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La joven dice en un video que su ahora exnovio le había manifestado que tenía la intención de tatuarse el nombre de ella, pero en un principio ella no quería que lo hiciera. Sin embargo, todo cambió cuando vio unas fotos en el celular de él.
“Oye, acompáñame a un partido de fútbol y de ahí nos pasamos a donde me van a tatuar y yo, la neta, no quería dejar que se tatuara mi nombre”, declaró la joven en el video.
Ella descubrió que su pareja tenía una serie de fotos y videos con otra mujer en un motel, por lo que su opción sobre que su novio se tatuara su nombre cambió como venganza por la infidelidad
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“Yo estaba consciente que era algo que él ya tenía planeado hacer, pero están de acuerdo que si yo lo enfrentaba y le decía que ya hasta aquí, pues ya no se iba a tatuar, entonces yo decidí esperarme hasta que el tatuaje estuviera totalmente terminado para poder enfrentarlo y mandarlo a la ching***, y pues así fue", reveló la usuaria de TikTok.
El video se viralizó en TikTok y ya cuenta con más de 300.000 visualizaciones, 50.000 me gusta y cientos de comentarios por parte de internautas, algunos aplaudiendo el proceder de esta joven y otros la criticaron por la actitud que tomó.
Vea el video de este hecho aquí.
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Serenata de reguetón
Entre otras historias virales de desamor está la de un joven enamorado que se rodeó con sus amigos y
El romántico muchacho y sus amigos, con mucho entusiasmo, se pararon con un parlante de buen tamaño a dedicarle las notas musicales a la mujer. No se entiende si de amor o de despecho, el caso es que el enamorado estaba decidido a que ella lo escuchara y la llamó a gritos.
Ella se asomó a la ventana, pero al parecer el detalle de la serenata de reguetón no le hizo mucha gracia, pues enseguida se volvió a entrar.
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Una persona que observó la escena comenzó a grabar la curiosa serenata de reguetón. Y es que, hoy en día, no es fácil encontrar entre gente joven este tipo de dedicaciones. Normalmente, se hacen a través de audios o listas de reproducción.
Quien grabó destacó la importante labor de quien sostenía el bafle, que entregado a su papel lo alzó con todas sus fuerzas para que se escuchara más alto. Mientras que los amigos le ponían la mejor energía a su sentida interpretación, uno de los que grabó presentía lo que iba a suceder.
Mientras que sus amigos le ponían la mejor energía a su sentida interpretación, uno de los que grabó presentía lo que iba a suceder.
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Sin embargo, el momento triste llegó cuando la joven, llena de rabia o dolor, no se sabe, apareció nuevamente en la ventana y le lanzó un baldado de agua a los jóvenes de la serenata de reguetón. El joven enamorado logró evadir el chapuzón, no una sino dos veces. Su corazón tal vez estaba destrozado, pero por lo menos quedó seco.
Los otros amigos corrieron al saber que la serenata de reguetón no había dado los frutos esperados. Y es que en el amor a veces se gana y a veces se pierde. Y así lo entienden quienes han visto las imágenes.
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