El francés, líder de la general del Tour de Francia, se mostró confiado de cara a la contrarreloj de 27 kilómetros de Pau.
"Estoy dispuesto a darlo todo. Cada día que paso de amarillo es un premio, ahora tengo una razón más de sufrir en una crono que me conviene, que disputaré con el amarillo. Pase lo que pase, estaré contento si voy a tope", aseguró.
"No digo que vaya a ganar, pero creo que el recorrido me permite defender el maillot amarillo. (Geraint) Thomas forma parte de los que van a salir a ganar", comentó.
Sobre la etapa de este jueves dijo: "No ha sido una jornada tan fácil como parece, pero estoy contento de seguir de amarillo. Al final todo ha ido bien y estoy contento".
"La escapada no era peligrosa, el primero de ellos estaba a 13 o 14 minutos. Queríamos mantener la ventaja pensando que algunos estarían interesados en ganar la etapa, pero no, todo el mundo parecía contento de que controláramos la carrera", dijo.
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