Aunque no lo parezca, es muy común que las personas sufran lesiones o heridas mientras tienen relaciones. El desenfreno del momento puede llevar a las parejas a experimentar posturas nuevas que desencadenan en una visita a la sala de urgencias.
Según una encuesta revelada por el portal Meetville, uno de cada tres adultos puede sufrir una lesión mientras sostiene una relación sexual.
Las heridas más frecuentes son los moretones, golpes contra muebles, caídas y quemaduras por el roce de los cuerpos con superficies como sábanas o alfombras.
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Incluso, en el peor de los casos, los amantes pueden experimentar torceduras de muñecas o tobillos, contracturas musculares y desgarros.
Kevin Jardine, especialista en salud y acondicionamiento físico, indicó que las lesiones sexuales suelen sentirse al día siguiente: “Durante el sexo, las endorfinas se están elevando. Las endorfinas son la versión natural de la morfina del cuerpo, conocidas como hormonas para sentirse bien. Si se encuentra en una posición incómoda durante las relaciones sexuales, es posible que no sienta la incomodidad“.
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Pero no solamente las posturas generan lesiones, los lugares también son un factor fundamental.
Conforme con el mismo portal, los sitios más peligrosos para sostener relaciones sexuales son los sofás, escaleras, dentro de un carro, las bañeras, las sillas, los inodoros y el jardín.
Así la situación, piden pensar dos veces el experimentar en el sexo con su pareja, pues puede que una velada llena de lujuria y amor termine en el hospital.
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