cuello, trauma craneoencefálico severo y un paro cardiorrespiratorio. De acuerdo con otro de sus familiares, ella permaneció en grave estado de salud y luchando por su vida en una unidad médica hasta el pasado 2 de mayo, cuando falleció.Al parecer, el responsable de este feminicidio es su expareja. Trascendió que el sujeto huyó del lugar de los hechos y, supuestamente, se quitó la vida. Tras la muerte de la joven, los dos pequeños quedaron al cuidado de una tía.La familia de Katherin ahora se encuentra buscando recursos económicos para cubrir los gastos del sepelio y de igual forma el sustento de los dos niños. Por lo que crearon una campaña en la plataforma GoFundMe para recibir ayuda monetaria.>>> También puede leer: Capturan a expolicía en Bogotá que tiene ocho denuncias por agredir a mujeres
Este viernes, 3 de mayo de 2024, se llevó a cabo una nueva audiencia en San Andrés contra José Gnecco, señalado por el delito de soborno en calidad de determinador dentro del caso del asesinato de su esposa, María Mercedes Gnecco.>>> Le puede interesar: Colombia notifica formalmente a Israel la ruptura de relaciones diplomáticasEn la audiencia, el juez tercero penal municipal de San Andrés concluyó que las pruebas aportadas por la Fiscalía General de la Nación no lograron sustentar la inferencia razonable de autoría del delito de soborno y por eso dejó en libertad a Gnecco.“La inferencia razonable de autoría o participación debe estar respaldada en motivos fundados, información legalmente obtenida, tal y como lo establece el artículo 121 del Código de Procedimiento Penal, pero en el caso en el que nos ocupa, no solamente está la información del presunto determinado por la persona a quien se pretendía sobornar, sino que también la del intermediario, quien dice que no le ha llevado ninguna reacción al joven Geral; no hay indicios. Aunque todos estaban recluidos en el mismo establecimiento carcelario, eso no significa que eso se constituía en un indicio en contra del señor Gnecco Valencia, aquí no están presentes los requisitos para la injerencia racional, hay una duda sobre la ocurrencia de los hechos en la forma en cómo se dieron; inclusive, en la misma participación del señor José Manuel Gnecco Valencia”, concluyó el juez que dejó en libertad a José Gnecco.La Fiscalía argumentaba que Gnecco le había ofrecido 5 millones de pesos a Geral David Pereira Castro, de 18 años, para que se inculpara por la muerte de María Gnecco.José Manuel Gnecco y Geral David Pereira Castro estuvieron recluidos en el centro penitenciario Nueva Esperanza de San Andrés, en donde, según testimonio del joven, habría sido contactado en reiteradas oportunidades por personas enviadas por Gnecco para tratar de sobornarlo y convencerlo de que se declarara culpable del crimen.Pese a la medida de libertad, José Manuel Gnecco continúa procesado por el asesinato de su esposa María Mercedes Gnecco, perpetrado en octubre de 2021.>>> Otros temas: Nombres y apellidos más 'extraños' que se han registrado en Colombia, según la IA
La comisionista de bolsa Acciones y Valores relanzó el Fondo de Inversión Colectiva Abierto Accival Acciones dinámico, una solución que permitirá que cualquier persona pueda invertir desde 50.000 pesos a través de un fondo de acciones locales y el mercado colombiano. >>> En temas relacionados: ¿Qué alternativas de inversión tienen los colombianos?En esta entrega de #SignoPesos, Santiago Quintero, gerente de la división de activos de Acciones y Valores, explica para quién está diseñado este modelo, qué beneficios tendrá y cómo acceder con montos bajos."Con esos recursos, junto con los recursos de los demás inversionistas, nosotros como sociedad administradora gestionamos un portafolio en donde las inversiones van a estar principalmente enfocadas en acciones inscritas en la Bolsa de Valores de Colombia y en el mercado global colombiano", explicó Quintero.Algunas de las acciones en las que están diversificados sus portafolios incluyen grandes empresas como Bancolombia y Ecopetrol, aunque con el relanzamiento ahora podrán tener acceso a acciones de Apple, Nubank y Amazon.>>> Puede interesarle: ¿Cuáles son los canales más populares para hacer operaciones financieras en Colombia?